CUATRO CORONAS Y LA PIRÁMIDE DE LAS NECESIDADES HUMANAS 

Tres de los utensilios que se le ordena a Moshé que construya en el Tabernáculo, tienen una característica especial en común. El arca, la mesa y el altar de oro, todos debían ser elaborados con una diadema de oro único o corona alrededor de su borde superior.  

Con respecto al arca, Dios ordenó:

“Y la revestirás de oro puro, por dentro y por fuera la cubrirás, y le harás una corona de oro alrededor

וְצִפִּיתָ אֹתוֹ זָהָב טָהוֹר מִבַּיִת וּמִחוּץ תְּצַפֶּנּוּ וְעָשִׂיתָ עָלָיו זֵר זָהָב סָבִיב

Para la mesa de los panes de la proposición: 

“Y la cubrirás de oro puro, y le harás una corona de oro alrededor

וְצִפִּיתָ אֹתוֹ זָהָב טָהוֹר וְעָשִׂיתָ לּוֹ זֵר זָהָב סָבִיב

Y sobre el altar de oro, sobre el cual se quemaba incienso,

 “Y lo cubrirás de oro puro, su parte superior, sus lados en derredor y sus mancuernas; y le harás una corona de oro alrededor .

וְצִפִּיתָ אֹתוֹ זָהָב טָהוֹר אֶת גַּגּוֹ וְאֶת קִירֹתָיו סָבִיב וְאֶת קַרְנֹתָיו וְעָשִׂיתָ לּוֹ זֵר זָהָב סָבִיב

La frase de tres palabras que repite y describe estas tres diademas de oro es “una corona de oro alrededor” (זֵר זָהָב סָבִיב, zer zahav saviv).  

Rabi Shimón bar Iojai, el maestro de la tradición esotérica de la Torá señala que hay tres coronas diferentes: “la corona de la Torá, la corona del sacerdocio y la corona de la realeza”.  

Estas tres coronas corresponden a las tres coronas de diademas talladas en el arca, en el altar de oro y en la mesa de los panes de la proposición, en ese orden. En el arca se encuentran las Tablas del Pacto y los rollos de la Torá escritos por Moshé. El altar de oro es un claro símbolo del sacerdocio. La mesa de los panes de la proposición es un símbolo de la mesa del rey, de donde se origina el sustento de todo el reino, ya que el deber del rey es mantener a su pueblo.  

Sin embargo, Rabi Shimón bar Iojai agrega una cuarta corona y dice: “Y la corona de un buen nombre se eleva por encima de las demás”. No hemos encontrado una cuarta corona de diadema descrita como parte del Tabernáculo o sus utensilios. La realización de esta meditación particular en las coronas de diadema del Tabernáculo es proporcionada por el análisis cuantitativo de la Torá. Este tipo de hallazgos se pueden identificar como la especialidad del rabino Ginsburgh.  

Como resulta el primer párrafo (llamado parshiiá) en parashat Terumá. Este primer párrafo (Éxodo 25, versículos del 1 al 9) describe la solicitud que Dios hizo a la gente de donar de corazón para el Templo y enumera los diversos materiales que debían entregarse. Los 9 versículos de este párrafo constan de 74 palabras y 295 letras en total. 295 es el valor de la frase de tres palabras que se repite con respecto a cada una de las diademas de oro, “una corona de oro alrededor” (זֵר זָהָב סָבִיב). De hecho, la potencia de este hallazgo maravillosamente relevante se ve reforzada por el hecho de que el total de palabras en el párrafo, 74, es el valor de la palabra “rodear” (סָבִיב). Esta última relación merece una explicación más detallada.  

La corona no es sólo una diadema colocada sobre la cabeza de un rey. La corona es el nombre de la sefirá más alta entre las Diez Sefirot, los canales de flujo Divino a través de los cuales Dios crea y mantiene la creación. Como la corona que se coloca sobre la cabeza, la sefirá de la corona y las coronas que adornan los utensilios en el Templo, representan lo que está por encima, por encima del intelecto en el caso de la sefirá de la corona), por encima del individuo en el caso de la corona del rey y la Luz Divina Infinita que se cierne sobre la Torá en el caso de este párrafo. En Cabalá, la luz que está por encima, la luz de la corona, también se llama “la luz que rodea todos los mundos” (סוֵֹבֵב כֹֹּל עָלְמִין), donde mundos aquí se refiere a todas las formas de la realidad.  

Notarás que “circundar” y “rodear” en hebreo son muy similares, de hecho, son casi la misma palabra. La corona del buen nombre es, pues, la luz infinita que está más allá de nuestra experiencia consciente y limitada. Esto significa comprender que Dios está aquí abajo en todo lo que existe, pero además el Baal Shem Tov quiso que todos seamos concientes de que en verdad Dios está mucho más que en todo, a la vez también está por encima de todo. Esta es una de las razones por las que fue llamado el Baal Shem Tov, es decir, el Amo del Buen Nombre, una alusión a la corona del buen nombre, la Luz Infinita de Dios que envuelve toda la realidad incluida nuestra alma y, por lo tanto, se cierne sobre él e incluso sobre el Tabernáculo mismo. 

Las Tres Coronas y la Jerarquía de Necesidades de Maslow 

La palabra “corona” o “diadema” (זֵר, zar) en hebreo, cuyo valor es igual a “luz” (אוֹר), está relacionada con la palabra “cinturón” (אֵזוֹר) o “faja”. En hebreo moderno, esta palabra ha llegado a significar “área”. Y así, los tres vasos, el arca, el altar de oro y la mesa de los panes de la proposición pueden verse como representando tres áreas de la vida.  

Comenzando por el área más baja, la mesa de los panes de la proposición corresponde al área o el lado físico de la vida, ya que el pan es el símbolo universal de la alimentación y el sustento. Como mencionamos, la corona que rodea la mesa del pan de la proposición representa la realeza o la soberanía del individuo y su responsabilidad por sí mismo. Como veremos, esta es la seguridad que uno necesita para sus necesidades físicas. 

Sobre el altar de oro se quemaba incienso y su fragancia se extendía por todo el Tabernáculo. En el Templo de Ierushalaim, los sabios describen que la fragancia era tan fuerte que se extendía hasta Ierijó (esto podría ser una descripción física o simbólica, o tal vez incluso ambas, ierijó de la raíz “oler”). La fragancia representa las relaciones que son el combustible del espíritu humano. El espíritu se desarrolla a través de las relaciones, particularmente las relaciones familiares. Como dijimos, la corona de la mesa representa el sacerdocio. En la psique, el sacerdocio representa los poderes psicológicos que impulsan nuestra capacidad para construir relaciones saludables. Estos pueden ser nuestra autoestima, nuestra capacidad de respetar a los demás, nuestra fuerza y libertad interior. 

 Finalmente, el arca representa nuestra capacidad de buscar todo lo que está más allá de nuestras necesidades físicas y psicológicas. Se podría decir que el arca representa las necesidades del alma, la necesidad de sentir que la vida tiene un propósito y significado y que estamos aquí con un propósito. El arca no tiene un papel funcional per se. Es más bien como una inspiración para todo lo que sucede en el Tabernáculo y fuera de él. La diadema que la rodea representa a la “corona de la Torá”, que en nuestra vida puede entenderse como la necesidad de recreación. La Torá no es solo una fuente de leyes y no solo establece cómo debemos vivir nuestras vidas. En su nivel más alto, la Torá es un deleite, es el instrumento mediante el cual podemos disfrutar de nuestra conexión con Dios. Como dijo el rey David: “Si tu Torá [Dios] no fuera mi deleite, habría perecido en mi aflicción”.  

