VAERÁ

VAERÁ וָאֵרָא

Exodo 6:2 – 9:35 Haftara: Ezekiel 28:25 – 29:21

PARASHÁ VAERÁ

Meditaciones jasídicas 4

Año 5781 y anteriores 4

La determinación de las mujeres judías 10

Nadar contra la corriente 11

Rechazar las órdenes 12

El orden cabalista 12

Padres Resistentes: Identidad y Pertenencia 12

Rechazar a un rey gentil: una decisión deliberada 13

En cuanto a un rey judío: es una prueba de fe 14

Rehusarse a un rey de Israel: una decisión de placer 14

El Acatamiento que Demolió a Gush Katif 15

Los Días Rebeldes 20

Basta de Rebeldía 21

Rebeldes Buenos 21

Rebelión Responsable 22

Enójate y no peques 24

La ira y la vista 24

Los sentidos de Dan 25

La ira y la delicadeza (adinut) 26

La palabra más larga en el Pentateuco 33

El Record de Guematría en el Pentateuco 34

El más Largo con el más Grande 36

Tripletes Pitagóricos. 36

Recurrencia y Genética de la Matemática 37

Conclusión 38

VIDEOS 39

Videos Rabino Itzjak Guinsburgh 39

El Nacimiento de un Pueblo 39

La revelación de Su Nombre poderoso 47

VIDEOS GAL EINAI 56

Año 5783 56

Y habló Dios a Moshe, y le dijo: Yo soy Havaiá 56

Plaga Y Curación 56

Año 5781 y anteriores 57

PARASHÁ VAERÁ 5780 57

Éxodo Capítulo 6:2 58

¿Por qué me has enviado? 58

Meditaciones jasídicas

Año 5781 y anteriores

Plaga y curación

“וידבר אלקים אל משה ויאמר אליו אני הוי'”

“Y habló Dios a Moshé, y le dijo: Yo soy Havaiá”.

Vaidaber”, “Y habló” es un lenguaje de liderazgo (como “Y le hablaremos a pueblos bajo nuestro mando”). “Elokim” es el atributo justicia y poder, firmeza y coraje. Dios le da a Moshé la fuerza y el coraje para hacer justicia con el faraón rey de Egipto. El nombre de la parashá es Vaierá = Itzjak, וארא = יצחק, un indicio del poder del atributo de din, rigor y poder de Itzjak.

“Y le dijo: Yo soy Havaiá”, este nombre corresponde al atributo de la misericordia para sacar a Israel de Egipto. Encontramos que el versículo incluye “una plaga para Egipto y una curación para Israel”. La medicina está escrita explícitamente después de la separación del Mar Rojo, el final del éxodo milagroso de Egipto, “אני הוי’ רֹפאך” , “Ani Havaia Rofeja”, “Yo soy Dios, Tu sanador”, la perfección completa de la revelación de “Yo soy Havaiá” en nuestro verso.

[Shaashuim Iom Iom, Diversiones cada día]

Miércoles23 de Tevet 5778 – 10 de Enero 2018

Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh

Vaerá: Y se Mostró – Éxodo

NO SEAS APÁTICO

En la primera plaga en Egipto las aguas del río se convirtieron en sangre. El Rebe de Lubavitch dice: El agua simboliza frialdad y apatía, mientras que la sangre simboliza la calidez de la vida. El primer paso para la redención es luchar contra la apatía, porque lo peor es estar frío y apático con la Torá y las mitzvot, con la santidad y la fe. La siguiente es la plaga de ranas.

Las ranas salen del río y saltan a los hornos de los egipcios. Esta es la acción opuesta: extinguir el calor de Egipto, el calor que peca con entusiasmo, la lujuria que arde como el fuego. Este tipo de calor es peligroso, pero puede transformarse en fuego sagrado, pero la apatía y la frialdad, en cambio, son peores y deben ser eliminados. Se dice que uno de los libros del Alter Rebe llegó a manos de dos eruditos de laTorá que se oponían al Jasidut.

Uno de ellos tomó el libro y lo arrojó al suelo (porque incluso un rollo de Torá pero si fue escrito por un hereje debe ser quemado). El segundo erudito de la Torá vino y recogió el libro del suelo. El Jozé (Vidente) de Lublin dijo: El primer erudito que arrojó el libro llegará a ser un Rebe Jasídico, pero el segundo permanecerá opuesto al Jasidut. Efectivamente, el erudito que lanzó el libro se convirtió en un Rebe, el Ismaj Moshé. Este es un ejemplo instructivo de cómo es preferible ser una persona” caliente” que se preocupa, en lugar de ser apático y frío.

Lunes 22 de Tevet 5778 – 10 de Enero 2018

Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh

 Vaerá: Y se Reveló

JUGANDO A SER DIOS

“וַיֹּאמֶרה’ אֶל משֶׁה רְאֵה נְתַתִּיךָ אֱ-לֹהִים לְפַרְעֹה וְאַהֲרֹן אָחִיךָ יִהְיֶה נְבִיאֶךָ”

VaiomerHavaiá el Moshé, reé netatija Elokim leparó veAharón ajija ihié nevieja.”

”Y le dijo Hashem a Moshé: ‘Mira, te he hecho como Dios para Faraón y tu hermano Aarón será tu profeta’.”

Este es un juego peligroso: Faraón no cree en Di-s (Quien no tiene una imagen física) y es probable que realmente se relacione con Moshé como una deidad. Rabi Elimelej de Lizansk explica: el Faraón se convirtió en una deidad. Para sacarlo de esta tontería, era necesario implementar la otra cara de la misma moneda y actuar como una deidad para él. Esto es una reminiscencia de la historia de Rebe Najman sobre cómo el hombre sabio logró sanar al hijo del rey que pensó que era un pavo, se comportó él mismo como un pavo y el hijo se comprendió que era una locura. Moshé mismo tuvo que caminar en la cuerda floja. No podía ni por un momento enorgullecerse del poder Divino que se le había dado y ni siquiera disfrutarlo o sentir satisfacción.

En cambio, tenía que permanecer completamente anulado a Di-s. De lo contrario, estaría atrapado en la misma red de mal contra el que estaba luchando. En un nivel más profundo, Di-s también está jugando cuando se oculta a nosotros. Toda la creación existe a partir de la contracción en donde se ocultó la Luz Infinita de Di-s. Pero esta contracción es un juego. En realidad, Di-s está totalmente presente en todas partes. Una persona infundida con este conocimiento, como Moshé, puede participar en el juego y ser un representante de Di-s. Este secreto se alude en el verso sobre el nacimiento de Itzjak: Sará dice:

צחֹק עשה לי א-להים,

Tzjok asá li Elokim“.

Esto generalmente se entiende como: “Di-s me ha hecho reír”. Pero sin cambiar en absoluto la redacción, también puede significar: “La risa me ha convertido en Di-s”.

Nuestra identificación con la risa de Di-s es lo que nos hace Divinos.

ראה נתתיך א-להים”.

”Mira, te he hecho como Di-s”.

Viernes 25 de Tevet 5778 – 12de Enero 2018

Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh

Vaerá: Y se Reveló

OBSTINACIÓN

וַיְחַזֵּק ה’ אֶת לֵב פַּרְעֹה וְלֹא שָׁמַע אֲלֵהֶם”
Vijazek Havaiá et lev Paró velo shamá aleihem
“Y Di-s fortaleció el corazón de Faraón y no los escuchó”.

Hasta este punto el Faraón había estado endureciendo su propio corazón, pero ahora, después de la plaga de las llagas la trama se intensifica: “Di-s fortalece el corazón de Faraón”.

Si Di-s estaba fortaleciendo el corazón de Faraón, no hay duda de que su corazón era el más fuerte del mundo, no había nadie más obstinado que él. El Faraón dijo” no quiero”, y punto final. Nada quebraría su voluntad, nada se interpondría en el camino de la voluntad de Faraón.

En el alma, la Voluntad, Ratzón está en la sefirá de Keter, Corona, que está por encima de la conciencia, por encima de los poderes intelectuales del alma. La terquedad de Faraón proviene de la sefirá de Keter, por encima de toda razón y lógica. Esta terquedad impregna toda su personalidad, ningún factor intelectual o lógico puede interponerse en su camino y ninguna emoción puede detenerlo.

Las iniciales de “אֶת לֵב פַּרְעֹה”, “Et lev Paró”, ‘el corazón de Faraón’; * אל פ *, * alef lamed pei *, son a su vez las iniciales de la letra alef, א. que por supuesto comienza con la letra alef. La Cabalá explica que el secreto de alef es: la luz del intelecto (alef), que se introduce en el corazón (lamed) y se expresa por la boca (pei).

Todas estas facultades están impregnadas de la terquedad de Faraón. Aunque el sustento del malvado Faraón proviene de un lugar elevado, finalmente se rendirá. La santidad derrotará a la cáscara impura. Este es el camino que nos trae la Torá para que cada persona supere la obstinación de la inclinación al mal dentro de él: el alef de Faraón será derrotado por el פלא, pele (‘maravilla’, alef *deletreado al revés, les recuera a algún futbolista de Brazil?!!!) proveniente de la santidad.

Las letras de pele (peilamed,alef) aluden a la frase referente a la conmemoración del Éxodo, פסח לה’ אלהיך, P esaj L a Hashem E lokeja (Pesaj para Di-s, tu Di-s)”.Todavía falta el mensaje de Shabat, espero mandarlo hoy, si no Shabat Shalom y muchas bendiciones desde la Tierra de Israel.

Frio y calor

Las aguas del Nilo representan la frialdad de Egipto, la indiferencia hacia toda santidad. Este frío es lo más severo, una helada mortal, por lo que era necesario que la primera plaga sea convertir el agua del Nilo en sangre caliente y viva. En la segunda plaga, las ranas ascendieron del Nilo y entraron en los hornos de las casas de Egipto. Es todo lo contrario: enfriar el calor de la cáscara impura, ser indiferente al calor imaginario y engañoso de la lujuria seductora.

[Según Likutei Sijot, EL Rebe de Lubavitch]

De ‘Secretos del Seder’, Lección 11, Adar 5772

 Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh

Vaerá: Y se Reveló

“וַיֹּאמְרוּהַחַרְטֻמִּם אֶל פַּרְעֹה אֶצְבַּע אֱלֹהִים הִוא”

“Vaiomeru hajartumim el Paró: etzvaElokim hi”

“Y los magos le dijeron al Faraón: ‘Es el dedo de Di-s’.”

También estamos familiarizados con este versículo de la Hagadá de Pesaj, donde el dedo sirve como base para calcular el número de plagas que sufrió Egipto. La expresión ‘el dedo de Di-s’ también aparece en la Torá con referencia a las Tablas del Pacto, que fueron escritas “con el dedo de Di-s”. Hay una conexión esencial entre los dos: las DIEZ plagas rompen la cáscara externa de Egipto y permiten que el mundo escuche y acéptelos DIEZ Mandamientos. El mismo ‘dedo de Di-s’ que los magos egipcios reconocen, aparece una vez más en los Diez Mandamientos pero aquí la revelación es a un nivel mucho más elevado: los magos por su lado admiten que el origen de la plaga es Di-s manifestándose en el mundo (y no la magia), mientras que los Diez Mandamientos son una conexión más profunda entre Di-s y las almas de Israel.Los magos invocan el nombre de Di-s,’Elokim’, pero niegan aún el Nombre de Di-s ‘Havaiá’, como dice el Faraón: “No conozco a Havaiá”. En guematria, sin embargo, las tres palabras “etzva Elokim hi” (“Es el dedo de Di-s (Elokim)”) es igual a tres veces אני הויה,”Ani Havaiá“, “Yo soy Di-s (Havaiá)”. (Comodice al comienzo de la porción de la Torá: “Y Egipto sabrá que Yo soy Havaiá”).

El Zohar dice que los hechiceros y magos de Egipto eran el componente principal del Erev Rav, la multitud de pueblos extranjeros que se unieron a Israel en el Éxodo de Egipto, después de que admitieron que hay una fuerza superior a la que reconocían hasta ese momento. El Erev Rav nos causó incesantes problemas, pero Moshé los aceptó de todos modos y se sintió responsable de rectificarlos, dejando que salgan de Egipto y eventualmente incorporarse al Pueblo de Israel.

Lunes 21 de Tevet 5778 – 8 de Enero 2018

Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh

Vaerá: Y se Reveló

Y tomó Aharón a Elisheva

“וַיִּקַּח אַהֲרֹן אֶת אֱלִישֶׁבַע בַּת עַמִּינָדָב אֲחוֹתנַחְשׁוֹן לוֹ לְאִשָּׁה”.

VaikajAharón et Elisheva bat Aminadav ajot Najshón li leishá

“Y tomó Aarón a Elisheva hija de Aminadav, hermana de Najshón, como esposa.”

En Elisheva se encuentra lo más excelso de la estirpe de Israel, tales las palabras del Midrash sobre el día de la inauguración del Tabernáculo: “Elishevabat Aminadav vio cinco momentos felices en un solo día.

Vio a su cuñado como rey [Moshé Rabeinu como rey], y su hermano Príncipe de la tribu [Najshón ben Aminadav], y su marido como sumo sacerdote, y sus dos hijos como cohanim adjuntos, y Pinchas hijo de su hijo como sacerdote ungido para la guerra”. El énfasis en el hermano de Elisheva, Najshon ben Aminadav, enseña que trae la cualidad de Najshoniut a la familia (como se revela especialmente en su nieto Pinjás).

El estatus especial de Aarón, el sumo sacerdote que expía por todo Israel, depende de Elisheva su esposa, y así también para todos los sacerdotes, que ocupan luego el lugar de Aarón y sus esposas como Elisheva. Así está dicho sobre el Sumo Sacerdote en el día de Iom Kipur “y expía por sí mismo y por su casa”. Dicen los sabios: “su casa es su esposa”, y por lo tanto debe estar casado. Elisheva simboliza para Aarón “la Congregación de Israel” en su conjunto (que es comparada con una mujer), y la paz que permea el hogar de Aharón se extiendea todo Israel. El encendido de las velas alude en especial a Elisheva: אל מול פני המנורה יאירו שבעת הנרות “El mul pnei hamenorá iairu shivat haneirot” “Frente al candelabro se encenderán siete velas”

La expresión “Frente a la menorá”, אל מול פני המנורה, alude a la parte interior, oculta de la palabra menorá, מנורה, es decir la parte del relleno de las letras de menorá,[מ] ם – [נ] ון – [ו] ו – [ר] יש – [ה] א de esta manera: ם ו ן ו יש א = אלישבע, las letras de relleno de menorá. El flujo del atributo de misericordia que baja por el mérito de Aharón se expresaen su barba:

”כַּשֶּׁמֶן הַטּוֹב עַל הָרֹאשׁ יֹרֵד עַל הַזָּקָן זְקַןאַהֲרֹן שֶׁיֹּרֵד עַל פִּי מִדּוֹתָיו”

Cashemen hatov al harosh iored al hazakán, zkan Aharón sheiored al pi midotav

“Como el buen aceite que baja por la barba, la barba de Aharón que baja de acuerdo a sus cualidades”.

Y he aquí “la barba de Aharón” tiene la misma guematria que Elisheva.

Elisheva constituye la cualidad de misericordia de Aharón.

Parashat Vaeia

5780

Por virtud de mujeres desobedientes

La tradición judía de desafiar los decretos del mal

comenzó con las justas parteras judías en Egipto

En la porción anterior de la Torá, Parashat Shemot , nos encontramos con las parteras Shifra y Pua, y ahora, en Parashat Vaeira, nos encontramos con dos de las miembros femeninos de la familia de Moshé: Iojeved, su madre y Elisheva, la esposa de su hermano Aarón. La opinión predominante de los sabios es que Shifra es Iojeved y Pua es Miriam o Elisheva.[1] Dedicamos nuestra enseñanza sobre esta porción de la Torá en su honor, y en honor al auto sacrificio de las justas mujeres judías en cuyo mérito se produjo la redención de Egipto, como está dicho: “En virtud de las mujeres justas, nuestros padres fueron liberados de Egipto”.[2]

La determinación de las mujeres judías

La virtud especial de las mujeres israelitas en Egipto fue su determinación de mantener al pueblo judío incluso en las condiciones más duras. Alentaron a sus esposos a engendrar hijos en las circunstancias más sombrías. Las mujeres sin nombre de Israel tuvieron hijos a pesar de los horrendos decretos del faraón.

Cada madre transmitiría la historia del pueblo judío a sus hijos. Al final de un día de trabajo agotador, les contaba historias a sus hijos, enseñándoles sobre la Tierra de Israel, su tierra natal y los lugares donde fueron enterrados sus antepasados. Les cantaba una canción de cuna sobre la redención, transmitiendo fe y aliento de generación en generación. Los niños bebieron la conciencia judía con la leche de su madre, reforzando su esperanza y su fuerza durante el oscuro exilio.

El faraón les ordenó a las parteras que mataran a los primogénitos judíos y por voluntad propia desafiaron su decreto y permitieron que los bebés vivieran. Su temor a Dios anuló su miedo a las consecuencias de su acción atrevida. La conciencia judía alimenta una innata postura empecinada contra los decretos injustos.

