LO QUE HAY QUE RECORDAR CUANDO ERES GRANDE

“Diles a los Sacerdotes, los hijos de Aarón y les dirás, no deberán impurificarse por un alma de su pueblo”. Rashi explica: “Di”, “y dirás” – “Esto viene a advertir a los grandes (adultos) sobre los pequeños (niños)”. En otras palabras, no solo está prohibido que los cohanim (sacerdotes) adultos (que están obligados a cumplir los mandamientos) se vuelvan ritualmente impuros, sino que también está prohibido hacer que un niño cohen se vuelva ritualmente impuro.”

Este es un principio educativo fundamental: debemos asumir la responsabilidad de influir positivamente en todos aquellos que son “más pequeños” que nosotros, no solo en nuestros propios hijos, sino en todos aquellos a quienes podemos enseñar e inspirar. “Advertir”, de la raíz hebrea zohar, según el comentario anterior de Rashi, también significa “iluminar”. Debemos iluminar el mundo para los demás, no solo para nosotros. Además, cuando una persona se ocupa de iluminar el mundo para los demás se intensifica su propia luz. “Esto viene a advertir a los adultos sobre los niños” significaría entonces, “iluminar a los adultos por el hecho mismo de que están ocupados con los niños”. 

Esto también es instructivo a nivel personal. A veces somos ‘grandes’ y a veces somos ‘pequeños’. ‘Grande’ es un estado de conciencia expandida, cuando una persona cumple la voluntad de Di-s con alegría y amplitud de corazón. “Pequeño” es un estado de conciencia contraída, cuando una persona cae de su nivel anterior, se siente distante y sumergido en una estrechez de miradas lúgubre. ¿Qué podemos hacer cuando caemos?

Como vemos en nuestro verso, existe el servicio de “advertir a los grandes por los pequeños”. Cuando estés en un estado de conciencia expandida, prepara el terreno para la conciencia contraída que inevitablemente seguirá. Prepárense ahora para la caída futura y asegúrense de que no será una caída total en el pecado, Dios no lo quiera, sino una caída relativa desde un estado iluminado. Por ejemplo, en Shabat, prepárate para la caída relativa de los días de la semana.

¿Cómo hacemos esta preparación? Cuando estés en un estado expandido, no pienses ni por un momento que eres grandioso. Recuerda que todo lo que tienes, bienes físicos, materiales, intelectuales, emocionales y espirituales, son de Dios. Da gracias a Dios por tu situación positiva. Cuando caigas, podrás fortalecerte a partir del recuerdo de tu estado expandido y finalmente regresar y crecer aún más.

Si, por el contrario, estando en tu estado expandido cometes el error de pensar que se debe a tus propios talentos, si la grandeza se te subió a la cabeza… entonces realmente has caído a lo más profundo. “Advirtiendo al grande por el pequeño” nos advierte que nos aseguremos de que nuestros momentos de grandeza no nos arrojen a las profundidades de la pequeñez.

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