BEHAALOTJA בְּהַעֲלֹתְךָ
Números 8:1 – 12:16 Haftara: Zacarias 2:14 – 4:7
Por lo general queremos el bien, pero a veces (demasiado) a menudo nuestro deseo no se realiza y nuestras acciones son negativas. ¿Tiene valor el deseo original o son las acciones las únicas que cuentan?
Y en general, si el propósito de todo nuestro servicio a Dios es “traer los días del Mashíaj”, ¿significa esto que mis malas acciones impiden la venida del Mashíaj?
Sorprendentemente estas preguntas están relacionadas con otra pregunta, y es: ¿cuántas opciones tenemos en relación con nuestras acciones? ¿Las controlamos siquiera?
Por supuesto la libre elección es un elemento principal en el judaísmo, pero uno de los sabios especiales de Israel, el rabino Hasdai Kreskas, sabio de la edad Media alumno del Ra”N y maestro de Rabi Albo, cree que la elección se nos da precisamente en relación con nuestros deseos internos, con nuestra actitud hacia las acciones que hemos realizado y los que haré, pero los actos en sí los hacemos sin mucha elección.
Esta sorprendente actitud debería llenarnos de optimismo, incluso si actuamos mal podemos optar por tratar de corregir nuestras acciones, arrepentirnos y hasta enojarnos por ellas y de esto obtener ayuda para actuar bien la próxima vez. Rabí Hasdai dirigió sus palabras a los mártires, los anusim que hubo en España en sus días para animarlos a seguir fieles a sus buenos deseos, aunque sus obras estén corrompidas. Vivió 100 años antes del decreto de la inquisición, pero ya en su época había persecuciones, conversiones forzadas y asesinatos, como fue el caso de su propio hijo que se negó a dejar su fe.
Cada uno de nosotros que se siente como “forzado” al realizar sus acciones por patrones negativos repetidos o por adicciones, Dios no lo quiera, y saber esto puede darle consuelo por ello.
¿Y cómo se relaciona todo esto con la Entrega de la Torá? Todo lo que sucede, tanto lo bueno como lo malo, sucede por Dios, pero lo bueno y lo malo no son realmente iguales.
Dios plantó la Torá en el mundo y empuja al mundo hacia el bien constantemente. La Torá nos muestra “El bien y la vida… y el mal y la muerte”, agudizando las diferencias entre el bien y el mal, pero también dice “Y elegirás por la vida” y así sesga nuestra elección hacia el lado del bien.
En el día de la entrega de la Torá Dios nos muestra el bien hacia el que seguramente va el mundo. Podemos seguir el camino de la Torá y las mitzvot y permitir que esta bondad llegue por un camino recto, o podemos seguir otros caminos de no tanta gracia y paz, pero que también nos llevarán al final a la bondad absoluta que a la que nos atrae la Torá porque eso es lo que Dios decretó.
Es costumbre ver el bien y el mal compitiendo entre sí, en una especie de juego o competencia. Pero la innovación del rabino Jasdai Kreskas es que en realidad no están compitiendo, porque todo lo que sucede en el mundo es para bien. Aunque en este momento parezca a nuestros ojos que hay cosas malas, en el futuro tendremos el privilegio de bendecir por todo lo “bueno y al Benévolo”, y ya ahora podemos “aceptar la Torá” en su contenido completo y vivir inspirados por esta nueva conciencia, la realidad mesiánica hoy en este mundo.