Nadar contra la corriente

El judaísmo no se somete a los dictados del exterior, ni cede a los hábitos sociales corruptos con el argumento de que “si todos piensan así, lo hacen así, yo también”. No importa quién dicte el decreto, un judío temeroso de Dios no seguirá una orden que viole la Torá. La ley de apertura del Shulján Aruj (Código de la Ley Judía) dice: “El que se dedica al servicio de Dios no debe avergonzarse frente a los que se burlan de él”.[3] “Sé tan audaz como un tigre” – “para que puedas mostrar una cara audaz a los que te desprecian”.[4]

En una “mutación” genética única, Abraham grabó esta cualidad en todos sus descendientes. Se le llama Abraham “que vino del otro lado” (הָֽעִבְרִי, haivrí).[5] Cuando el mundo entero tomaba una postura, él defendía su propia fe.[6] Hizo añicos los ídolos de su padre sin ningún reparo, sufriendo una confrontación directa con el Rey Nimrod quien lo arrojó al horno.[7] Siguiendo los pasos de Abraham, Iosef el justo se negó a someterse a la seducción de la esposa de Potifar, incluso bajo amenaza de encarcelamiento o muerte.[8]

Y así también las parteras siguieron esta tradición. Rashi explica que su negativa a obedecer al Faraón fue tanto pasiva [no matar a los niños] como activa [alimentándolos dándoles comida y bebida].

La recompensa otorgada a las parteras se establece explícitamente en la Torá: “Y como las parteras temían a Dios, Él les hizo casas”.[9] Su recompensa fue que se convirtieron en las amas de casa de la nación. Los cohanim (sacerdotes), los levitas y la dinastía de reyes de la dinastía de David descendieron de ellas. El hogar judío en todos los niveles se basa en principios firmes, y los dictados externos, por amenazadores o tentadores que parezcan, no pueden vencernos.

Rechazar las órdenes

El requisito de rechazar órdenes si no están de acuerdo con la Torá es válido incluso si son emitidas por los más altos niveles de autoridad: nuestros padres, un rey gentil o un rey judío.

En general, la Torá nos ordena que obedezcamos a nuestros padres[10] y que “demos respeto a la realeza”.[11] La Mishná nos instruye “Orar por el bienestar del gobierno”[12] y el Talmud afirma que “La ley del país es ley.”[13] Del mismo modo, estamos obligados a respetar y obedecer a los reyes de Israel.[14] Sin embargo, cuando las órdenes humanas contradicen la Torá, debemos oponernos a ellas.

El orden cabalista

En la Cabalá, el padre corresponde a Jojmá (la sefirá de sabiduría), y la madre corresponde a Biná (la sefirá de entendimiento). Estas dos sefirot son las fuentes de la identidad de la consciente en el alma.

El rey gentil representa el aspecto externo de la corona supra consciente, keter en Cabalá (la sefirá de la corona) que se encuentra por encima de los principios padre y madre. “No hay corona sino para el rey”.[15] Esto corresponde a la voluntad. En esto radica el punto de combate: el rey gentil enfrenta su propia voluntad contra la voluntad del alma judía, que es “una parte real de Dios en lo Alto”.[16]

En contraste, un rey judío corresponde al aspecto interior de keter, en donde reside el poder del placer en el alma. Para desafiar los mandamientos de un rey judío contra la Torá, necesitamos adquirir un genuino sentido de placer basado en nuestra fe en Dios.

Padres Resistentes: Identidad y Pertenencia

Dios nos ordenó reverenciar a nuestros padres y tener respeto por ellos. Nuestros padres representan la autoridad de Dios, el tercer y principal “socio” en la creación de un hijo.[17] El versículo dice: “Temerás a tu madre y a tu padre, y guardarás Mis Shabatot“.[18] Rashi comenta:[19] “Aunque te advertí que temieras a tu padre, si él te pidiera que violes el Shabat no le obedezcas, y lo mismo ocurre con las otras mitzvot”. Al igual que el niño, sus padres son siervos de Dios. Las prioridades con respecto a la obediencia de un niño a sus padres son claras, cuando un padre ordena a su hijo que lleve a cabo un acto que se opone a las leyes de la Torá, el niño no debe obedecer.[20]

La ley de que uno no debe violar un mandamiento de obedecer a su padre es el meollo de nuestra identidad. Honrar a nuestros padres proviene de nuestra gratitud fundamental hacia aquellos que nos trajeron al mundo y se esforzaron por criarnos, y en el judaísmo también los respetamos como los transmisores de nuestra tradición judía. Sin embargo, cuando un padre está en una actitud de colisión con Dios, el niño debe afirmarse, dejando en claro que su principal obligación es con Aquel que da vida tanto a sus padres como a él. Mi identidad esencial es que Dios me creó a su imagen, y como judío estoy obligado a seguir sus mandamientos. No puedo renunciar a mi compromiso con Él, y tú tampoco deberías hacerlo tú.

Rechazar a un rey gentil: una decisión deliberada

Los sabios describen el diálogo entre Janania, Mishael y Azariá con Nabucodonosor cuando los tres se negaron a inclinarse ante su ídolo. “[Nabucodonosor dijo] ¿Acaso el Todopoderoso no te ordenó que obedecieras a la realeza, sin importar lo que te pidieran?… Ellos respondieron: ¡tú eres el rey sobre nosotros con respecto a los impuestos y las leyes de la propiedad, pero con respecto a la idolatría, Nabucodonosor o un perro son iguales!”[21]

Comenzaron respetuosamente, pero concluyeron con una buena dosis de jutzpá judía (insolentes). Cuando un rey no judío sobrepasa los límites e intenta imponer acciones que están en contra de nuestras creencias, todo respeto a la realeza desaparece y nos volvemos insolentes, resistiendo sin miedo a las consecuencias.

En la parte de la Torá de Vaeira, vemos otro ejemplo de cómo enfrentarse a los decretos de un rey gentil. Dios le dijo a Moshé: “Ven y habla con el faraón rey de Egipto para que envíe a los hijos de Israel de su país”.[22] “Y Yo endureceré el corazón del faraón”.[23]

A lo largo de los siguientes párrafos, la Torá enfatiza cuán “duro” se volvió el corazón del faraón. Dios reforzó la voluntad de Faraón y le dio el poder de desafiarLo, a pesar de las devastadoras plagas que le envió. Moshé también tuvo que enfrentarse al Faraón en una batalla de voluntades que alcanzó un crescendo (en la siguiente porción de Torá de Bo) después de informar al Faraón de la inminente plaga que mataría a todos los primogénitos egipcios.[24] Finalmente, incluso el Faraón admitió que estaba sometido al Rey de reyes.[25]

El Talmud[26] describe la confrontación final de Moshé con el faraón: “Y él [Moshé] dejó al Faraón furioso”[27] y sin embargo ¿no le dijo nada? Dijo Reish Lakish: Lo abofeteó y se fue… Rabi Iojanán sostuvo: [Dios le dijo a Moshé] Él es un hombre malvado, tienes que ser insolente con él…

Un encuentro con un rey gentil no toca temas de identidad. La identidad de Moshé como súbdito egipcio no compitió con su identidad judía. Sin embargo, fue difícil ignorar el poder del faraón. “Si un rey declara que arrancará una montaña, arrancará la montaña. ¡Nunca se retractará [de su palabra]!”[28]

Ante las amenazas de un rey, debemos invocar una fuerza de voluntad infinita y desafiarlo contra viento y marea. Esto deberá ser de tal manera que estemos preparados para el sacrificio personal. Habiendo alcanzado este nivel ya hemos derrotado a nuestro adversario. Si no tiene otra opción que llevar a cabo su amenaza, se vuelve impotente sobre nosotros. Incluso un simple judío puede aprovechar este poder infinito de voluntad. El rey despótico no puede hacer nada más que rechinar los dientes.

En cuanto a un rey judío: es una prueba de fe

Con respecto a un rey judío, Maimónides[29] establece: “Si el rey decreta anular una mitzvá, no le prestes atención”. Solo un liderazgo que acepte la autoridad del Todopoderoso es digno de gobernar al pueblo judío.[30] Los sabios[31] critican a Ioav, hijo de Tzruiá, por llevar a cabo la orden del rey David con respecto a Urías el hitita. ¡Ni siquiera el rey David tiene el privilegio de hacer lo que le plazca! Todos son iguales a los ojos de Dios, y la Torá anula la autoridad del rey.

En el Talmud,[32] los sabios preguntan qué tiene prioridad: las palabras del rabino o las palabras del alumno. En su fallo, Maimónides[33] alteró la redacción de “alumno” a “sirviente”, afirmando: “Las palabras del maestro tienen prioridad sobre las palabras del sirviente”. Incluso un rey, con todo el respeto que se le debe, es un siervo de Dios. Debemos obedecer a Dios, el Rey de reyes, en vez de a un rey de carne y hueso.

Rehusarse a un rey de Israel: una decisión de placer

Un rey gentil gobierna por el poder de su voluntad de hierro. Él hace lo que quiere tomar en cuenta ninguna otra consideración. En cambio, la motivación del liderazgo judío es más refinada. En Jasidut, la voluntad no es el objetivo final, proviene y está motivado por el placer de lograr nuestro deseo. El placer, a su vez, es impulsado por la fe. Estas son las tres cabezas de la Corona-Keter, desde lo exterior hacia lo más profundo. El gobierno judío no puede confiar únicamente en el poder de su voluntad, sin identificarse con el principio de placer subyacente. Para el pueblo judío el factor decisivo es nuestra fe fundamental. Cumplo las demandas del rey porque el placer que me brinda afirma mi fe. Pero cuando el decreto del rey se opone a la Torá, identificarse con la voluntad de Dios produce un placer aún mayor.

Para adquirir la fuerza de voluntad necesaria para desafiar a un rey no judío, es suficiente estudiar los aspectos prácticos de la Torá. Para lograr el mayor nivel de identificación con el placer Divino, necesitamos refinar nuestro placer estudiando los misterios más íntimos de la Torá.

El Acatamiento que Demolió a Gush Katif

El poder del liderazgo judío depende del placer supremo de concretar la fe innata del alma judía. Bajo el liderazgo de un gobierno justo esto se logra al cumplir con las leyes de la Torá.

Durante muchas generaciones, el pueblo judío estuvo en el exilio sin un gobierno nacional. El deseo de establecer un estado judío no surgió de un deseo despótico de gobernar sobre un pueblo, pero tampoco reflejó el deseo de llevar a la práctica la tradición judía en el ámbito público. Más bien hubo una clara necesidad de un hogar seguro para todos los judíos, y un deseo de reunir a nuestro pueblo bajo un gobierno judío.

El entendimiento innato judío de que una voluntad de hierro no puede vencer la fe arraigada en Dios, significa que cuando el liderazgo no está en sintonía con los preceptos de la Torá, el gobierno está Page | 6 obligado a ofrecer un sustituto de la fe en Dios y Su Torá. En tiempos pasados, esto se lograba ofreciendo alguna forma de idolatría como alternativa, como lo hizo Ieroboam.[34]

En el caso del gobierno israelí, extrae su autoridad de su voluntad de hierro. Sin embargo, debido a que ningún gobierno judío desea competir por la tiranía con Faraón o Nabucodonosor, alimenta un falso orgullo nacional. En lugar de poner su fe únicamente en Dios, la mayoría de los residentes judíos en Tierra Santa ponen su fe en el Estado de Israel. Por lo tanto, su placer deriva de identificarse con esta entidad y se ven obligados a cumplir con todo lo que representa. Sin embargo, estamos constantemente decepcionados con los resultados, porque sin fe en Dios, el máximo placer nunca se puede lograr.

Mientras el gobierno israelí separe su propia voluntad del placer de cumplir nuestra fe judía innata en Dios, siempre habrá ciudadanos que desafíen sus leyes. El orgullo judío solo se justifica cuando llevamos a cabo las órdenes dadas en Nombre de Dios.

Un judío que es leal a Dios, a Su pueblo, a Su tierra y a Su Torá, continuará la tradición de la resistencia judía. Si por ejemplo le dicen, Dios no lo quiera, desarraigar a los colonos judíos de sus hogares, desafiará a sus oficiales y se unirá a los colonos en su búsqueda para devolver cada centímetro cuadrado de Tierra Santa a manos judías, como lo exige la ley de la Torá.[35]

El alma judía nunca puede separarse por completo de su fuente Divina. En esencia, cada judío permanece fiel al Todopoderoso. La obediencia a Él corresponde a la fe innata que es el núcleo del alma judía. Él es el Rey de reyes y “La corona de todas las coronas”. Nuestra fe simple nos une a Dios eternamente.

Cuando nos enfrentamos a la adversidad por medio de la fe pura, tenemos el poder invencible para desafiar los decretos malvados. Este es el poder de la resistencia judía genuina que puede vencer incluso a un gobierno que ofrece un sustituto de la fe en Dios y su Torá. Finalmente, el alma divina de los líderes judíos los influenciará para que se den cuenta de su propia fe y sucumban al placer de servir a Dios a través de un rey justo con decretos justos.

Meditación Diaria Sobre el Jitas

Libro de Éxodo

5768 Tevet 5768 – Enero 2008

Perasha Vaerá – día 1

YO SOY HAVAIÁ

Nuestra parashá comienza diciendo (Exodo 6:12)

וידבר אלהים אל משה ויאמר אליו אני הוי

Vaidaber Elokim el Moshé, vaiomer elav Ani Havaiá

“Y habló Elokim a Moshé, y le dijo Yo soy Havaiá.”

Le hablo por que Moshé se había revelado, se enfrentó a Hashem diciéndole: “¿Por qué has hecho mal a este pueblo?” (Exodo 5:22). Ante semejante muestra de insubordinación, Hashem se vio obligado “Y le dijo Yo soy Hashem”. “Fiel para recompensar con bondad a los que van delante de Mí. Y no te he enviado en vano, sino para cumplir Mi palabra que le di a los patriarcas.”

Encontramos en diferentes lugares que Hashem utiliza esta expresión “Yo soy Hashem”, fidedigno para vengarse cuando se enfrenta al castigo, como en “y has mancillado el Nombre de tu Dios, Yo soy Hashem” (Levítico 19:12), y cuando habla del cumplimiento de una mitzvá, como en “Y cuidarán mis preceptos y los cumplirán, Yo soy Hashem, fiel para dar recompensa” (Levítico 22:31).

En la Torá y en el Tana”j en general, está escrito 3 veces וידבר אלהים , vaidaber Elokim , “Y Habló Elokim”. En la Torá la expresión “hablar” ( dibur ) es una forma de decir algo fuerte e importante, y Elokim es el Nombre de Hashem asociado con la cualidad de juicio, din .

La primera vez la encontramos en Noaj al finalizar el diluvio: “Y habló Elokim a Noaj, diciendo. “Sal del arca, tu y tu mujer y tus hijos y las mujeres de tus hijos contigo” (Génesis 8:16). La segunda vez en nuestra parashá, en el verso que ya citamos: “Y habló Elokim a Moshé y le dijo ‘Yo soy Havaiá ”. La tercera vez es en verso que sirve de título al enunciado de los Diez Mandamientos “Y habló Elokim todas esas cosas, diciendo.” (Exodo 20:8) Yo soy Havaiá tu Elokim… etc.”

Cuando se trata de Noaj Rashi no aclara cual es el din , “juicio” que hay en este “hablar”. Por el contrario, fue dicho al finalizar el castigo del diluvio y viene a permitir que Noaj y toda su familia salgan del arca, de “la cárcel” en que estuvieron confinados durante todo un año, y volver a vivir libremente sobre la tierra de la manera normal en que se comporta una familia “tu y tu mujer y tus hijos y las mujeres de tus hijos contigo”, cada hombre con su mujer, aquí les permitió tener relaciones matrimoniales (Rashi).

Tratándose de los diez Mandamiento encontramos que Rashi se refiere al Nombre Elokim en el verso-título: “ Y hablo Elokim”, el significado de Elokim no es otro que juez ( daián ), como está dicho ‘Elokim no maldecirás’, y Onkelos lo traduce ‘ daina’ , porque hay cuestiones por las cuales la persona que las cumple debidamente recibe su recompensa pero de lo contrario no recibe castigo alguno. Según esto: ¿Podría ser que lo mismo ocurre con los Diez Mandamientos? La respuesta es: ‘Habló Elokim’, habló el que es juez para saldar cuentas”.

En cuanto al Nombre Elokim de los Diez Mandamientos, se explica en Jasidut que es el secreto de la expresión habitual de nuestros sabios, que la Torá se le dio a Israel por boca del rigor, la guevurá , o sea a través del rigor Divino de transferir e investir lo ilimitado dentro o de los límites de las letras de la Torá. Es decir, y como está en la explicación de los sabios en arameo acerca de la primera palabra de los Diez Mandamientos:

“‘אנכי ‘ – א נא נ פשי כ תבית י הבית”

Anojí – Ana nafshi ktabit iehavit

“Mi espíritu hace que sean las letras”

Hashem se brinda verdaderamente a Sí mismo, el verdadero infinito, en la Entrega de la Torá, en letras limitadas y finitas ל ישראל , “a Israel”, que son las iniciales de:

ששים רבוא אותיות לתורה

Shishim ribó otiot laTorá

“Hay seiscientas mil letras en la Torá”

Y hay que entender cuál es el secreto que hay en las 3 veces que está escrito Vaidaber Elokim , “ y habló Elokim ”.

