ENCENDIENDO LA LLAMA DEL AMOR

ENCENDER UN ALMA

La porción de la Torá Behalotjá comienza con el mandamiento a Aarón, el Sumo Sacerdote, de encender diariamente la menoráh de siete velas, el “candelabro” del Tabernáculo, al igual que varios siglos más tarde se haría en el Templo de Jerusalem a través del Sumo Sacerdote en funciones. Aprendemos en el libro de Proverbios 20:27 que “la vela de Di-s es el alma del hombre”. Las velas son almas que deben ser encendidas.

Las siete luces de la menorá corresponden a las siete almas judías características. (Las ocho luces que encendemos en la festividad de Jánuca corresponden a ocho almas, una revelación más elevada aún del origen del alma judía).

La Unión Verdadera

Di-s le ordena a Aarón encender las llamas de la menorá con la palabra Behalotjá, que significa “Cuando eleves (las llamas)”. Al definir este mandamiento, nuestros sabios explican que el sacerdote debe mantener el fuego con el que enciende las luces de la menoráh junto a la mecha hasta que la llama de la vela se eleve por sí misma, independientemente y ya no requiera la fuente de fuego para poder arder.

Este principio también se aplica a las almas.

Cuando deseamos encender otra alma, debemos sostener firmemente nuestro propio fuego junto al alma que está siendo encendida, hasta que esta ya no dependa de nosotros. Aunque en muchos tipos de relaciones, incluyendo la del Rebe-discípulo, el discípulo aparenta ser totalmente dependiente de la llama del Rebe, la señal de la unión verdadera es cuando cada alma se conecta madura e independientemente con la otra.

(En su libro el Kuzari, rabí Iehuda Halevi explica que cuando un judío se balancea hacia atrás y hacia delante durante la plegaria o el estudio de la Torá, está manifestando la candela de su alma, que ha sido encendida y arde independiente.)

 La Llama Tridimensional del Amor

La palabra hebrea utilizada por nuestros sabios para “llama” es shalhevet, cuyo valor numérico es 737. En la plegaria del Shemá Israel recitada tres veces diariamente citamos el mandamiento de la Torá de amar a Di-s en tres niveles- “con todo nuestro corazón, y con toda nuestra alma, y con toda nuestra fuerza“.  (Bejol levavjá, uvejol nafsheja uvejol meodeja). El valor numérico de esta frase también es 737. El mandamiento de encender la llama está completo sólo cuando los tres niveles de amor han sido encendidos en el alma y arden independientemente.

El corazón tiene varios atributos: miedo, temor, compasión sinceridad, devoción, etc. Pero encender el fuego del alma es un acto de amor. El epítome del amor está descrito en el Cantar de los Cantares como shalhevet-kah, “la llama de Di-s”.

Aarón, el sacerdote a quien se le ordenó encender las velas, representa el amor infinito. Cuando enciende las velas, enciende esta experiencia de amor en los corazones de sus semejantes judíos. Los propios judíos también son encendedores de llamas, atizando las almas de aquellos que los rodean hasta que experimenten también el ascenso independiente de amor de sus almas hacia Di-s.

Una Meditación acerca de la Llama

En el Sefer Ietzirá, el Libro de la Formación, las diez Emanaciones de luz son comparadas con una llama, shalhevet, conectada a una gajelet, una braza o fuente de energía. Esta descripción se compara con la estructura física de la llama y evoca una meditación sobre las velas de Shabat.

Cuando contemplamos una llama, vemos que tiene tres niveles:

·        La parte azul (o negra) de la llama adyacente a la fuente de Energía, la mecha. El término místico para esta parte de la llama es jashmal. La mecha simboliza la dimensión física del corazón ardiendo con amor a Di-s. El verdadero amor afecta físicamente al corazón.

·        La parte blanca que rodea a la anterior. El término místico para esta parte de la llama es eish, “fuego” y corresponde a amar a Di-s con toda nuestra alma. Así como el alma no toca el cuerpo, esta parte no toca la mecha.

·        Un aura o halo rodeando la llama. El término místico para esta parte es nogah, y corresponde al amor a Di-s con toda nuestra fuerza.

El valor numérico de los tres términos, jashmaleish y nogah es nuevamente 737, el valor numérico de shalhevet.

En resumen. El Secreto de la Shalhevet

“Y amarás a Di-s con todo tu corazón, y con toda tu alma con toda tu fuerza.

 ColorNombre MísticoCorrespondencia con el versículo
La llama interior que rodea a la mechaAzul/negroJashmalBejol levavjaCon todo tu corazón
La llama que rodea la llama internablancoEishBejol nafshejaCon toda tu alma
El aura que rodea la llamahaloNogahBejol meodejaCon toda tu fuerza

Cuando amamos a Di-s con todo el corazón, el alma y la fuerza, hemos encendido también la llama completa de amor por Su Torá, Su pueblo de Israel y Su Tierra. Este amor asciende con un poder independiente, encendiendo la luminaria del amor por Di-s en las almas de todos aquellos que encontramos en la vida.

Domingo 13 de Sivan 5778 – 27 de mayo 2018

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *