No existe realmente un punto de comienzo para tus estudios. Aprender Cabalá y Jasidut es mucho más que sólo estudiar el vocabulario cabalístico, comprender los tantos mapas de los mundos mundos espirituales o entender ideas nuevas y profundas. Más bien se trata de cómo reconocer, experimentar y acercarse a Dios.
Todo tema o tópico específico que elijas debe llevarte al mismo destino. Por lo tanto, puedes comenzar por cualquier lugar. Existe una serie de libros introductorios en castellano que apuntan a enseñar los secretos de la Cabalá y el Jasidut. Desafortunadamente, no todos esos textos pueden considerarse confiables muchos de hecho son falsos y llevan hacia la desorientación. Es de suma importancia aprender la Cabalá y el Jasidut de una fuente auténtica.
Por supuesto recomendamos todos los textos que proponemos en La Dimensión Interior y también establecer un sistema diario de estudio del texto más básico del jasidismo, el Tania de Rabí Shneur Zalmen de Liadi (la lección diaria se puede encontrar en la página de Jabad en español)
De todas maneras, cuando estudiamos este o cualquier otro texto en español, debemos recordar que cualquier traducción de los términos hebreos nunca puede ser exacta. El significado sutil y las inferencias que conllevan estos términos sólo se pueden captar en el original hebreo, el lenguaje de la creación. Por lo tanto, todo estudiante serio debe comprender que, para ir más allá de un nivel de principiante, es esencial dominar el idioma hebreo.
(Por cierto, hay una conexión intrínseca entre la Cabalá y el idioma hebreo per se. De hecho, el primer texto de Cabalá, Sefer Ietzirá, es también el primer texto de gramática hebrea.)
Además, más allá de la cuestión de terminología, pueden surgir dificultades debido a las diferencias básicas entre la forma de leer y estudiar que tiene la cultura occidental y la de la Torá y la Cabalá.
La cultura occidental ve el objetivo del estudio como la acumulación de conocimiento, o por lo menos la recopilación de información; tanto al leer como al hojear un texto, la intención usualmente es extraer los puntos útiles y seguir adelante.En contraste, la finalidad del estudio de la Torá y la Cabalá es el refinamiento del comportamiento. A través de nuestro estudio tratamos de acercarnos a Dios, sabiendo que la única manera que podemos hacerlo es emulando Sus características, como dicen los sabios: “Así como Dios es misericordioso, tú debes ser misericordioso”.