Y el secreto es que, como se explica en los escritos del Arizal que hay 3 niveles de Elokim, en maljut (reinado), en guevurá (rigor) y en biná (entendimiento).

El Nombre Elokim de maljut es el secreto de:

אלהים (E’lokim) = guematria הטבע Hateva , la naturaleza).

Porque maljut es el origen de la naturaleza, que desciende para hacer que sea, darle vida y existencia a la naturaleza de los mundos inferiores Creación, Formación y Acción. Sobre Noaj está dicho: “Y a Elokim anduvo Noaj ( נח )”, el fluyó con la naturaleza Divina y por eso tuvo el mérito de encontrar “gracia” ( jen , נח = חן , su reflejo simétrico en las alturas), que es una dádiva del maljut (el reinado) como es sabido. Noaj es la décima generación de la humanidad, paralelamente a la sefirá de maljut que es la décima.

Por lo tanto, “Y habló Elokim a Nóaj diciendo” es volver a la vida natural (es sabido que el diluvio produjo un cambio de la naturaleza física), “las ofrendas perpetuas en su debido orden “, (como está escrito: “Todos los días de la tierra, la siembra y la cosecha, y el frío y el calor, y verano e invierno, y día y noche, no cesarán”).

Aquí no se puede explicar Elokim como una expresión de juicio, el juicio severo del nivel de guevurá, sino en una forma de juicio diluido con misericordia. Como está escrito Verajamav al col maasav , “Y Su misericordia está en todos Sus actos”.

Meditación diaria de Rab Itzjak Ginsburgh


Vaerá: Y se Reveló

LAS DIEZ PLAGAS Y LAS DIEZ ETAPAS DE ORACIÓN

Las Diez Plagas corresponden a las diez etapas de la oración. Cuanto más verdaderamente servimos a Di-s, más descienden esas plagas sobre las cabezas de las cáscaras malvadas y perjudiciales correspondientes. Revisémoslas muy brevemente:

1) Primero, el bastón de Aharón se tragó los bastones de los magos de Egipto. En hebreo bastón es maté, מטה, de la misma raíz de netiá, נטיה, inclinación o propensión. Cuando nos levantamos por la mañana debemos imponer nuestra propensión inicial por la santidad sobre nuestra propensión a otras cosas. Esto es lo que hacemos cuando recitamos la oración “reconozco ante Ti”, Modé Aní, al abrir los ojos.

2) La plaga de la sangre, dam, דם, es paralela a la preparación para la oración, comenzando con la oración de Tikún Jatzot a la medianoche y durante el recitado de las Ofrendas, los Korvanot. Uno debe sentir que está derramando su sangre ante Di-s, la amargura por sus pecados y la lejanía de Di-s. Entonces nos arrepentimos y retornamos a Él.

3) La plaga de las ranas, צפרדע, tzfardea, es paralela a los versos de alabanza, pzukei dezimrá, en los que cantamos a Di-s como ranas, que nunca dejan de croar.

4) La plaga de los piojos, kinim, כנים, corresponde a la bendición de “Iotzer Or“, “Crea la Luz”. Meditar en la alabanza de los ángeles a Di-s aclara nuestras mentes (limpia nuestras cabezas de piojos) de todas las tonterías que penetran en nuestros cerebros como piojos.

La plaga de los animales salvajes (arov, ערוב) es paralela a la oración “Shema Israel”,שמע ישראל. Cuando declaramos la Unidad de Di-s, anulamos el mal entremezclado (irbuvia, ערבוביה, la misma raíz que arov) en el mundo. Todo se anula y se incluye en la Unidad de Di-s.

La plaga de la enfermedad del ganado, (dever, דבר, se anula cuando decimos: “Y amarás… con toda tu alma (bejol nafsheja, בכל נפשך)”. El significado de nefesh (alma), es ‘voluntad’, ratzón, רצון. Cuando le entregamos toda nuestra voluntad a Di-s, “anula tu voluntad ante Su voluntad”, esto se convierte en un golpe positivo sobre toda nuestro mikné, מקנה, que significa “ganado” y también comparte una raíz con kinianim, קיניינים “posesiones”.

La plaga de forúnculos, shjin, שחין, también es paralela a “con toda su alma” (bejol nafsheja). Porque ‘nefesh’ también significa oneg, ענג, ‘placer’. Le damos todo nuestro sentido del placer a Di-s, porque la plaga (nega, נגע) de los forúnculos es lo opuesto a oneg(“placer”, las mismas letras que nega).

La plaga del granizo es paralela a “con todas tus fuerzas” (bejol meodeja,בכל מאדך). Cuando dijimos “con toda tu alma”, entregamos toda nuestra voluntad y nuestro placer y los anulamos ante Di-s. Todavía nos quedamos, sin embargo, con la voluntad esencial de vivir. Es cierto que está la voluntad de sacrificar la propia vida si es necesario, pero deseamos la vida. Cuando decimos “Con todas tus fuerzas”, le estamos entregando el sentimiento de nuestras vidas y existencia a Di-s. Esto crea una verdadera tormenta, truenos, relámpagos ygranizo.

¡Más por venir!

Shabat 26 de Tevet 5778 – 13 de Enero 2018

LAS MARAVILLAS DE TU TORÁ

¡CUIDADO, REBELDES A LA VISTA!

Un adagio jasídico dice sobre los niños: “si no molesta, no ayuda”: si el niño no molesta cuando es pequeño, no va a ser útil cuando sea grande. Un buen educador prefiere precisamente al niño rebelde. El reto es grande, pero debajo de esa cáscara traviesa se oculta un alma especial

de las clases del Rabino Ginsburgh del 27 de Shevat 5772 y el 16 de Tevet 5774

¿Qué prefieres, un ” niño rebelde” o un “buen chico”? Muchas veces los padres y los educadores eligen al buen chico, aquel niño culto y educado, que hace todo lo que se le dice y lo que se esperaba de él. ¿Quién necesita todos los problemas y los dolores de cabeza que dan los niños rebeldes?

Pero un buen educador prefiere precisamente al niño rebelde. El reto es grande, pero debajo de esa cáscara de rebeldía se oculta un alma especial. Un adagio jasídico sobre los niños dice: “si no molesta, no ayuda”: si el niño no molesta cuando es pequeño, no va a ser útil cuando sea grande…

Los Días Rebeldes

¿Y por qué nos acordamos ahora de los niños rebeldes? Porque estamos entrando en un periodo llamado ימי השובבים, Iemei Hashobavim, “Los Días rebeldes”. En la literatura halájica,[36] se trae la costumbre de los días de ayuno y arrepentimiento de las semanas en las cuales leemos las primeras porciones del libro de Shemot, “Éxodo”: שמות, וארא, בֹּא, בשלח, יתרו, משפטים – Shemot-“Exodo”, Vaerá-“Se Mostró”, Bo-“Ven al Faraón”, Beshalaj-“Cuando envió”, Itró, Mishpatim-“Estatutos”, donde sus iniciales forman la palabra שובבים, Shobavim, “Rebeldes”.

Luego vinieron los cabalistas, y a la cabeza el Arizal, y le dieron validez a esta costumbre, cuando descubrieron en ella alusiones y significados profundos.[37] Aunque la ocupación en ayunos y penitencias fue disminuyendo con las generaciones, como instruyeron los grandes maestros jasídicos, desde el Baal Shem Tov en adelante, hoy la recomendación es aumentar en caridad en lugar de ayuno (ya que el dinero es la “vitalidad del alma” de la persona y equivale al ayuno físico). Además, muchas comunidades acostumbran aumentar en el rezo en estos días, sobre todo recitando salmos (cuyo poder es efectivo en todo momento).

En este contexto, la palabra “shobavim” no es positiva en absoluto. De hecho, si queremos respetar el significado exacto de la palabra en hebreo, no se debe tomar en cuenta la lengua coloquial de hoy en día, sino ir a sus raíces. Resulta que el adjetivo ‘shobavim’ aparece en un sentido negativo de la Biblia, como “e irá el rebelde por el camino que desea su corazón”[38], “Retornen hijos rebeldes”[39]. El rebelde bíblico no sólo hace ‘trucos’, sino que se subleva, corrompiendo todo orden y disciplina.[40]

Los días de shobavim se dedican a corregir transgresiones, la teshuvá, “arrepentimiento” en respuesta a la rebeldía negativa. En particular es el pecado llamado “mancillar el pacto” – es decir, continuar yendo tras el instinto sexual de forma no correcta, comenzando por pensamientos incestuosos que estropean la mente, a través del sentido de la vista que navega desenfrenadamente, hasta la excitación física que se descarga en forma inválida. La gravedad de este pecado es que hay partes de nuestra personalidad que se “pierden”, pero resulta que también para este defecto hay corrección, como leemos en las parshiot hashobavim, que todo el pueblo de Israel estaba entregado a la esclavitud egipcia –allí verdaderamente se llegó a la perdición- y como pueblo salió con “gran riqueza” y redimió todas las “chispas sagradas” que se encontraban en cautiverio.

[A pesar de que el “defecto del pacto” en el sentido usual es un pecado que pertenece a los hombres más que a las mujeres, pero este defecto existe ampliamente en las mujeres. Pacto significa una conexión correcta y verdadera, y cuando la mujer no establece un pacto de fidelidad a un solo hombre, sino que se “dispersa”, en pensamiento, habla y acción, ella está mancillando su parte del pacto.

Basta de Rebeldía

¿Cuál es la rectificación de la rebeldía negativa?

A primera vista parecería que la rectificación es simple, tirar en la dirección opuesta. Si hasta ahora has sido rebelde y traidor, de ahora en adelante debes volver al sendero, aceptar el yugo y la disciplina y empezar a ser “un buen chico”. Si bien en cada niño hay algo de rebelde, al final tienes que madurar y entender que el desenfreno y el libertinaje no es la meta. Hay juicio y hay juez, hay verdad y justicia, y es hora de que aprendas a tomar el control de ti mismo, empezar a hacer lo que corresponde y no lo sólo lo que tengas ganas de hacer.

Esto se puede apreciar bien en el contexto de “hacer teshuvá” (es decir, dejar de darle la espalda a Dios y la Torá) muchos judíos pueden dar testimonio de cómo vivieron durante largos años de manera “rebelde”: ¡yo hago lo que “se me ocurre” y nadie me diga lo que tengo que hacer! ¿Por qué someterme a una tradición antigua que no tiene ningún significado para mí? Pero he aquí, llegó el día en que el rebelde ya crecidito descubre de repente que esa Torá que su abuelo estudió en la ieshivá, esos preceptos que la abuela dio la vida por cumplir, no es una obsoleta pieza de museo, sino una “Torá de vida“, una enseñanza que no prescribe nunca, la “Torá de la verdad” en la que cada signo oculta una profunda sabiduría. Entonces, él se agarra la cabeza y se da cuenta de que hasta ahora vivió en un mundo sin sentido, en una rebeldía que le dio una sensación imaginaria de libertad y diversión, pero en realidad era es vana e inútil.

Rebeldes Buenos

Pero, aunque cambiar a un estilo de vida religiosa es un largo camino en el sendero de la teshuvá, la rectificación definitiva todavía está pendiente. Ya hemos mencionado que un niño travieso contiene un especial tesoro de potencial. Su energía y astucia son bienes preciosos que claman por una mano que guía. ¿Hacer teshuvá significa suprimir completamente toda picardía y rebeldía? ¿Significa esto que tenemos que convertimos en autómatas obedientes e insípidos, sin una chispa de audacia y desafío? Desafortunadamente, los baalei teshuvá sufren de este tipo de imagen negativa, pero ha llegado el momento de liberarnos de ella. Ha llegado la hora de que todos los rebeldes hagan travesuras buenas y están todos invitados a transformar su rebeldía en un motín sagrado.

Cuando miramos más detenidamente los versículos antes citados que se refieren a los rebeldes, vemos que tienen un lado positivo. Por ejemplo, el versículo: “Retornen, hijos rebeldes”, concluye con la frase: “Yo sanaré su rebeldía”, o sea que hay una cura para la rebeldía. De hecho, la palabra “rebelde” (שׁוֹבָב, shovav) tiene la misma raíz que “retornar” (שׁוֹב, shuv), que es la raíz de teshuvá (תְּשׁוּבָה). Esta raíz aparece casi siempre en un contexto muy positivo, como en el verso: “Retornen hijos rebeldes” (שׁוּבוּ בָּנִים שׁוֹבָבִים, shuvu banim shovavim) en el que las dos palabras aparecen en relación una con la otra. La teshuvá transforma al rebelde en un buen amotinado.

Esto significa que alguien que tiene una personalidad rebelde no necesita suprimir la energía vital que arde dentro de él. El rebelde es astuto y rápido, tiene coraje y audacia. Pero ahora debe comportarse con “audacia sagrada”, como dice la Mishná: “Sed tan audaz como un tigre… para llevar a cabo la voluntad de vuestro Padre que está en los Cielos”.[41] Tenemos que hacer uso de todas nuestras facultades y talentos, y con sabiduría y discernimiento aprovecharlos para servir a Dios. En efecto, el principio más fundamental del judaísmo es “aceptar el yugo del Cielo”. Por el contrario, el libertinaje es llamado “quitarse el yugo”, y en el pensamiento jasídico se considera el pecado arquetípico de la impureza.

Una vez que un individuo se ha sometido y aceptado el yugo del Cielo, se pone de manifiesto que este tipo de yugo ¡es divertido! En el marco de la Torá y las mitzvot hay un margen muy amplio para la iniciativa personal activa. Y sí, incluso hay espacio para añadir el “condimento” de la picardía y la rebelión. Así, por ejemplo, Rabi Menajem Mendel Schneerson instruyó a un baal teshuvá (retornante al judaísmo) que se llamaba Nimrod (נִמְרוֹד, que significa “Rebelémonos”), que no había necesidad de que cambie su nombre. A pesar del hecho de que el Nimrod bíblico era la imagen de un rebelde negativo que se rebeló contra el Todopoderoso, el Nimrod moderno debe ahora aprovechar esta cualidad de la rebeldía positivamente y rebelarse contra las convenciones de la falsificación del mundo en general.

Rebelión Responsable

Un rebelde exitoso tiene libertad de pensamiento y es rápido, enérgico y pragmático. Todas estas cualidades son algo que se requiere como el aire que respiramos en relación con todo lo que se refiere a la rectificación del aspecto público del pueblo judío. Sólo una naturaleza rebelde positiva como esa puede ayudarnos a sacudimos los grilletes de un establishment enajenado, y las cáscaras extranjeras que nos encajonan. Sólo un rebelde positivo puede iniciar el establecimiento del Reino de Israel que deseamos. Estamos ante una extrema necesidad de tales rebeldes sagrados, quienes pueden “dar vuelta el mundo” y nos transformarán a todos en verdaderos baalei teshuvá (retornantes). Sin embargo, hay que subrayar que nuestro buen rebelde debe actuar con un sentido de responsabilidad mutua hacia todo el pueblo judío.[42]

Como conclusión, recordemos que estamos en el año 5774, que como se explica en otro lugar, es una alusión a la osadía sagrada y la audacia que se requiere para dar nueva vida al mundo.[43] Por esto oramos para que todos los rebeldes se conviertan en baalei teshuvá y lleguen a utilizar su rebeldía para beneficiar a todo el pueblo judío y el mundo entero.

EL SENTIDO REFINADO DE LA IRA

Es difícil pensar en un rasgo peor que la cólera. No en vano dijeron los sabios “No trates de calmar a tu amigo cuando está enojado”: cuando nos enojamos, cuando “la sangre sube a la cabeza”, la cara se pone bordó y sentimos que estamos a punto de explotar, perdemos el control de nosotros mismos. Perder el control es perder lo que nos hace seres humanos, nuestra imagen Divina dentro de nosotros. Por eso uno de los objetivos principales de la labor espiritual en todos los sitios es trascender la ira.

Sorprende, entonces, que uno de los 12 sentidos de la psiquis sea justamente la ira. Tener sentido de la ira es saber cómo, cuándo y por qué corresponde enojarse. Sucede que de acuerdo al judaísmo la ira no es algo malo en principio y así como todo otro rasgo de nuestra personalidad, no hace falta suprimirla completamente, sino regularla y dirigirla. La mayor parte de los enojos son superficiales y negativos, pero hay algunos que provienen de la preocupación y el cariño, y en verdad lo negativo es evitarlos. El libro del Zohar dice sabiamente: “Hay ira y hay ira… hay una ira llamada ‘bendita’ y hay una ira llamada ‘maldita’”.

La cuestión es, por supuesto, cómo distinguirlas.

Enójate y no peques

En pocas palabras, la ira negativa deriva de un exceso de nuestra conciencia del “yo”, el ego. El orgullo nos hace imaginar que nos corresponde todo tipo de cosas, y cuando la gente no nos da lo que queremos nos enojamos con ellos. Esta es una ira para escaparnos de nuestra propia rectificación y para arrojar sobre los demás todas nuestras falencias inconscientes.