Habiendo analizado los tres utensilios y sus diademas según su correspondencia con las diferentes áreas de la vida, esto nos recuerda la estructura de jerarquía de necesidades de Abraham Maslow. Veámoslo un momento: 

Analizando y Expandiendo la Pirámide de Maslow 

Ahora bien, si recuerdan, encontramos tres utensilios con tres diademas o coronas y una corona general que rodea todo el Tabernáculo. Los tres utensilios corresponden al primero, tercero y quinto nivel de la pirámide de Maslow. Como dijimos, la mesa de los panes de la proposición representa nuestras necesidades físicas, el altar de oro nuestras relaciones y el arca representa las necesidades de nuestra alma de plenitud (o autorrealización), lo que significa realizar la misión por la cual nuestra alma entró en este mundo.  

Las diademas o coronas de cada utensilio representan la “luz circundante”, o las condiciones más espirituales o psicológicas que hacen posibles y alcanzables aquellas necesidades a las que corresponde el utensilio. Esto nos revela que, en la jerarquía de Maslow, cada nivel tiene un nivel de “condiciones” por encima suyo; cosas que hacen que el nivel inferior sea sostenible y posible.  

Por lo tanto, la corona de las necesidades fisiológicas es la seguridad, que según Maslow consiste en la seguridad personal, el empleo, etc. Son como la corona de nuestras necesidades fisiológicas. Lo mismo ocurre con el tercer nivel, el nivel de las relaciones (que aquí se describen como “amor y pertenencia”). El nivel de las relaciones está “rodeado” o coronado por el cuarto nivel, que son condiciones psicológicas para tener buenas relaciones. Un individuo que no siente autoestima, que no se valora, no puede respetar a los demás y no puede desarrollar relaciones positivas.  

El quinto nivel, que consiste en nuestra necesidad de realizarnos a nosotros mismos y que hemos descrito como las necesidades del alma, no tiene una corona en la jerarquía de Maslow. Pero, el arca, que corresponde a este nivel, sí tiene una diadema. De modo que nuestra correspondencia nos lleva a suponer que existe un nivel “circundante” que proporciona las condiciones para la autorrealización y las necesidades del alma. Esta es una adición importante a la teoría de Maslow. Ahora veremos cómo el pensamiento jasídico nos ayuda a definir qué contiene esta corona de las necesidades del alma. 

 Además, vimos que hay una corona general que rodea a los tres utensilios y sus diademas, la llamada Corona del Buen Nombre. Este nivel tampoco es visible en el modelo de Maslow y, una vez más, el Jasidut nos ayuda a definir de qué se trata este nivel. Para entender cómo definir estos dos niveles que faltan, primero dibujemos la correspondencia completa: 

  El modelo de Maslow consiste en: 

Modelo de MaslowConsiste enEn el TabernáculoSefirot
FeCorona del Buen NombreFe
DeleiteDiadema del ArcaAlma (espiritual)Placer
Auto realizaciónMotivación / VoluntadArcaVoluntad
Autoestima, etc.Estima, estatus, desapegoDiadema del AltarMente (psicológica)Sabiduría
RelacionesConexiones (gusto a gusto)Altar de OroComprensión
SeguridadSeguridad (confianza, confía en las dos sefirot de victoria)Diadema de la mesaCuerpo (físico)Emociones
Necesidades         fisiológicasPan, ropa, refugioMesa del pan de la ProposiciónReino

  Hay mucho que desarrollar sobre la base de toda esta correspondencia completa, pero ya destaca que los dos niveles por encima de la parte más alta de Maslow en la jerarquía de necesidades son el Placer y la Fe. El placer es la condición necesaria para la autorrealización. En el pensamiento jasídico, este placer se considera el alma de la voluntad de perseguir el propósito de la vida. El nivel más alto, la fe es como el alma de toda la estructura, la condición que permite satisfacer todas nuestras necesidades en la vida. 

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