Pregunta 1:
Actitud hacia el “Mal de Ojo” (Ain HaRá)
Recientemente hemos experimentado una serie de problemas médicos no graves, alabado sea Dios (B”H), pero desconcertantes, y también algunas averías/accidentes con nuestro coche. A pesar de la educación que recibí, que consideraba mucho el temor al mal de ojo, me esfuerzo mucho por no creer en ello, tal como entendí que instruyó el Rebe de Lubavitch.
No obstante, la secuencia de eventos ha sido un poco inquietante para nosotros, y agradeceríamos mucho una bendición para que esto sea suficiente, y que, con la ayuda de Dios (Be’ezrat Hashem), salgamos de aquí a un nuevo camino de éxito material y espiritual.
Respuesta:
Ciertamente existe el mal de ojo (Ain HaRá) – es decir, la “mala vista” de Efrón el Hitita (Efrón en guematria [valor numérico] es “mal ojo”, como es sabido).
El mal de ojo es la inclinación al mal (Ietzer HaRá) de cada uno, y por lo tanto, la corrección-anulación del mal de ojo (que está dentro de ti mismo) es no creer en su existencia en absoluto, no darle credibilidad al ser tu inclinación al mal, que es tu fuerza imaginativa, una pura imaginación sin ningún asidero en la realidad verdadera (“No hay nada fuera de Él”, que es la esencia del Bien).
Por lo tanto, se entiende que el “ojo bueno” (Tov Ain) (“Él te bendecirá/serás bendecido” con todo lo bueno material y espiritualmente – así te bendecimos) es precisamente la inclinación al bien (Ietzer Tov).
Pregunta 2:
Cadáver de Rehén Traído a Entierro en Israel
Durante dos años he estado acompañando a la madre de un rehén asesinado en Gaza, hijo único, que estudió dos años en el programa de estudiantes de nuestra casa. Recientemente tuvimos el mérito de que su ataúd fuera devuelto y él obtuviera un entierro en Israel (Kever Israel).
Me gustaría una bendición para la madre del rehén, que Dios vengue su sangre (Hashem vengue su sangre), y un consejo sobre cómo continuar después del cierre de este ciclo y su descanso final.
Respuesta:
Una bendición para la madre, para que sepa que su hijo (Hashem vengue su sangre) es un santo, y su lugar en el Mundo de la Verdad está por encima del lugar de los justos, y que con cada palabra de estudio de Torá, oración y recitación de Salmos que ella dice por él, y con cada buena acción que ella realiza por su mérito, su alma pura asciende de fuerza en fuerza en los mundos superiores y provoca salvaciones para el pueblo de Israel aquí abajo.
¡Una bendición de mucho éxito en toda tu bendita labor!