El primer paso en la corrección de la ira negativa es redirigir nuestra mirada crítica desde afuera hacia adentro, hacia nosotros mismos. Dicen los Salmos: “enójate y no peques.” ¿Cómo puede la ira salvarnos del pecado? Explicaron los sabios: “La persona siempre tiene que encolerizar su instinto del bien sobre el instinto del mal”: tenemos que dirigir nuestra cólera hacia nuestro instinto del mal, hacia nuestros deseos e instintos egoístas. Cuanto más estemos ocupados en rectificarnos a nosotros mismos, nuestra mirada al prójimo será más indulgente. Sólo entonces podremos volver a dirigir una ira rectificada sobre las cosas malas del mundo.

La diferencia entre la ira anterior a la rectificación propia y la que viene después, es que entonces el enojo está purificado de nuestros ‘intereses’ personales, y se dedica sólo a corregir la iniquidad. Esta ira es ahora un “enojo justificado”.

La ira y la vista

Como se ha explicado en artículos anteriores, cada uno de los seis primeros sentidos es una preparación psíquica para cada uno de los seis sentidos últimos, el que se encuentra “enfrente” en el ciclo anual de los meses. El mes que se encuentra frente a Tevet es Tamuz, el sentido de la vista. ¿De qué manera se puede hablar del sentido de la vista como una preparación del camino hacia el sentido de la ira?

La cuestión del sentido de la vista es desarrollar una visión profunda, salir de la observación de lo que está en la superficie y dirigirnos hacia los estratos internos de la realidad. Y por cierto, una de las cosas más importantes que nos proporciona la visión interior es el poder de elevarnos por sobre la ira. Quien profundiza su visión puede colocar en un contexto más amplio el evento que desencadena el enojo, calmarse y sopesar con la cabeza fría la respuesta correcta que va a elegir.

Pero elevarse por encima de la ira exterior es sólo el primer paso. El Jasidismo explica que, aunque siempre tenemos que buscar el bien oculto en las cosas malas que ocurren, a nosotros o a los demás, no debemos dejar de orar y procurar “el bien visible y manifiesto”, simplemente la eliminación del mal y el triunfo del bien. La observación en busca de defectos y anormalidades revelados no es completa si no conduce en última instancia una exigencia de ver cómo rectificarlos, visionar con los ojos físicos cómo hacer que haya justicia efectiva en este mundo. Este reclamo es el sentido de la ira rectificada, de la cual se dijo “mis ojos están turbios por la ira”, no está dispuesto a ver la injusticia por tanto tiempo.

Está explicado en jasidut que el motivo interior de esto es que tenemos dos ojos, que además de la visión estereoscópica, nos permite dirigir el ojo de la bondad hacia afuera y el ojo de la autocrítica hacia adentro. Y así, se puede ver a esos dos ojos como la expresión de dos tipos de ira positiva que surgen gracias a la visión interior: el ojo que mira hacia adentro engendra la ira por lo que depende de nosotros (como el dicho de los sabios mencionado, “La persona siempre tiene que encolerizar su instinto del bien sobre el instinto del mal”). Y el ojo dirigido al exterior genera ese disgusto por lo que no podemos reparar, y la súplica a Hashem por su ayuda, como la plegaria de Janá, la madre del profeta Shmuel, de quien se dijo: “por tanta plática y cólera hablé”.

Los sentidos de Dan

La tribu que corresponde al mes de tevet y al sentido de la ira es Dan, muy apropiado a su nombre, que significa ley y juicio. Se cuenta sobre esta tribu que era “la inferior de las tribus”, al contrario de la tribu de Iehudá, “la más grande de las tribus”, a pesar de que tenía mucha población. En otras palabras, la tribu de Dan era la capa más populosa, “Tu pueblo Israel” que se encontraba en la base de la pirámide social. Por esta razón fue también “el campamento de Dan recogía de todos los campamentos”, ellos iban al final de la caravana, recogiendo las cosas que los demás iban perdiendo, y por eso eran los primeros en hacer frente a los enemigos que atacaban por la retaguardia.

La correspondencia de la tribu de Dan con el sentido de la ira significa que esta clase de gente, las personas que están en el terreno y la acción, no son necesariamente las más intelectuales, la llamada “mayoría silenciosa”, tiende a tener un alto grado de sentido común y a estar alertas ante situaciones en las que se debe aplicar la ira positiva. Su conexión directa con el lado áspero de la vida y su la lealtad natural hacia sus allegados y sus aliados, les permite captar aquellas situaciones delictivas e injustas que no se las puede dejar pasar callado. Esto contrasta, por ejemplo, con la gente como Iehudá -la élite intelectual, que con talento para hablar (es decir, la cultura y la comunicación), que por tomar en cuenta tantas “consideraciones”, tienden a veces perder esa tipo de honestidad simple y natural.

El atributo de la ira justificada se reconoce y es famosa en los descendientes de Dan, como el valiente Shimshón, que fue rápido para tomar represalias contra los filisteos siempre que molestaban al pueblo de Israel. Además, también aparece en el Midrash en el único hijo de Dan, cuyo nombre era Jushim, “sentidos” y era sordo. El Midrash relata que cuando los hijos de Israel desde Egipto llegaron a la Cueva de los Patriarcas para enterrar a Iaacov, apareció de repente el anciano Eisav y argumentó que la parcela de la tumba que quedaba, junto a Lea, le pertenecía según la ley. Se generó entonces una discusión legal entre los hijos de Israel y los hijos de Eisav, acerca de la naturaleza exacta de la venta de la primogenitura a Iaacov, que concluyó al enviar un mensajero de vuelta a Egipto para encontrar el documento original de la venta. Jushim hijo de Dan, que no escuchó nada de la discusión legal, preguntó cuál era el motivo de la demora, y cuando le explicaron inmediatamente gritó “¿hasta cuándo se va a seguir denigrando al abuelo?” Levantó la espada y degolló a Eisav.

La sordera de Jushim a los detalles del procedimiento judicial le permitió ver por encima de ella, e identificar el punto principal: que Eisav se estaba burlando de los hijos de Israel, los trataba de confundir y cada minuto que pasaba sin darle la contestación que le correspondía era un desprecio hacia nuestro pueblo. Por desgracia, la fuerza de este mensaje se conserva hasta hoy, y sería muy bueno que todos lo tomemos en cuenta.

La ira y la delicadeza (adinut)

La tarea de la rectificación de las cualidades se basa principalmente en hacerlas más refinadas, el desarrollo de sentidos más finos y sensibles. Pero al ocuparnos de esto, debemos tener cuidado del exceso de refinamiento, una situación en que por tanta delicadeza nos encontramos paralizados ante los crímenes y las distorsiones evidentes, incapaces de responder frente a ellos con la dureza apropiada. Al contrario, el exceso de gentileza lleva a una especie sentidos groseros y toscos. Una refinación completa, entonces, es la refinación conciente de sus limitaciones, capaz, en los momentos de necesidad, de ponerse a un lado y dar lugar a la ira justificada.

Esta relación entre la delicadeza y la firmeza se resume en el Midrash de los sabios de bendita memoria que relata acerca de uno de los valientes de David, de nombre “Adino Haetzni”. Interpretan los sabios que los nombres de los héroes de David eran en esencia calificativos de las heroicidades del rey David mismo, y que es llamado “Adino Haetzni” porque “cuando se sentaba a ocuparse de la Torá se hacía delicado (adin) como un gusano, y en el momento que salía a la guerra se endurecía como un árbol”. En David, su asertividad, su firmeza no se oponía a su delicadeza sino lo contrario, la complementaba.

David es un descendiente de Iehudá, la tribu de la nobleza, y este Midrash cuenta cómo se incorporó la cualidad de la tribu de Dan su opuesto. Pero como Iehudá tiene que aprender de Dan, también Dan tiene que aprender de Iehudá. Efectivamente, una de sus principales aspiraciones del fundador del Jasidismo, el Baal Shem Tov, era unir a los judíos simples con los sabios, y mostrarles que cada uno tiene algo que aprender del otro.

La lección que Dan tiene que aprender de Iehudá no es cómo agregar ira a la delicadeza, sino cómo moderar la ira. La ira moderada. Ira moderada no explota hacia afuera sin control, sino que se genera a partir de una comprensión lúcida. Es una cólera focalizada que viene a servir a un objetivo, no a desahogar nuestra irritación, y proviene de una personalidad tranquila y relajada, incluso divertida. Este es el significado jasídico del verso de Eclesiastes: “tov caas misjok”, “buena es la ira que la risa”: “la ira buena, explica el Jasidut, proviene de la risa, de la diversión íntima imbuida de fe de que también las cosas que más nos enfurecen son en última instancia de Dios, “El que mora en los Cielos ríe”. Fueron creados como un desafío para nosotros, para enfrentarnos a ellos con un espíritu noble y tranquilo.

Ver los doce sentidos del alma

PARASHÁ VAERÁ 5773

CONOCER A DIOS ES VIVIR

De las enseñanzas de Rabi Shimón bar Iojai,

traducción y comentario de Simja-Shmuel Treister

Esta traducción es de “Raia MeHemna“, uno de los subtextos del Zohar donde Rabí Shimón enseña el significado interno de las mitzvot como les fueron reveladas a él. La intención meditativa sincera de una persona al realizar una mitzvá es de gran valor místico. El propósito de la enseñanza de estas revelaciones es apoyar y adornar la sagrada Shejiná en el exilio. Esto acerca la redención final y la última revelación de que Di-s es uno. El análisis está en la línea de una de las 13 formas en que se interpreta la Torá – “A partir de principio general surge una regla en particular”.

“Y los tomaré para mí como Mi pueblo, y Yo seré para vosotros Dios, y sabréis que Yo soy el Señor, tu Dios, que te saca de bajo la opresión de Egipto.” (Ex. 6:7).

Este mandamiento [de conocer a Dios] es el primero de todos los mandamientos.

El conocimiento de Di-s se divide en dos categorías insinuadas en este versículo. En primer lugar está el entendimiento general de que hay una fuerza suprema que supervisa el mundo. Lo siguiente es comprender que dicho control e influencia recae hasta en los más finos detalles de este mundo.

El comienzo de cada mitzvá es conocer a Dios en Su generalidad. ¿Qué es esta generalidad? Es saber que hay una fuerza gobernante arriba que el Amo del mundo. Él creó todos los mundos [Atzilut, Beriá, Ietzirá y Asiá], los cielos y la tierra y todas sus fuerzas. Este es [conocer a Dios] en general [que consta de seis partes]:

  1. . Saber que hay [entender esta realidad];
  2. . Una fuerza gobernante [que comanda a todas las fuerzas del universo];
  3. . Por encima de [la razón superior a todo razonamiento];
  4. . Amor de todos los mundos [y que actúa en ellos, no abandonándolos al control de fuerzas secundarias];
  5. . Creador de todos los mundos [de la nada a algo – ex nihilo];
  6. . Y todas sus fuerzas. [No creer que las obras de la Creación son de alguna manera autosuficientes].

Todo esto es el principio para llegar a una verdadera creencia en Dios en general.

La finalidad de todo [saber y creer] es en lo particular, conocerLo en particular [detalles].

Esta es la esencia interior de la Divinidad contenida en las sefirot particulares y a través de la evolución de Su poder en los Mundos y los secretos de la Creación. Una persona en este mundo se ocupa de lo general y lo particular…

Lo general y lo particular son el principio [Atzilut] y el final [Asiá], el secreto de lo masculino y lo femenino [positivo y negativo] a la vez. Así nos encontramos con que una persona en este mundo trata con el general y particular [en llegar a la fe en Dios]. En este mundo la persona misma se compone de lo general y lo particular. [En general existe como un cuerpo físico compuesto por miembros particulares]. Esta es la razón por la que el principio de todo es saber que hay un controlador y un juez en este mundo y que Él es el amo de todos los mundos. Él hizo al hombre del polvo de la tierra, y sopló en su nariz el alma de la vida.

En hebreo, la palabra para “hombre” es “adam“, la palabra “tierra” es “adamá“, la palabra “aliento” es “neshimá“, la palabra “alma” es “Neshamá“. El acto de la respiración da vida al cuerpo, que es el contenedor del alma, y proceden en última instancia del aliento original de Dios en el primer hombre. En hebreo, las palabras textuales de “hombre” y “alma” se refieren claramente a estos conceptos. Esta es una de las razones por las cuales el hebreo es llamado la Lengua Sagrada, ya que las propias letras y palabras expresar significados divinos ocultos.

Cuando el pueblo de Israel salió de Egipto no conocían a Dios. La falta de conocimiento de Dios era el aspecto más sombrío de ese exilio…

El más profundo exilio es no saber de la existencia de Dios – en general o en particular. Egipto era la esencia de todos los exilios y esta falta de conocimiento de Dios era el aspecto más sombrío de ese exilio. Recordamos constantemente la salida de Egipto, porque esa era la esencia de la lucha en nuestras propias vidas, salir de la oscuridad y conocer a Dios.

Cuando Moisés llegó a [redimirlos a] ellos, éste fue el primer mandamiento porque les enseñó como está escrito: “Y sabréis que yo soy el Señor, tu Dios, que te saca de debajo [¡obsérvese el tiempo presente!] los sufrimientos de Egipto.

La palabra para Egipto en hebreo es “Mitzraim”, está relacionado con la palabra “meitzarim“, que significa “constricción”. El primer mandamiento para salir de una conciencia estrecha es reconocer lo Divino.

Si no fuera por este mandamiento Israel no habría creído en los milagros y milagros que se hicieron para ellos en Egipto. Cuando entendieron esto en general, les fueron hechos milagros y maravillas [en particular].

De aquí vemos que una persona necesita entender y creer en Aquel que está haciendo la historia con el fin de merecer los milagros relacionados con la redención del exilio.

Zohar, Parashat Vaierá, pg. 25 bis, traducción y comentario de Simja-Shmuel Treister

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CONFERENCIA SEMANAL ZOHAR Y AIN BEIS

Del shiur Ain Beis Parashat Shemot 28 de Tevet 5773, Ierushalaim

(Notas tomadas durante la clase, no han sido ni revisadas ni editadas por Harav Ginsburgh)

Dijimos que en esta semana podríamos enseñar Menujah Vesimjaj basado en el nigun de jabad en el que se canta: Lejaim, Lejaim, matzal tov

Esto fue menuja vesimja en el nigun de Jabad. Ahora, cantémosla nuevamente, pero esta vez con el nigun Nadborna que aprendimos la semana pasada.

Una vez más, esta vez con el nigun Jabad

Lejaim, lejaim, joson Lejaim.

Hoy estamos en la parashá Vaera, el primer verso es “Elokim habló a Moshe y le dijo: ‘Yo soy Havaiá’”. Comienza con Elokim y termina con Havaiá. Hay numerosos comentarios y muy diferentes, tanto en la dimensión revelada como en Jasidut, que hablan exclusivamente del porqué de este cambio entre los Nombres de Dios –el verso se inicia con Elokim y termina con Havaiá, el Nombre esencial de Dios. La interpretación literal es que en el final de la parashá anterior, Moshe vino con quejas ante Hashem sobre la situación del pueblo judío, diciendo que ésta había empeorado desde que fue al Faraón. Entonces, debido a que le habló con dureza al Todopoderoso, Dios lo reprendió con el Nombre del juicio, Elokim. Esta es la explicación del Rashi, basada en la lectura literal de la Torá.

En jasidut, el Deguel Majane Efraim (el nieto del Baal Shem Tov) explica que en esta parashá comienzan las 10 plagas, las 10 plagas dirigidas a someter a los egipcios. Para salir de nuestro exilio tenemos que someter a la kelipa, la cáscara de impureza que nos atormenta y así poder liberarnos de ella. Para lograrlo necesitamos a Moshe Rabeinu, el poder que sabe cómo golpear a Egipto para salir de él. Hay una enseñanza jasídica traída del Tania, un dicho muy básico que dice “no hay rey sin pueblo”. El Todopoderoso es el Rey, pero aquí Moshé Rabeinu es el rey terrenal y como tal necesita un pueblo, y existen diferentes explicaciones para la palabra “pueblo”, עם , am. En este caso, éste representa las 10 plagas (מכות עשר ), “no hay rey sin 10 plagas”. Si el rey no sabe cómo golpear la kelipá 10 veces, no es un rey.

El Shla”h dice y el Rebe repite esto en su nombre, que todo lo que leemos en la Torá se corresponde con el tiempo en el que lo leemos. Comenzamos leyendo sobre las 10 plagas en el mes de Tevet y continuamos en el mes de Shevat. El sentido de Tevet es la ira justa, como dice el verso de los Salmos 4:5:

סלה ודומו משכבכם על בלבבכם אמרו תחטאו ואל רגזו ,

“enójense pero no pequen, reflexionen en sus corazones

sobre vuestros lechos y guardad silencio para siempre”.

