“Y a los hijos de las concubinas de Abraham, Abraham les dio regalos y los envió lejos de Isaac su hijo, cuando todavía estaba vivo, al este a la tierra de Kedem.” Rashi explica que los regalos que Abraham dio a los hijos de las concubinas eran “el nombre de la impureza”.
Esta es la raíz y la fuente de todas las religiones orientales, “la tierra de Kedem”, lit oriente. Si uno viaja a la India, por ejemplo, se ve mucha impureza idólatra, muy lejos de la proclama de Abraham que hizo añicos a los ídolos. Sin embargo, una chispa sagrada que proviene de Abraham está cautiva dentro de la impureza. No es coincidencia que la casta más alta de la India se llame Brahmanes, una clara alusión a Abraham.
Abraham representa el rasgo de bondad y amor. La rectificación de Oriente es la rectificación del amor. Abraham tiene a su esposa principal, Sara, y a las concubinas (Hagar-Ketura). Estas esposas corresponden al amor de Di-s en su nivel superior, un amor que existe en la Nación de Israel, y un buen amor por Di-s que puede existir entre las naciones del mundo. Una persona que se convierte completamente y se une a la Nación de Israel se convierte en hijo de Abraham y alcanza el amor por Di-s en su nivel superior, quien no lo hace debería convertirse un Justo Gentil, que reconoce la verdad de la Nación de Israel y camina en el camino de Abraham, quien fue “el padre de una multitud de naciones”.