Meditación diaria de Rab Itzjak GinsburghEmor – Dile a los Cohanim
Cada meditación una lección de Jasidut y Lashón Hakodesh
“Y Dijo Havaiá el Moshé: ‘Di a los sacerdotes, a los hijos de Aarón, y les dirás que no se impurifiquen por un muerto de su pueblo’”. [Vaikrá-levitico 21:1]
א וַיֹּ֤אמֶר יְהֹוָה֙ אֶל־משֶׁ֔ה אֱמֹ֥ר אֶל־הַכֹּֽהֲנִ֖ים בְּנֵ֣י אַֽהֲרֹ֑ן וְאָֽמַרְתָּ֣ אֲלֵהֶ֔ם לְנֶ֥פֶשׁ לֹֽא־יִטַּמָּ֖א בְּעַמָּֽיו:
“Vaiomer Havaiá el Moshé: ‘emor el hacohanim bnei Aharón, veamarta aleihem, lenefesh lo itamá beamav.’”
Rashi explica sobre la repetición: “Diga… y les dirás…”, Esto viene a advertir a los grandes (adultos) sobre los pequeños (niños)”. En otras palabras, no solo está prohibido que los cohanim adultos (sacerdotes) (que están obligados a cumplir los mandamientos) se vuelvan ritualmente impuros, sino que también está prohibido causar que un niño cohen se vuelva ritualmente impuro.
Este es un principio educativo fundamental: debemos asumir la responsabilidad de influir positivamente en todos aquellos que son ‘más pequeños’ que nosotros, no solo en nuestros propios hijos, sino en todos aquellos a quienes podemos enseñar e inspirar. En hebreo “advertir”, להזהיר, lehazhir, de la misma raíz hebrea que zohar, זהר, resplandor, así, según el comentario de Rashi también significa “iluminar”. Debemos iluminar el mundo para los demás, no solo para nosotros mismos. Además, cuando una persona está ocupada en iluminar el mundo para los demás, su propia luz se intensifica. “Esto viene a advertir a los adultos sobre los niños”, significaría “iluminar a los adultos por el simple hecho de que están ocupados con los niños”.
Esto también es instructivo a nivel personal. A veces somos ‘grandes’ y a veces somos ‘pequeños’. “Grande” es un estado de conciencia expandida y madura, cuando una persona cumple la voluntad de Di-s con alegría y de buen corazón. “Pequeño” es un estado de consciencia contraída e inmadura, cuando una persona cae de su nivel anterior, se siente distante y sumergida en una mentalidad aburrida y ocupada en pequeñeces ¿Qué podemos hacer cuando caemos?
Como vemos en nuestros versos, está el servicio de “advertir al grande por lo pequeño”. Cuando estás en un estado de conciencia expandida, prepara el terreno para la conciencia contraída que vendrá inevitablemente. Prepárate ahora para la futura caída y asegúrate de que no sea una caída total en el pecado, Di-s lo prohíba, sino más bien, una caída relativa desde un estado iluminado. Por ejemplo, en Shabat, prepárate para la caída en relación a los días de la semana.
¿Cómo hacemos esta preparación? Cuando estás en un estado expandido no pienses ni por un momento que eres grandioso. Recuerda que todo lo que tienes, los recursos físicos, materiales, intelectuales, emocionales y espirituales, provienen de Di-s. Agradece a Di-s por tu situación positiva. Así cuando caigas podrás fortalecerse al recordar tu estado expandido y así finalmente regresar y crecer aún más.
Pero si durante tu estado de ánimo expandido cometes el error de pensar que se debió a tus propios talentos, si se te subió la grandeza a tu cabeza, entonces verdaderamente has caído en las profundidades. “Advertir al grande de lo pequeño”, nos advierte de asegurarnos de que nuestros momentos de grandeza no nos arrojen a las profundidades de la pequeñez.
(Del libro del Rabino Ginsburgh, Maaian Ganim – El Manantial de los Jardines)