Debemos enojarnos e indignarnos por la kelipá, con el Faraón que trata de hacernos trasgredir. El final del verso es סלה דומו , domu sela, “guarden silencio por siempre”, le hace recordar el día del fallecimiento, el día de su muerte. Así es cómo Moshé Rabeinu comienza su advertencia, le dice de entrada al Faraón que el final será su muerte. Esta nos es la forma en que la gente acostumbra hacer las cosas, revelando completamente sus intenciones. Ahora, la palabra דומו , domu, alude a ambas plagas: la primera de sangre que es דם , dam, y la plaga final de la muerte de los primogénitos, דומו , el día de la muerte. Así, este mes es el tiempo de enojarnos con nuestra inclinación al mal. Moshé Rabeinu tiene este poder, pero Aarón no. Como está dicho: Moshé es el Elokim del Faraón, su poder de juicio (no Aarón). Por eso Moshé es quien le dice a Aarón cómo realizar las 3 primeras plagas.

En Jasidut está explicado que cada día tenemos la tarea de castigar a la inclinación al mal con 10 plagas. Desde el momento en que despertamos, con el Modé Aní, “reconozco yo”, y el lavado de nuestras manos, alistándonos para el dávenen (las oraciones de la mañana) todo el rezo hasta la Amida, la plegaria silenciosa y después el Nefilat Apaim, la confesión (correspondiente a Adam Kadmón, el hombre primigenio). Todo este proceso de elevación y acercamiento a Hashem es un momento de salida de Egipto, cada día en cada generación. Y como dice el Tania, el momento principal es cuando decimos el Shemá.

Pero, otra vez, en particular, el partzuf de las plagas en cada día es que en ese punto logramos llegar a la plaga de la mezcla de animales salvajes (ערוב)

¿Cuál es la conexión entre el shema y el Arov, la mezcla de los animales salvajes? Así como es interesante para entender, también es interesante para ver cómo nuestro servicio de oraciones de la mañana corresponde a las 10 plagas, permitiéndonos liberarnos de nuestro propio Faraón interno y aferrarnos a Dios. Es muy apropiado para lidiar con este tema al final del mes de Tevet, cuyo sentido es el sentido de la ira (dirigida hacia la inclinación al mal).

El Rambam escribe que hay dos rasgos en el carácter de los que hay que alejarse completamente: el enojo y el orgullo (exagerados). Pero, también existe la mitzvá de asemejarse a Dios, y la canción del Mar dice: ashira laHashem kigaó gaá, “cantaré a Dios porque se enorgulleció sobre los engreídos”, Dios se enorgullece sobre aquellos que están llenos de orgullo de sí mismos. Y, ya que debemos asemejarnos a Dios, también nosotros como judíos debemos tener orgullo sobre aquellos que se enorgullecen de sí mismos. Este es el punto del rey. Y aunque el amor propio es el peor rasgo en el carácter, es necesario para ser usado de forma correcta en nuestro servicio a Dios.

Y lo mismo con la ira (כעס , caás, 150). La relación entre estos dos rasgos es que el enojo, la ira, es igual a 10 veces el valor en guematria de la palabra orgullo (גאוה , ). El Arizal escribe que una persona que tiene amor propio, está afligiendo las dos primeras letras de Havaiá (cuya guematria es igual a 15, el valor de “orgullo”). Algunas veces, con el fin de prevenir a un niño (o a un adulto) de transgredir, tenemos que mostrar que supuestamente estamos enojados. Pero, internamente tenemos que estar en calma. Pero esto, aun, no es usar la ira en el servicio a Di´s. Más bien, así como hay un camino para usar el orgullo, algunas veces tenemos que enojarnos, aun si esto es un riesgo. Se dice de Moshé Rabeinu que como él se enojaba se equivocó, el más grande de todos los hombres. Él se enojó, y probablemente realmente se enojó. Entonces, Moshé Rabeinu tomó el riesgo de enojarse. Él sabía que esto podía llevarlo al error. Estos dos rasgos, ira y orgullo, en el servicio a Di´s, son como “jugar con fuego”. Esto es lo que se dice en el Tania, que estos dos rasgos vienen del elemento fuego, y por tanto, no todos deberían jugar con fuego. Pero, un rey tiene que saber cómo jugar con el fuego. Tiene que saber cómo usar estos dos rasgos en el servicio a Dios, con el fin de santificarnos. Así que todo es santificación del Nombre de Di´s. Pues sabemos que santidad, la santificación es אש יקוד . El Rambam no escribe esto. Él escribe la enseñanza literal, que el orgullo y la ira deberían evitarse totalmente. Pero, los sabios dicen que un sabio, un talmid jajam debería saber cómo tener un octavo de un octavo de orgullo, ‘ ה בדרכי לבו ויגבה (eso fue dicho de Iehoshafat, rey de Israel).

Ahora regresemos al primer verso de la parasha:

Dice el Degel Maheneh Efraim, sobre las 10 plagas dice:, que cada plaga era, al mismo tiempo, una plaga para Egipto y un bálsamo para el pueblo judío. El pueblo en Egipto estaba enfermo, necesitaba ser sanado. Pero, si existe algún germen que esté en todo su cuerpo, debemos pelear con él. Es el enemigo. Al plagar a Egipto (al germen) nosotros curamos al pueblo judío (el cuerpo). Este es un riesgo que el rey debe tener. El rey debe saber cómo sanar a su pueblo.

Para hacerlo, tiene que saber cómo usar de forma correcta, en una forma balanceada, la izquierda y la derecha, donde la derecha acerca y la izquierda rechaza. Cada uno de nosotros debe saber cómo tratar a los demás de la manera correcta; pero, de forma especial, cuando tratamos con un enemigo, ahí debe haber mucho de la izquierda para alejarlo. Pero, así como hay un rechazo de la izquierda, en el mismo grado, está el acercar de la derecha. Hashem le ha dado a Moshé Rabeinu el balance apropiado entre esto: cómo aproximarse al Faraón de la manera correcta, y al mismo tiempo cómo hablar al pueblo judío. Como dijimos, según el entendimiento literal, Di´s estaba hablando con Moshé con el Nombre de Elokim; porque Moshé había despertado la medida del juicio cuando se quejó. Pero, de acuerdo con este nuevo entendimiento, aquí Di´s le está dando a Moshé Rabeinu el poder de Elokim, el poder de plagar Egipto. Él le da a él este poder en este verso.

Pero, después que Di´s dijo: ‘הוי אני , que la meta fina es que Yo soy Havaiá, el Nombre de la misericordia, la cual pretende el pueblo judío. Primero Yo te doy Elokim, el poder de la mano izquierda, y después te doy el poder de la mano derecha, para sanar al pueblo judío y traerlos cerca. Este es un balance, pero todavía la derecha es más pronunciada. De acuerdo con esta interpretación, entonces los dos Nombres: Elokim (izquierda) y Havaiá (derecha) son un propósito. De esto se deriva que esta parashá es la mejor para rectificar una mala situación en nosotros mismos o, de otra forma, que a través de la izquierda alejemos el mal camino y la derecha abrace el bueno, ascendiendo más alto y más alto hasta alcanzar el nivel de Atika Kadisha, donde no hay izquierda, todo es derecha. Pero, aquí abajo, en nuestra realidad, en Zeir Anpin, existen ambos: Elokim y Havaiá, pero deben ser balanceados.

Nosotros queremos ir a una tercera explicación de este cambio de Elokim a Havaiá en este verso, la interpretación más profunda de todas. Primero regresaremos al final de la parashá de la última semana y a lo que Moshé Rabeinu dijo a Hashem. Él dijo: “Adni, ¿por qué abandonas a este pueblo, por qué me has enviado. Porque desde el momento en que fui al Faraón para hablar en Tu Nombre, has perjudicado a este pueblo, más Tú no has rescatado a Tu pueblo”. Esto se llama ” ה הקב של מדותיו אחר הרלהר , dudar de la manera en que Di´s guía el mundo. Podríamos decir que Moshé Rabeinu está enojado con Hashem. Otra vez, este es el sentido del mes de Tevet. Hemos explicado en alguna otra parte que la fuente de todo enojo negativo (el 99% de todo el enojo es negativo) en una persona está en el enoja de la persona contra Di´s. Después de estar enojado con Di´s, una persona está enojada con otras cosas. Según Rashi, Moshé aquí está enojado con Di´s, y entonces Di´s responde: “Ahora verás lo que le haré al Faraón, etc”. De acuerdo con Rashi esto estaba mal según Moshe, pues Moshé duda de la providencia de Di´s. El Rebe tiene una sija sobre cómo es posible que Moshé Rabeinu dudara de la conducta de Di´s. Aun esto es lo que el significado literal parece estar diciendo. Pero, si vamos un poco más profundo vemos que Di´s no está enojado con Moshé por lo que dijo. Por ejemplo, vemos que al final de la visión de la zarza ardiendo, cuando Moshé aún no deseaba tomar la tarea de liberar al pueblo judío de Egipto, Di´s se enojó con él, dice literalmente. במשה ה’ אף ויחר . No está claro la impresión que este enojo dejó sobre el mundo, pero cuando sea que Di´s se enoja debe haber una impresión que es dejada encima (no son sólo “sentimientos” como lo son en una persona).

Los sabios dicen que la impresión fue que Aarón se suponía ser el Levita y Moshé el Cohen, pero esto fue cambiado debido a la ira de Di´s. Pero, aquí, no hay pista de que Di´s se enojara en lo absoluto por lo que Moshé dijo. Rashi toma su interpretación de los sabios, pero, nuevamente, esto no es lo que literalmente parece haber pasado. Un niño de kínder no entendería que Di´s estaba enojado con Moshé por lo que dijo. Más bien, parece que Di’s sigue el ejemplo de Moshé y le dice: De hecho, espera un poco y verás lo que voy a hacer al Faraón; pues con mano fuerte él conducirá al pueblo judío fuera de Egipto.

¿Cuál es el entendimiento interior de este simple entendimiento literal de estos versos? Moshé Rabeinu aparentemente está enojado, entonces Di´s debería estar enojado también. Pero, esto es exactamente lo que Dios desea. Él dice, si tú estás enojado conmigo, eso es lo que Yo esperaba. Toma tu enojo y con él destruye a Egipto con las 10 plagas. Ahora que sabes cómo enojarte, eres digno de ser Elokim. Tú sabes cómo gritar “hasta que estemos en exilio” como gritó el Rebe. Hay un dicho famoso del BST, que sólo el físico más experto sabe cómo administrar veneno de la manera correcta. Esto es jugar con fuego, y sólo esta persona es digna de ser un rey. Nuevamente, este es el mejor momento del año para aprender cómo hacer esto de forma correcta, el sentido de Tevet es estar enojado y el significado de Shevat es ser una rama, algo con lo que golpeas. Moshé Rabeinu es la rama con la que Dios abate a los egipcios. Continua

Tora y Matemáticas

Genética de las Matemáticas – Parte 1

La palabra más larga en el Pentateuco

La palabra más larga en el Pentateuco, que tiene el mayor número de letras, aparece en Parshat Vaeira, en uno los versículos que describe la segunda de las Diez Plagas, la plaga de las ranas.

“El río se hacinará por las ranas y estas subirán y entrarán en tu casa y en tu dormitorio y en tu cama, y en las casas de tus siervos, y en tu pueblo y en tus hornos y en tu masa.”[44]

La palabra en cuestión es “en tu masa” (וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ, uvemisharoteja) y tiene 10 letras. Lo primero que viene a la mente es que tal vez el fenómeno de diez se relaciona con las Diez Plagas mismas, como diciendo que las diez Plagas están aludidas en esta inusual palabra que aparece en el contexto de la segunda plaga de las ranas. El valor numérico de וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיך es 985, un número cuyo significado trataremos de entender.

El verso en el cual aparece tiene 15 palabras, que es el triángulo de 5, así que pondremos este verso en una figura triangular. Pero, notemos que la estructura interna del verso (definida por la marca de la melódica llamada etnajta, que es como un punto y seguido) lo divide en 10 palabras y 5 palabras. Contextualmente, las primeras 10 se dirigen al Faraón y las restantes 5 se refieren a su pueblo.

Efectivamente, Rashi en este verso nota este cambio de sujeto y explica que debido a que el Faraón fue el primero en conjurar un plan para esclavizar a los judíos, las ranas lo castigaron primero a él después fueron a su gente. Esta división de las 15 palabras en 10 y 5 es conocida en Cabalá como “un entero y una mitad”. Desde un punto de vista geométrico, las primeras 4 filas del triángulo de 5 tienen 10 palabras y la fila final contiene las restantes 5:

Note que la palabra וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ es la 15a y final de este verso. Es interesante notar que si añadimos 15 a 985, obtenemos 1000, o 10 (aludiendo ambos al número de letras en la palabra y al número de plagas) a la 3ª potencia. Regresaremos más tarde a este fenómeno.

Todo el verso consta de 78 letras, el triángulo de 12. Y otra vez la estructura interna divide claramente el verso en dos. Las primeras 10 palabras tienen 45 letras, el triángulo de 9 y las restantes 5 palabras poseen 33 letras, las últimas tres líneas para completar el triángulo de 12. Dibujemos el verso en esta forma:

Ya que la palabra וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ tiene 10 letras, también puede ser escrita en la forma del triángulo de 4, como esto:

El Record de Guematría en el Pentateuco

Ahora, de la palabra más larga en el Pentateuco, vayamos ahora a la palabra con el mayor valor numérico. Esta palabra aparece en parshat Koraj, en el relato de la controversia de Koraj, Datan y Aviram contra Moshé Rabeinu.

“¿No es suficiente que nos hayas sacado de una tierra en la que fluye leche y miel para que perezcamos en el desierto, que aun también pretendes dominarnos por la fuerza?

La palabra Hebrea para “dominarnos” (תִשְׂתָּרֵר, tistarer) tiene el mayor valor numérico de todas las palabras del Pentateuco, 1500. 1500 no sólo es un bonito número redondo, es también el valor de Havaiá (י־הוה) en lo que se conoce en la Cabalá como hakaá pratit (multiplicación interna). Para calcular esto tomamos el equivalente numérico de cada una de las cuatro letras de Havaiá, iud (י ) – 10, hei (ה ) – 5, vav (ו ) – 6, hei (ה ) – 5, y los multiplicamos entre sí: 10 · 5 · 6 · 5 = 1500

En este verso, תִשְׂתָּרֵר es la 11ª palabra. Inmediatamente viene a la mente que la palabra más larga, וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ, fue la 15ª palabra en su verso. 11 y 15 son por supuesto los valores de las dos mitades de Havaiá. Las primeras dos letras, י־ה, el Nombre Sagrado Ka, es igual a 15. Las dos letras finales, וה, igual a 11. Exploraremos esto con detalle más adelante.

Como תִשְׂתָּרֵר posee 5 letras, completa a וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ que tiene 10 letras para formar el triángulo de 5, de esta manera

Además, este verso en parshat Koraj contiene 58 letras en total y así completa (como las últimas cuatro líneas) el triángulo de 12 (del verso anterior) al triángulo de 16, de 136 letras. Sumemos las letras Hebreas de este verso (הַמְעַט כִּי הֶעֱלִיתָנוּ מֵאֶרֶץ זָבַת חָלָב וּדְבַשׁ לַהֲמִיתֵנוּ בַּמִּדְבָּר כִּי תִשְׂתָּרֵר עָלֵינוּ גַּם הִשְׂתָּרֵר, “no es suficiente que…”) a las letras del verso de Va’eira para formar el triángulo de 16:

Todo este fenómeno ilustra que las dos palabras, la más larga y la más grande, y los dos versículos en los cuales aparecen se complementan y completan uno al otro.

El más Largo con el más Grande

Pero, vayamos a otro nivel más profundo en nuestro estudio de la palabra más larga y la más grande (numéricamente) de la Torá. La indicación más importante de que estas dos palabras deben ir juntas puede ser vista en su guematría combinada.

985 1500 = 2485

Sorprendentemente, 2485 es el triángulo de 70, aludiendo a las 70 caras o aspectos de la Torá. Por otra parte, el valor combinado de los nombres hebreos de los Cinco Libros de Moshé (el Pentateuco) exactamente como están escritos en la Torá: Génesis (בְּרֵאשִׁית, Bereshit), Éxodo (שְׁמוֹת, Shemot), Levítico (וַיִקְרָא, Vaikrá), Números (בַּמִדְבָּר, Bamidvar), y Deuteronomio (הַדְבָרִים, Hadevarim), ¡es también 2485 exactamente!

Demos una Mirada más de cerca a los nombres de los libros del Pentateuco. Primero, notemos que juntos tienen 26 letras, el valor de Havaiá, el Nombre esencial de Dios. Y estas 26 letras se dividen claramente en 15 en los primeros tres (בְּרֵאשִׁית שְׁמוֹת וַיִקְרָא) y 11 más en los últimos dos (בַּמִדְבָּר הַדְבָרִים), tal como Havaiá se divide en 15 y 11, como se vio arriba.

El valor promedio de los nombres es 2485/5 = 497. ¡Pero, véase que este número está incorporado dentro de los nombres, ya que la guematría de los nombres del 1º, 3º y 5º libros (בְּרֵאשִׁית וַיִקְרָא הַדְבָרִים) es 3 · 497 mientras de la guematría de los nombres del 2º y 4º libros (שְׁמוֹת בַּמִדְבָּר) es 2 · 497!

