Nuestra porción de la Torá está repleta de números, y aquí hay otro: Veintidós mil levitas reemplazaron físicamente a los veintidós mil primogénitos. Pero quedaron 273 primogénitos que todavía necesitaban ser redimidos. Cada uno de ellos se redimió con cinco shekels (entregado a Aharón y sus hijos).
Esta es una alusión a la redención de las almas perdidas. Una posibilidad es que la redención se lleve a cabo a través de los levitas, cuyo trabajo es tocar música. Ellos despiertan a cada persona con su propia melodía personal, acercándolo así a la santidad. Pero algunas almas están tan lejos que incluso su melodía no las toca. Solo pueden ser acercados a través de cálculos, con guematria, por ejemplo. ¡El número 273 en guematria es igual a… גימטריה, guematria! En la ciencia actual, el número 273 es el “cero absoluto” (273,15 grados Celsius bajo cero). En el cero absoluto no hay movimiento ni vida. Es una parábola del congelamiento (כפור, cfor) de la herejía absoluta (kfirá, כפירה, afín a kfor). Quizás la guematria despierte a este hereje (cofer) y caliente su corazón…