Ahora unamos la guematria de la palabra más larga y la más grande de la Torá junto con sus localizaciones en sus respectivos versos. Entonces tenemos,

2485 ┴ 26 = 2511

2511 es el producto de 81, “Yo” (אָנֹכִי, Anojí), y 31, el Nombre sagrado, Kel (אֵ־ל, Kel). Sorprendentemente, estas dos palabras aparecen en secuencia sólo dos veces en toda la Biblia, una vez en el orden “Yo soy Kel” (אָנֹכִי אֵ־ל, Anoji Kel) y una vez en el orden inverso, “Kel soy Yo” (אֵ־ל אָנֹכִי, Kel Anoji). Por supuesto, independientemente del orden, multiplicándolos un por el otro nos da el producto 2511:

  • “Recuerda la historia, porque Yo Soy Dios [Kel] y no hay otro dios, ni nada como Yo.”[45]
  • “No ejecutaré la ferocidad de mi ira, no destruiré otra vez a Efraim, porque Dios soy [Kel] y no un hombre, el Sagrado en medio de ti, y no entraré en la ciudad [como un enemigo].”[46]

Tripletes Pitagóricos.

Exploremos un poco más en el significado de 985, el valor de וּבְמִשְׁאֲרוֹתֶיךָ. En otro articulo, discutimos los tripletes Pitagóricos de la forma a, b, c, donde b = a ┴ 1 y por supuesto de a2 ┴ b2 = c2 como sabemos del teorema de Pitágoras, Los tripletes que vimos eran

  • 3, 4, 5
  • 20, 21, 29
  • 119, 120, 169.

El siguiente de la serie es 696, 697, 985. Entonces, aquí hemos encontrado a 985. El triplete precedente a 3, 4, 5 es: 0, 1, 1

Esto significa que 985 es el quinto número en la serie: 1, 5, 29, 169, 985.

La suma de estos primeros cuatro números, 204, ya fue comentada, y si incluimos el quinto 985 es 1189 = 29 · 41 (el secreto de Iehudit y Matitiahu[47]). Pero hay que notar que la suma de los números del quinto triplete 696, 697, 985 es 2378 = 2 · 1189 = 58 · 41. En la Biblia, estos números representan al Rey Rejavam (hijo de Salomón en cuyo reinado el pueblo judío fue dividido en dos reinó, el del norte y el del sur). Rejavam reinó a la edad de 41 y vivió hasta los 58.[48] Potencialmente, podría haber sido el Mashiaj, ya que fue el primer descendiente del Rey David a través de Salomón, pero no pasó la prueba.

Recurrencia y Genética de la Matemática

Ahora nos gustaría saber cuál es la regla —el algoritmo— para la función recurrente que genera esta serie. La regla involucrada es bastante común en muchas series. Su naturaleza recurrente puede ser asociada a la genética, donde la siguiente generación es producto de la generación previa con alguna variación o corrección producida incluso en generaciones anteriores. Por esta razón, describimos las funciones recurrentes de esta clase como genética de la matemática.

Para ilustrar la regla recurrente involucrada, es mejor organizar a “a”, “b”, y “c” en tres columnas:

a B c
0 1 1
3 4 5
20 21 29
119 120 169
696 697 985

Formulada en el lenguaje genético, podemos decir que la regla para la columna “c” es: el “hijo” igual a 6 veces el “padre,” menos el “abuelo.”

En notación matemática, podemos escribir:

ck = 6ck-1 – ck-2

Por ejemplo, 985 = 6 · 169 – 29

Es interesante notar que hay otra regla para crear la columna “c”, formulada otra vez en el lenguaje genético: los hijos son igual a 7 veces la diferencia entre el padre y el abuelo más el bisabuelo. O, en notación matemática,

ck = 7(ck-1 – ck-2) ck-3

Por ejemplo, 985 = 7 · (169 – 29) 5

A veces la corrección es provista desde fuera de la “familia,” como en el caso de la columna “a”. La regla ahí puede ser descrita como: el hijo es igual a 6 veces su padre menos su abuelo más 2, donde el 2 es un mero factor de corrección viniendo de afuera de la familia. O, en notación matemática

ak = 6ak-1 – ak-2 2

Por ejemplo 696 = 6 · 119 – 20 2

La regla para la columna “b” es la misma, excepto que el factor externo de corrección es (-2) ó

bk = 6bk-1 – bk-2 – 2

Por ejemplo 697 = 6 · 120 – 21 – 2

Si ahora adoptamos la segunda variación de la regla para la columna “c”, tomando en cuenta las cuatro generaciones, la regla es la misma para cada columna. Explícitamente,

ak = 7(ak-1 – ak-2) ak-3

bk = 7(bk-1 – bk-2) bk-3

Por ejemplo: 696 = 7 · (119 – 20) 3 y 697 = 7 · (120 – 21) 4

Otra ventaja de la segunda variación es que no incluye la corrección externa ( 2 o – 2) de la primera variación. En otras palabras, todo queda en familia y aunque requiere conocer más de la historia familiar (4 generaciones, en lugar de 3) al final es más uniforme y elegante.

Con ambas variaciones, el aporte del padre es positivo, el del abuelo es negativo y como se ve sólo en la segunda variación, el aporte del bisabuelo es positivo nuevamente.

Conclusión

Lo que hemos observado aquí (las 2 reglas y sus ventajas) es verdad para todas las funciones recurrentes similares en general y las que aparecen en la Torá específicamente.

En un próximo artículo sobre este tema de genética de las matemáticas, exploraremos otras funciones recurrentes que son producidas por varios temas en la Torá.

VIDEOS

Videos Rabino Itzjak Guinsburgh

LA IRA SAGRADA

El Nacimiento de un Pueblo

5771

https://youtu.be/q_uC75buM2Y

En la parashá de la semana, Vaerá, está el comienzo de las 10 plagas de Egipto. En esta parashá Vaerá hay 7 plagas y las 3 últimas están en la próxima parashá Bo. Siendo “que todo va de acuerdo al comienzo”, la primera plaga da el tono de todas las demás, aunque por supuesto el momento culminante está en la última plaga. Pero como “el final está insertado en el principio y el principio en el final”, el final es la plaga de los primogénitos. Pero en esencia Dios advierte a Mitzraim, al faraón, incluso antes del inicio de todas las plagas.

De todas maneras, la primera plaga es golpear la idolatría de Egipto, que es el río Nilo, transformar sus aguas en sangre, por eso la primera plaga es sangre. Todo comienza con sangre y también finaliza con sangre en la plaga de los primogénitos. Todas las plagas están bajo la señal de la sangre, de sangre en sangre. Entonces, la primera plaga es tomar el agua y transformarla en sangre.

El faraón hizo de sí mismo una idolatría. Salía cada día al agua, al Nilo, y hacía allí sus necesidades para que piensen que no necesitaba hacerlo, así explica Rashi. Entonces, Hashem le dice a Moshé Rabeinu: “sal a la mañana, bien temprano, te presentarás ante él”, te aparecerás ante el faraón cuando llegue y le advertirás de la plaga de sangre. Así comienzan las plagas.

Respecto a esta expresión “y te presentarás ante él” hay discusión en la Guemará, cuál es la intención de que Hashem le diga a Moshé: ונצבת לקראתו , venitzavta licrató, que es la base de las plagas. Hay dos opiniones de una pareja muy conocida de amoraim, los sabios Rabí Iojanán y Reish Lakish. De acuerdo con la conclusión del Talmud, Rabí Iojanán dice de “y te presentarás ante él”, le está recordando que es un rey, una persona honorable, y hay una mitzvá de la Torá de honrar a los reyes. También en otro contexto, que ya veremos, vemos que hay un precepto de honrar al faraón, aunque sea un malvado, porque es un rey. Entonces Hashem le está diciendo a Moshé, que al presentarse le explique de frente y de buena manera, exactamente lo que va a suceder aquí. Háblale bien, detállale exactamente qué deseas, que sucederá, y que le adviertes habrá una plaga, que va a ser malo para él, pero dilo de buena manera.

Explica el Rebe de Lubavitch que incluso las cosas más duras hay que decirlas de forma gentil. A pesar de que parezca extraño, cuando vayas a hacer algo duro, hazlo de buena manera, y en especial aquí que es un rey, y aunque es un rey gentil, de todas maneras, explícale de frente. Esto es de acuerdo a lo que explica Rabí Iojanán.

Reish Lakish por el contrario dice no, venitzavta licrató, “y te presentarás ante él”, hazut bo panim, “con atrevimiento”, no “explícale” sino hazlo con bravura. Esta es una discrepancia de un extremo al otro. Rashi dice que ambos aprenden de la palabra “ante él” que significa de forma honorable o como a veces se ve en el Tanaj, una expresión de guerra. Rabí Shmuel Eliezer, el Maharashá , dice que Rabí Iojanán de seguro lo aprende de “ante él”, ante su grandeza, pero Reish Lakish lo aprende de “presentarse”, que a veces significa pelear, plantear una lucha. Sea como sea hay discrepancia entre los sabios.

El Talmud conecta esta discrepancia con la cuestión de cómo se le debe hablar al Faraón, con amabilidad o con atrevimiento. Reish Lakish dijo algo más respecto a un verso de la parashá siguiente. Dijimos que las plagas comienzan con sangre y llegan hasta la plaga de los primogénitos, también una clase de sangre. ¿Qué dice allí? Allí está escrito que Moshé Rabeinu se presentó ante el faraón y le advirtió acerca de la última plaga de la oscuridad, pero luego ya no volvió. Y más todavía, el faraón mismo le dijo que si volvía lo iba a matar. Pero Moshé le advirtió allí de la plaga de los primogénitos y entonces le dijo “y bajarán a mi todos tus esclavos”, todos tus esclavos nos pedirán que salgamos de Egipto, y no “tú bajarás”, por rendir honor al reinado. Al final el faraón mismo bajó para rogarle que se vayan de Egipto. Y al final está escrito “y salió del faraón con furia”. Este es el final del verso y de la parashá. Primero habló amablemente, “y bajarán” y no “tú bajarás”, pero, en definitiva, la última palabra, lo último que sucedió antes de la plaga de los primogénitos es que salieron de ante el Faraón con furia.

Hace una semana explicamos que todas las porciones semanales tienen una expresión central que suma numéricamente “Bereshit”, “En el principio”, que es como el bereshit de la parashá. En la próxima parashá Bo la expresión es “Y salió del faraón con enojo” = Bereshit, ויצא מעם פרעה בחרי אף ” = בראשית . Pero además hay otra palabra. Está escrito en Tikunei Zohar que las letras de Bereshit, בראשית , es ברית אש , brit esh, “Pacto de fuego”. Hay muchas combinaciones con las letras de la palabra Bereshit, y uno de los principales que trae el Zohar es que sus dos letras iniciales y las dos últimas, forman la palabra, pacto brit, y las dos letras centrales forman fuego, esh. Aquí la expresión “Y salió del faraón” = britויצא  מעם פרעה   = ברית y “con furia” = fuego, חרי אף   = אש Así se despide Moshé del faraón hacia el final, antes de la plaga de los primogénitos.

¿Qué escriben los sabios? Primero habla amablemente, como dice Rabí Ionaján. Pero aquí Reish Lakish explica las palabras finales –y todo sigue de acuerdo al final- que “salieron del faraón con enojo”, “¡le dio una bofetada y salió!” Simplemente se enfrentó al faraón, le dio una bofetada en la mejilla y salió, así explica Reish Lakish. Al estudiar Torá uno tiene que imaginarse y vivenciar todo lo que estudia. Aquí estas de pie frente al rey, él te habla no muy amablemente pero igual lo tratas con respeto, y hacia el final simplemente te acercas, le das una bofetada en la cara y sales, y este es el inicio de la plaga de los primogénitos.

¿Quiénes son Rabí Iojanán y Reish Lakish? Está escrito que Rabí Iojanán es el tzadik. Siempre que hay una discusión entre estos dos sabios, explica Jasidut que son dos personalidades típicas. Está el justo por principio, que nunca pecó, y está el que era pecador, y no simplemente pecador sino un delincuente tal como Reish Lakish, pero que volvió en teshuvá, arrepentimiento. Entonces, de entre todos los sabios, quizás el más importante que simboliza al Baal teshuvá es Reish Lakish. Terminó siendo un gran tzadik, pero comenzó siendo un arrepentido y Rabí Iojanán fue el justo completo. Ellos eran cuñados, ya que Rabí Iojanán lo acercó y lo hizo hacer teshuvá ofreciéndole a su hermana por esposa, y así sucedió.

Entonces vemos que el tzadik dice: “es un rey, hay que tratarlo con amabilidad”, pero el baal teshuvá salió de allí, no actúa así. Porque el baal teshuvá es un esclavo del faraón rey de Egipto, pero el tzadik no. Así está escrito que los levitas en Egipto no sufrieron la esclavitud, no fueron esclavos. ¿Pero quién es un judío malvado? Aquel que está en el exilio de Egipto, sometido e influenciado por el faraón que lo esclaviza, mentalmente un esclavo del faraón. Estuvo allí y salió, pero necesita darle al faraón la bofetada en el rostro antes de abandonarlo. Rabí Iojanán, el tzadik, no estuvo allí y puede hablarle amablemente, cumplir el precepto de honrar al rey.

Uno de los comentaristas más importantes, el Jatam Sofer, dice que en esencia también si se brinda honor al rey malvado, este honor es como dice el dicho “antes de la quiebra, genio”. Antes de que la clipa, la cáscara impura se quiebre finalmente, antes de que la persona se quiebre definitivamente hay que dejarlo enorgullecerse. Esto lo aprendemos de la reina Ester, que invitó a Hamán el malvado, lo elevó muy alto, le produjo gran orgullo de ser el único invitado frente al rey al banquete que organizó, sabiendo (gracias a la sabiduría de Ester, la sabiduría de las mujeres) que cuanto más se enaltece a Hamán así ha de caer, y así fue. Esto lo aprendemos del versículo “antes de la quiebra, genio”, antes de que se rompa la cáscara impureza, se la enorgullece.

Así dice el Jatam Sofer también respecto al faraón rey de Egipto, también en este contexto del faraón rey de Egipto, el precepto de darle honor es en realidad enaltecerlo para así derribarlo. Más todavía, dice algo más fuerte, si desprecias al rey, con esto lo absuelves. Si ya lo castigaste con el desprecio, entonces no recibirá el castigo que le corresponde porque ya lo recibió. Por lo tanto, si en verdad quieres que caiga totalmente tienes que darle honor. Así explica el Jatam Sofer. También en nuestro contexto, hay quienes honran al reinado con la intención que explica el Jatam Sofer.

Entonces hemos expresado aquí dos reglas generales: Por un lado, puede dar honor alguien que no estaba atrapado allí, que no salió de allí,  y por lo tanto no tiene la cualidad de la ira. Hoy, por Providencia Divina estamos en el mes de Tevet. Cada mes tiene un sentido de acuerdo a la Cabalá, y Tevet tiene el sentido de la ira. ¿Qué es la ira? “Enójense, pero no pequen”, enojo contra la impureza, el sentido del alma de enojarse por el mal que hay en el mundo.

¿Qué mejor ejemplo de ira sagrada que el enojo de Moshé con el faraón antes de la plaga de los primogénitos? “Lo abofeteó y salió”. Esto de la bofetada era tan fuerte para los grandes sabios de Israel en el tiempo del exilio, que alguien dijo quizás el significado no era textual, sino que le habló mal pero no le dio una bofetada. Otro explica que quizás “lo abofeteó”, sitró se refiere a sitra, “lado”, o sea que salió de costado, no como se sale frente a un noble caminando para atrás y mirando a la persona.

Vemos que entre los grandes sabios de Israel era difícil digerir la opinión de Reish Lakish. ¿Cómo alguien puede darle una bofetada al rey? Pero Rashi dice que así está escrito en el texto y es literalmente así para la mayoría de los comentaristas. Porque Reish Lakish estaba acostumbrado a esto. Era un baal teshuvá, y así tiene que enojarse y dar otra bofetada. Esto no contradice que al principio del mismo verso se habla con honra, porque también este honor que se da, como dijimos en nombre del Jatam Sofer, es “antes del quiebre, genio”, enaltecer a la cáscara impura para derribarla.

La intención por supuesto es como está escrito “golpeemos y se curó”, golpeemos a Egipto y curamos al pueblo de Israel, porque a través de las plagas el pueblo de Israel se eleva y nace. Como los dolores de parto antes del nacimiento, hay una crisis –quiebra-. Entonces la clipá se quebró, cuando estuvimos en el exilio como una preñez, donde la mujer siente que algo se rompe y entonces se produce el alumbramiento, nace el hijo y sale a la luz del mundo.

Así era entonces, resaltemos nuevamente esta imagen, y también hoy justamente en este contexto. Por un lado el reino es el reino, le corresponde cierto honor, pero en el momento más crítico, en especial cuando este reinado hace enojar intencionadamente, tiene que ser también “y salió de lo del faraón con ira”, con una bofetada.

Uno de los grandes jasidim de nombre Shmuel, dijo ¿qué es en realidad esta bofetada? Moshé Rabeinu no hace nada sin motivo y tampoco se enoja sin motivo. Sobre Moshé está escrito que salió del faraón enojado. Pero él no se enoja, ni hace nada porque sí. Dice que el beneficio aquí fue separar definitivamente al faraón de su afinidad por el pueblo de Israel. Cuando un judío puede venir y darle una bofetada al rey sin temor, sin avergonzarse, dado que Hashem le había dicho a Moshé que sea como “Elokim para el faraón”, sea ministro y juez, de esta manera separa toda afinidad y conexión entre el faraón y el pueblo de Israel. Es como que culminó la separación.

Y así que sea también para nosotros, todo con amabilidad, como dice el Rebe, que también las cosas más duras paradójicamente, tienen que transmitirse de manera que puedan ser recibidas y con amabilidad, también si es una bofetada. Que Hashem nos ayude para que el bien se separe completamente de las cáscaras impuras, del mal. El objetivo final es la Entrega de la Torá, que es la luz para todo el mundo, porque después que el bien se separa del mal vuelve y lo ilumina, dulcificando al mal. Que así sea con nosotros en la redención verdadera y completa por medio del Mashíaj nuestro redentor ya mismo efectivamente.

PARASHÁ VAERÁ

LAS DIEZ EXPRESIONES DE LA REDENCIÓN

RAV GINSBURGH

https://www.youtube.com/watch?v=tGPjXmsmK4M

Al principio de nuestra parashá están escritas 4 expresiones de la redención: “Y saqué, y salvé, y redimí y tomé”. Está escrito en el Talmud Ierushalmi que por las cuatro expresiones de redención bebemos cuatro copas de vino en la noche del Seder de Pesaj. Por copa por una expresión degueulá vehotzeti vehitzalti vegaalti velakajti .

Hay una quinta expresión: veheveti , y “traje”. ¿Qué hay de especial, que une a estas cuatro expresiones? Que después de cada una de ellas está escrita la misma palabra: etjem , “a ustedes” (“los saqué a ustedes”, etc.)

Además hay dos expresiones similares más que continúan a las anteriores, pero en vez de etjem , “a ustedes”, dice lajem, “para ustedes”: “Y los saqué a ustedes… y seré para ustedes Elokim” y “y los traje a ustedes [a la Tierra de Israel]… y se la di para ustedes”. En todas las expresiones el verbo termina en tav iud , … ti: vehotzeti vehitzalti vegaalti velakajti .

Al comienzo de nuestra parashá están escritas 4 expresiones de redención. Cuando Hashem nos asegura sacarnos de Egipto, dice “Y los saqué a ustedes de bajo la opresión de Egipto”, luego “y los salvé a ustedes”, luego “y los redimí a ustedes” y luego “y los saqué a ustedes”. Ve otzeti etjem, ve hitzalti etjem, vegaalti etjem, ve lacajti etjem ”. Todas dicen etjem . Las primeras tres están en un verso y la cuarta en otro. Luego hay otro verso donde dice veheveti etjem , “y los traje a ustedes”. En cada una de las expresiones está escrito etjem , a ustedes. En todas “se repite el mismo estilo ו…תי אתכם , ve…ti etjem . Por eso están en verdad aquellos que dicen que quizás hay que beber 5 copas en la noche del seder, porque en el Talmud Ierushalmi está escrito que cada una de las 4 copas es por cada una de las expresiones de redención. El Maharal de Praga y otros hablan acerca de la quinta copa por “y los traje a ustedes”.

Si leemos los versos veremos que hay otras dos expresiones, pero en vez deetjem , está escrito lajem , “para ustedes”: “los tomé a ustedes por pueblo… y seré para ustedes Dios”. Esto es una pareja que va junta: Yo los tomo para que sean mi pueblo y Yo seré vuestro Dios. En el verso siguiente también hay una pareja: “Y los traje a ustedes a la Tierra de Israel… y se las di para ustedes“. Entonces si meditamos, vemos que no hay sólo 4 expresiones de redención, y en realidad tampoco 5, sino 7.

Si meditamos en los versículos anteriores a estos que comienzan con: “Por eso dile a los hijos de Israel… y los saqué de bajo… etc.” Veremos que también hay otras 3 expresiones sin ו vav al principio pero todas con תי , tav iud al final, es decir que Hashem habla de sí mismo. Uno es el segundo verso de la parashá, que comienza con Vaerá , “y se mostró”, que le da nombre a la parashá, y finaliza con “…y por mi Nombre Havaiáh no me di a conocer [ nodati ] a ellos”. Entonces tenemos nodati . Luego está escrito “y también cumplí [ hakimoti ] mi pacto darles a ellos. Y al final dice “y también escuché [ shamati ] sus lamentos”.

Entonces tenemos aquí una estructura muy especial de división entre 3 y 7, que es también como las plagas que también están divididas en 7 en esta parashá Vaerá y 3 en la siguiente Bo . Y aquí esas expresiones que terminan todas en תי ,

Al principio hay 3 expresiones que se relacionan a los patriarcas del mundo y a los hijos, todo como trasfondo. Allí todo está escrito sin el prefijo ו , vav , “y”: nodati, hekamti, shamati . Luego está escrito lajen , “a ustedes”, לכן , cuya guematria está dividida en 3 y 7 en “número reducido”. Luego está escrito 5 veces “ ve…ti lejem ” y dos veces “ ve… ti lajem ”. Una división muy hermosa de 10 en 3 y 7, correspondiente a las 10 sefirot .

Haremos en resumen un paralelo con las sefirot :

En muy pocas palabras, se puede hacer un paralelo con las 10 Sefirot : “nodati ” [me hice conocer] y no “ hodati ” [“hice conocer”], esta es la raíz deDaát en Kéter Supremo. “Haquimoti ” [“establecí”] va con jojmá , porque está dicho de los padres del mundo que se levantarán y verán, y la resurrección de los muertos está en jojmá, “La sabiduría vivirá”, “morirán y no en sabiduría”.

En las dos últimas de las tres expresiones está escrito “ vegam ” [y también] ( jojmá biná , “dos compañeros que no se separan nunca”) pero en el tercero “ vegam Aní shamati ” [Y Yo también he oído] “ Aní ”, Yo, se refiere a biná , ( “el origen de los recipientes) , y también “ shamati ” [“he oído”], que en Cabalá siempre se refiere a la madre. Aní es una referencia a biná (“padre es ain , y madre hay”), esta es una hermosa división de las 3.

Ahora vamos a explicarlo de una manera completamente diferente. Siempre se explican las expresiones de redención según el modelo del nombreHavaiá , las 4 letras del Nombre de Dios, pero aquí hay 7 expresiones y tenemos que ir directamente de acuerdo a las Sefirot .

Así: “ V ehotzeti-vehitzalti ” , corresponden a jesed y guevurá.

Respecto a “ Vegaalti ”, está escrito que la redención es la revelación deIesod Ima , [“fundamento de la madre superior”] en Tiferet de Zeir Anpin.

“ Vehotzeti ”: la salida de Egipto es esencialmente la Bondad de Hashem, pero que Él nos salva, Hitzalti, significa también separación, l a salvación es separación, g uevurá.

Que Hashem nos redima, “ Vegaalti ”, es la revelación del fundamento deIma en Tiféret de Zeir Anpin.

Ahora hablo con términos de Cabalá para abreviar un poco.

Luego, dijimos que hay dos van juntas “ Velakajti” y “ Vehaiti”: “ Velakajti etjem li leam, vehaiti lajem leElokim ”, “Y los tomé para Mi como Pueblo y Fui para ustedes Elokim ”. Esto hace alusión N etzaj Hod.

Al final hay otra pareja que es “ Veheveti…Venatati ”, “Y traje… Y di. “Traer”, ביאה biá , es generalmente Iesod en Cabaláh, y que Hashem al final dice “Y les dí [la Tierra de Israel] como herencia, Yo soy Havaiá”, como finaliza el verso y la parashá, es la entrega definitiva de la Tierra al Pueblo de Israel para siempre por todas las generaciones, esto es “reinado” Maljut .

No expliqué demasiado, sólo hemos puesto algunas señales en el camino para abreviar y es correcto que cada cual medite en este fenómeno tan bello. Hay aquí realmente 10 expresiones divididas en 3 y 7. Que seamos meritorios de las 10 expresiones de la redención. Si no son suficientes para nosotros 4 expresiones, que haya 5, 7, 10 [¡en total 26!]. Que haya mucha redención para el pueblo de Israel. Que todo poder del alma sea redimido. Hay que redimir a todos los poderes del Alma, que todo sea Sagrado para Havaiá.

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SUMISIÓN, SEPARACIÓN, DULCIFICACIÓN

La revelación de Su Nombre poderoso

https://youtu.be/B3ssL6-k-hI

En la parashá de esta semana tenemos el comienzo de las primeras siete de las diez plagas. El concepto 10 es muy, muy importante en la Torá. Incluso estudiamos que “todos los décimos son sagrados”. Cuando decimos que hay 10 cosas ¿a qué nos referimos normalmente en el contexto de la Torá? Cuando una persona medita, identifica a 10 con los Diez Mandamientos, que es el 10 más importante en la Torá.

Los Diez Mandamientos fueron entregados a Israel en el momento culminante del éxodo de Egipto. Eso será en tres semanas más, en la parashá Itró cuando fueron dados a Israel los Diez Mandamientos. Muchas personas se identificarán, en el contexto del 10 de la Torá con las 10 Aserciones de la Creación. Cuando Dios creó el mundo dijo: “que haya luz, que haya un firmamento, y todo lo demás que son las diez aserciones de la creación. En realidad, la primera según los sabios está implícita, no explícita, porque en la primera palabra Bereshit , no está explícitamente dicho “Y dijo Dios”, pero esa palabra “en el principio creó Dios los cielos y la tierra”, es también una aserción implícita que después es seguida por otras nueve aserciones explícitas que dicen: “Y dijo Dios… esto y esto”.

Entonces, el mundo fue creado a través de Diez Aserciones, como tenemos en el Pirkei Avot, Las Enseñanzas de Nuestros Padres, la Torá nos ha dado Diez Mandamientos. Y ahora tenemos que tener en cuenta algo muy importante que todo el mundo conoce, pero no es entendido reconocidamente que el relato de las Diez Plagas es en realidad intermediario. Siempre que tenemos dos conjuntos o conceptos extremos, debemos tener algo que los conecte. Entonces de alguna forma muy misteriosa las diez plagas en Egipto, que fueron la preparación y lo que en realidad nos capacitó para salir de Egipto, tal como lo dice la Torá y los sabios dicen que en cada plaga había naguf verafunagolpeemos y curemos, naguf a Mitzraim y rafona a Israel, con cada plaga que golpeó a los egipcios. Dios curó la enfermedad del alma del pueblo de Israel, y lo dejó preparado para dejar la mentalidad de esclavos y volverse un pueblo judío independiente y liberado.
Entonces, decíamos que las diez plagas, de alguna manera muy profunda son intermediarias entre las Diez Aserciones de la Creación y los Diez Mandamientos en la entrega de la Torá.

¿Cómo entendemos esto? Con las Diez Aserciones de la Creación Dios está creando la naturaleza. El Baal Shem Tov nos enseñó que meditar, contemplar las maravillas de la naturaleza, uno de los propósitos es que nosotros mismos somos almas, y que somos seres humanos, y que estamos muy alto en la escala de los distintos reinos de la creación: el reino mineral, el reino vegetal, reino animal y los seres humanos. Pero a través de meditar acerca de las maravillas en la creación del mundo, se supone que debemos alcanzar un estado de calidad existencial de la que el Baal Shem Tov decía: “yo”, ser humano y la hormiga o la planta, o todo lo que llega a existir en la creación, todos estamos exactamente en el mismo nivel, todos fuimos creados por Dios con un propósito, el propósito universal de servir a Dios. Cada uno, cada parte de la creación sirve a Dios basados con su mejor capacidad, y en cierta manera como somos seres humanos que tenemos libre albedrío, podemos ser peores que las hormigas o las plantas o la roca, porque ellos nunca van en contra de la voluntad del Creador. Pero nosotros tenemos la libre elección de ir en contra de la voluntad del Creador.

Entonces nuevamente, el servicio de meditar acerca de las 10 Aserciones de la Creación es alcanzar un estado de humildad, que en hebreo es llamado hajnaá, “sumisión” al Creador. Porque a pesar de que en realidad hay muchas cosas que fueron creadas, pero hay un común denominador, todos fueron creados lijvodó, en Su honor, para glorificar u honrar al Creador. En ese sentido somos todos iguales, incluso está dicho por los sabios que el hombre fue creado último, y en cierto sentido es el nivel más inferior de la creación, porque la causa es creada para lo que viene después, y la causa siempre es más elevada que lo que causó. Y como lo que fueron creadas primero son la causa de lo que fue creado después, y la causa siempre es más elevada que aquello que causó.

Entonces, algunas veces decimos que los seis días de la creación son como una escalera ascendente de formas orgánicas o incluso inorgánicas. Pero en cierto sentido también es un orden descendente.

¿Qué sucede con los 10 Mandamientos cuando vamos hacia el extremo superior? Los 10 Mandamientos son la absoluta revelación de Dios en el contexto de esta creación. Los 10 Mandamientos comienzan con la palabra “anojí”, “yo”: “Yo soy Dios, tu Dios, Quien te sacó de la tierra de Egipto, tierra de esclavitud…”. Todo es una revelación de “Anoji”, que los sabios leen “Anoji mishe Anoji”, “Yo soy el que soy”, la esencia de Dios. Los mandamientos nos fueron entregados para cumplirlos, para hacer, pero son una revelación Divina. Cuando la Torá fue entregada a Israel los Cielos fueron abiertos y Dios mismo se reveló. Obviamente no es la revelación de las diez plagas, y ciertamente tampoco la revelación de las diez Aserciones de la Creación.

¿Qué hacen estas diez plagas en el medio? Las diez plagas vienen a crear una separaciónhavdala. Dijimos al meditar sobre los secretos de la creación, que en cierto sentido todo en el mundo es igual, todo está a un mismo nivel. Las diez plagas, es la primera vez en la historia que Dios muestra al mundo que existe una distinción entre las almas. Que es correcto tomar las almas egipcias que en cierto sentido son una expresión de lo negativo en el mundo, y golpear esa negatividad con el fin de curar el alma Divina positiva Israel, para crear la entidad judía. Eso en Cabalá es llamado havdalá, “separación”, que sigue a la “sumisión”. La absoluta revelación de Dios es llamada hamtaká, “dulcificación”. El Baal Shem Tov, el fundador del Jasidut dice que todo proceso espiritual verdadero, debe pasar a través de tres fases: la primera es sumisión, la segunda es separación y la tercera es la dulcificación. En hebreo hajnaá-sumisión, havdalá-separación, hamtaká- dulcificación. La separación siempre es una fase intermedia entre la fase de sumisión y la fase de dulcificación. Cuando Dios se revela toda la realidad se vuelve dulce. Una vez más, aquí se explica que todos somos como pequeñas hormigas para Dios, no existe diferencia alguna entre las criaturas, todas tienen el mismo Creador, y nuestro propósito es cumplir Su voluntad de igual manera. Pero el hecho de que hay separación entre las almas, es una novedad, es algo nuevo, pero es una novedad necesaria con el fin de alcanzar automáticamente la dulcificación de los Diez Mandamientos, la entrega de la Torá a Israel.

Así, en la forma en que son comprendidos los tres 10: las diez Aserciones de la creación, las diez plagas y finalmente los diez Mandamientos, es uno de los modelos más importantes en toda la Torá, el proceso que el Baal Shem Tov llamó: Sumisión, Separación y Dulcificación.

LA SUBLIMACIÓN DEL ALMA

https://youtu.be/1XvEoDvUzcI

Al comienzo de la parashá de esta semana, Parashat Vaerá, Hashem le dice a Moshé Rabeinu que “Yo prometo a los patriarcas, Abraham, Itzjak y Iaacov, redimir a los hijos, los Hijos de Israel. Y todavía no cumplí Mi palabra, Mi promesa. Y Dios lo expresó de una manera que Mi Nombre, Mi Nombre esencial, Havaiá, iud-hei-vav-hei, י-הוה , de 4 letras, el Tetragramatrón, “no me fui dado a conocer a ellos”. No me di a conocer a Mi mismo, a ellos, a los patriarcas.

¿Cómo me di a conocer a los patriarcas? Con otros dos nombres: el Nombre א-ל , Kel, que es también un Nombre de Dios, y el Nombre שד-י , Shakai. El Nombre Shakai se traduce generalmente como “el Todopoderoso”. Kel es simplemente Dios, formando entonces “Dios Todopoderoso”. Con esta combinación de dos Nombres, Kel Shakai, fui conocido por los Patriarcas, pero no me di a conocer a ellos con mi Nombre más esencial, Havaiá.

Los comentaristas preguntan, que en muchos versos diferentes encontramos que en verdad el Nombre Havaiá sí fue revelado a los Patriarcas. ¿Entonces por qué está dicho que no Me hice conocer [por este Nombre]? Está explicado en Jasidut que hay dos niveles del Nombre Havaiá. Hay un nivel superior que no se dio a conocer, que no fue revelado a los Patriarcas, y hay un nivel inferior que fue revelado a los Patriarcas. Entonces, tenemos en realidad 4 niveles diferentes de esos Nombres de Dios. Cada nivel es un nivel de revelación. Hashem es Uno, absolutamente y únicamente Uno. Pero la revelación de Divinidad, Su luz, se revela en diferentes dimensiones, en diferentes niveles.

Entonces hay un nivel absoluto, el más alto y supremo de revelación del Shem Havaiá[el Nombre, Havaiá], el nivel que va a ser revelado ahora a Moshé y el pueblo judío en el Éxodo, y nunca antes había sido revelado. Hay un segundo nivel, que también es elShem Havaiá, nivel que fue revelado a los Patriarcas, pero como explica Rashi no fue revelado en el contexto de Su promesa a los patriarcas de que Hashem redimirá a los hijos. El Nombre utilizado en el contexto de esta promesa siempre fue la combinación de los dos Nombres Dios Todopoderoso, Kel Shakai.

Obviamente, estos dos Nombres son también dos niveles diferentes, a pesar de que van juntos. Entonces tenemos que tratar de entender los 4 niveles: Havaiá, que es el Nombre de 4 letras, El Havaiá superior, y el Havaia inferior, que es el segundo Havaiá, y el Nombre Kel y el Nombre Shakai. Entonces comencemos ahora desde abajo.

El Nombre Shakai que se traduce usualmente como “Todopoderoso”, interpretan los sabios que significa que Hashem dijo a su mundo “¡suficiente!”, basta. Este Nombre es un acrónimo, tiene sólo 3 letras: shin (ש ) dalet (ד ) iud (י ). La shin es la inicial de “Él dijo”, “Dios dijo”. Y las otras dos letras forman la pequeña palabra de 2 letras dai, que significa “¡suficiente!”. Entonces, el Nombre completo es interpretado como “Él [el Creador] al crear el Mundo, dijo a Su mundo “¡Suficiente!”. O sea que el mundo no se tenía que expandir infinitamente. Tenía que haber limitaciones y fronteras para todas las diferentes facetas y aspectos de la creación. Vivimos en un mundo limitado y esa es la manera en que Dios quiere que estemos aquí en lo finito. Nosotros somos finitos y todo lo que tiene que ver con nuestra experiencia es limitado y el hecho de que el mundo es limitado y no se expande, tanto psicológica o físicamente, no se expande infinitamente, esto está determinado y controlado por el Nombre Shakai, el Todopoderoso.
El Nombre que lo acompaña, Kel, se refiere en realidad a extensión o expansión. Porque las mismas dos letras אל , alef lamed, Kel, que aquí se traducen como “Dios”, también puede leerse como “el” (אל ). “El” es literalmente la simple palabra “hacia”, “a”, que es en un sentido vectorial. Hay algo que se está moviendo en cierta dirección, “el”, “hacia”. Y realmente está diciendo que nuestro universo físico de 3 dimensiones espaciales, llamado “makóm” (מקום ), “espacio”, y equivale a 6 veces el valor de este Nombre, porque hay 6 extremos, 6 direcciones. Están las 4 direcciones laterales, arriba y abajo. Y 6 veces este Nombre Kel es igual a makom, que es el espacio físico de 3 dimensiones.

Nuevamente, los dos Nombres van juntos porque Kel es una fuerza expansiva, la expansión de Dios, su revelación, su manifestación se está expandiendo en las 6 direcciones, y Shakai, Todopoderoso, es una fuerza limitante. Hay una expansión, pero a la vez hay una limitación que le pone fronteras. Este es el significado de la yuxtaposición de estos dos Nombres, Kel Shakai. Juntos vienen a describir la Divinidad dentro de la naturaleza, el orden natural de cómo Dios creó y continúa recreando la naturaleza. El Nombre Havaiá inferior ya es algo sobrenatural, por encima de la naturaleza. O sea que Dios, obviamente por su libre albedrío, produce milagros que aparentan, parecen negar la naturaleza.

¿Qué puede haber más que sobrenatural? Hemos dicho que el Nombre Havaiá es lo sobrenatural, y la combinación de los dos Nombres Kel Shakai, Dios Todopoderoso, representan la fuerza de expansión y la fuerza limitante de la naturaleza, ambos naturales ¿Qué puede ser aquel Shem Havaía, el Nombre Supremo, que va a ser revelado en el Éxodo de Egipto? La forma en que está explicado en Cabalá y Jasidut es que la verdadera Esencia de Dios siempre es paradójica. No se puede decir acerca de ella que sea de una manera ni tampoco lo opuesto.

Justamente esta noche es el comienzo del Iortzait [20 de tevet, aniversario del fallecimiento] del Rambam. El Rambam, el más grande de los filósofos, de los sabios, de la filosofía judía, explicó que no se puede afirmar ningún atributo positivo de Dios en absoluto. Incluso si decimos que Dios es sobrenatural no estamos describiendo a Dios. ¿Qué es el Nombre Havaiá absoluto, llamado Shem HaEktzem, el Nombre Esencial? Que Dios no es trascendente ni inmanente. Sobrenatural significa trascendente, y natural, la forma en que Dios aparece dentro de la naturaliza es trascendencia. Pero Dios es simultáneamente trascendente e inmanente, es la Esencia misma. No es natural ni sobrenatural, es las dos cosas a la vez y/o ninguna de ellas. Y desde ese nivel, eso es la Verdad Absoluta. En hebreo, verdad es emet, אמת . Dice Rashi que este Nombre Havaiáque va a ser revelado ahora en el Éxodo, es el atributo absoluto de Dios, la “Verdad”. En el sentido simple de que ahora va cumplir, será fiel a Su Palabra, He prometido y voy a cumplir lo que prometí. La promesa de redimir al Pueblo de Israel, ahora la voy a cumplir. Por eso, Su Verdad es la paradoja de ser sobrenatural y natural simultáneamente.

Tenemos 4 niveles: el Nombre Havaiá deleEila, de lo Alto, el supremo Nombre Havaiáque es una referencia a la misma Esencia de Dios. Luego tenemos su revelación sobrenatural trascendental que también es el Nombre Havaiá. Luego tenemos Su fuerza expansiva y su fuerza limitante, que es Kel Shakai. Y cuando Hashem hace Su promesa a los patriarcas utilizó este Nombre Kel Shakai. Pero durante otros sucesos, especialmente cuando realizó milagros para los patriarcas, porque ellos también presenciaron grandes milagros de Dios, hashgajá pratit, su Providencia Divina en sus vidas, ellos fueron meritorios de la manifestación del Nombre Havaiá delatata, “de lo bajo”, el nivel inferior del Nombre Havaiá que es el sentido de lo sobrenatural. Pero la máxima verdad y la absoluta Verdad de Dios, del Nombre de Dios, es lo que se va a revelar ahora en el Éxodo.

Concluiremos esta introducción con una guematria muy bella [un fenómeno numérico]. Comencemos una vez más desde el final. El Nombre final, que es el Nombre que dice al mundo “¡basta!”, el Nombre que establece límites, todos los aspectos de la realidad,Shakai, שד-י , su valor numérico es 314. Como el significado que la dieron los sabios a este nombre es que las cosas se expanden, progresan hasta un cierto punto, y allí se detienen, les dice parar, suficiente, “dai”. ¿Qué sugiere esto matemáticamente? Sugiere una serie o sumatoria que en matemática es llamada el número triangular, que es la suma de todos los números desde el 1. Comienzo desde el 1, luego paso al 2, luego al 3 y al 4, etc. y cuando llego a 314, ¡basta! hasta aquí. Eso es lo que sugiere la interpretación de los sabios en referencia al cálculo de este número. No simplemente tomar la guematria simple del Nombre que es 314, pero como el mundo se va expandiendo, expandiendo, expandiendo, hasta que se detiene, entonces comienzo por 1, le agrego 2, luego 3 y 4 etc. hasta 314. ¿A qué número llego? Debe ser un número muy grande, todos desde 1 hasta 314. Y en verdad es grande: 49.455.

¿Cómo puedo calcular esto de forma simple? La forma simple de calcular cuál es el triángulo de todo número n, entonces digo que el triángulo de n es igual a n veces n más 1 dividido 2, ρn = n (n α 1) / 2, esa es la fórmula. Entonces, en nuestro caso 314 veces 315 dividido por 2, que resulta 49455. Es la sumatoria de todos los números desde 1 hasta 314, שדי , Shakai.

¿Qué significa este número? Es muy grande, pero ¿qué significa? Un número se puede factorizar o descomponer de muchas formas diferentes, pero la básica factorización de este número es por 45. Este es un número muy especial en Cabalá, porque es el relleno del Nombre de Dios, iud-hei-vav-hei. Entonces, al observar el Nombre Shakai, “El Todopoderoso”, de acuerdo con este cálculo es 45 x 1099. Porque, nuevamente. ¿Cómo he llegado a esto que dijimos? Decir 314 veces 315 sobre 2 es lo mismo que decir 314 sobre 2, que es 157, por 315. A su vez, 315 es 7 veces 45, מה , ma, donde 45 puede ser מה ,, que significa “qué”, sentido de la nada, la anulación, o puede ser אדם , adam, “hombre”, que también suma 45. Entonces 315 es 7 veces 45, entonces tomo este 7 y multiplico 7 por 157, que es 314 sobre 2, obtengo el número 1099.
¿Qué significa este número? Hay una frase que se repite 5 veces en dos salmos, dos cantares sucesivos: “Barji Nafshi et Hashem”, “Que mi alma bendiga a Dios”, y los sabios nos enseñan que esto se repite 5 veces porque el rey David escribió estos cantares experimentando 5 mundos diferentes, pasó por 5 experiencias diferentes. Y en cada mundo por el que pasaba y del cual salía, bendecía a Hashem.

Se explica en Cabalá que este número significa los 5 niveles del alma misma. El alma tiene 5 niveles, llamados el nivel “vital”, el espíritu, el aliento de vida, el viviente y único,nefesh, ruaj, neshamá, jaiá y iejidá, son los términos en Cabalá. Cuando los 5 niveles se juntan, suman 1099, y todos ellos los posee el hombre, adam, אדם , 45. Entonces ¿qué nos dice este número 49.455, que es el triángulo de 314, El Todopoderoso, Shakai? Nos dice: el hombre multiplicado por los 5 niveles de su alma. Este es el Nombre Shakai.

¿Qué hay en los otros Nombres? Kel, א-ל , Dios, que es el nivel expansivo. Diremos un concepto muy importante. Hay ciertos filósofos, como el que mencionamos Maimónides, ciertamente el más grande filósofo judío del medioevo, y uno de los más grandes pensadores judíos de todas las épocas. Hay ciertos filósofos que explican que el universo es algo integral, no sólo el universo físico, sino el universo espiritual junto con el físico. Sin entrar en la división cabalística de los muchos mundos, sólo tomemos toda la realidad, toda la realidad creada, tiene dos dimensiones. Una dimensión es “pensamiento” y la otra es “extensión”, estos son los nombres que se utilizan en la terminología español. Hay conciencia, como se estudia en la física moderna, en la Mecánica Cuántica. Así, la conciencia es un factor definitivo de la realidad.

Entonces todo esto es filosofía, el mundo que conocemos es una combinación, una unificación de pensamiento -el Pensamiento Divino- y extensión. Extensión puede ser tanto espacio como tiempo. Nuevamente, como declara la teoría de la Relatividad, el espacio y el tiempo son en realidad una misma entidad.

El pensamiento del mundo es la dimensión trascendental del mundo, es Nombre Havaiá inferior. La extensión del Mundo es el Nombre Kel, א-ל , la primera de las yuxtaposiciones de los dos Nombres Kel Shakai que dijimos antes. Cuando tomo Kel, la guematria simple es 31, pero el triángulo de 31, todos los números desde 1 hasta 31 es 496, que suma מלכות , Maljut, “reinado”.

Entonces hay algo acerca de este Nombre Kelque define el Reino de Dios, que es la máxima expansión y extensión del dominio de Dios sobre toda Su creación.

El valor numérico del Nombre de HashemHavaiá, י-הוה , es 26, cuyo triángulo es 351. Y si tengo 2 veces 351, porque hay 2 Nombres Havaiá, obtengo un número muy muy importante en la Torá que es שבת , Shabat, 702, que es 2 veces 351.

Entonces ¿qué tenemos ahora? Tomamos los 4 niveles, todos los números que explicamos antes, y realizamos el mismo proceso matemático, examinando el triángulo de cada uno de ellos. Tenemos Havaiá Havaiá, y está explicado que el secreto delShabat es 2 veces Havaiá, en su forma triangular. 351 más otro 351 es 702, el valor numérico de Shabat. ¿Qué nos dice esto acerca de Shabat? Dice que el Shabat mismo tiene dos dimensiones: la noche del Shabat, que es el Nombre Havaiá inferior en su forma triangular, y el día de Shabat es el Nombre Havaiá superior.

Durante los días de semana experimentamos el Nombre Kel Shakai, que es la naturaleza y la inmanencia de Dios. El comienzo del Shabat es la experiencia de la trascendencia de Dios, Su expresión y manifestación sobrenatural, pero luego el día de Shabat es la paradójica Verdad Absoluta de Havaiá, que es sobrenatural y natural simultáneamente como explicamos antes.

Nuevamente, el Shabat primero es una elevación desde el orden natural hasta el orden sobrenatural, y luego durante el día de Shabat progresa desde lo sobrenatural hasta la Esencia Absoluta, que está por encima de lo sobrenatural. Dicen los sabios que después de observar 2 Shabatot, 2 días de Shabat, seremos redimidos inmediatamente. Está explicado en Jasidut que esto no se refiere a dos días diferentes, sino que dentro del mismo Shabat, los dos niveles de Havaiá el Nombre Esencial de Hashem que está presente en cada Shabat, significa primero alcanzar la experiencia de lo sobrenatural, y luego ir más allá de lo sobrenatural hacia la propia Esencia paradójica de Hashem. Eso es Shabat que sigue a los 6 días, que es Kel Shakai, Dios Todopoderoso, extensión y limitación.

Ahora hagamos el gran número total, que contiene estos 4 niveles en sus formas triangulares. 351 a 351 a 496 a 49.455 = 50.653 Si sumamos este número da 50.653. ¿Cuál es ese número? Todos nuestros esfuerzos son para llegar a alcanzar este número, este número muy espectacular. La pregunta es qué tiene de tan espectacular este número, 50.653.
Antes dijimos que el nombre Shakai en esta forma es “el hombre en sus cinco niveles del alma”. ¿Pero cuál es el nivel más elevado de esta alma? Este nivel más elevado del alma se llama יחידה , iejidá, “Singular”, ese es el nivel que corresponde con el Nombre esencial de Dios, Su Verdad absoluta, por encima de lo sobrenatural y lo natural. ¿Cómo se expresa en el servicio a Dios? A través del total autosacrificio, bitul total, anulación del ser. Una fe absoluta, la fe que significa el pacto de la conexión con la mismísima Esencia de Dios.

Esto se llama Iejidá shebanefesh, el nivel de “singular del alma”. Así como Dios es singular, también nosotros poseemos ese nivel superior del alma que es nuestra conexión con esa “Singularidad”. Es nuestro punto singular, por así decirlo, en nuestras almas. ¿Cuánto suma ese nivel superior? Suma 37.

Arribamos a ese número grande, 50.653. Si dividimos ese número por 37, veremos que es un múltiplo de 37, es 37 veces 1.369. Muchas personas ya habrán reconocido este número, 1369 es el cuadrado de 37, 37 veces 37. ¿Entonces qué es ahora este gran número 50.653? Es el cubo de 37. Todos estos números triangulares dan un número realmente espectacular que es 37 veces 37 veces 37. O sea que la iejidá del alma por sí misma por sí misma. Es una doble interinclusión de los 37 poderes, por decirlo así, incorporados, incluidos dentro de esta palabra יחידה , iejidá, “singular” del alma.

Todos estos niveles se tienen que revelar en el Éxodo, tal como comienza la Parashá. “Me revelé a los patriarcas” con los dos Nombres inferiores. Esto no significa que haré desaparecer estos nombres, ambos están presentes. Pero sobre esos Nombres, el nivel de Havaia que está implícito pero no explícito en el texto, e incluso ese nivel todavía más elevado de Havaiá que está explícito en el texto. Y como este nivel inferior alude a este proceso matemático llamado “el triángulo de un número”, al aplicarlo en los 4 niveles y realizar este gran cálculo, se transforma en este número tan bello que es el cubo de 37.

Esta última parte es para aquellos que como nosotros amamos a los números, como los sofrim, que aman contar los números, especialmente porque los números son parte de la Torá, y nos pueden enseñar algo. Entonces que ameritemos la revelación de nuestra Iejidá, nuestro “Singular”, que está conectado con la Singularidad Esencial de Dios, y al elevarla al cubo, en tres repliegues, “con tres repeticiones quedará firme”, cuando algo se repite 3 veces es fuerte y eterno. Y con esto mereceremos el éxodo final, la redención final en nuestra época, con la llegada del Mashíaj Tzidkeinu, nuestro Justo Redentor.

VIDEOS GAL EINAI

Año 5783

Las Plagas No Son Castigo

Y habló Dios a Moshe, y le dijo: Yo soy Havaiá

Lectura de la Torá Vaeira: Las Plagas No Son Castigo Y habló Dios a Mosh, y le dijo: Yo soy Havaiá

https://youtu.be/nuzDgO97eA0

Plaga Y Curación

“וידבר אלקים אל משה ויאמר אליו אני הוי‘”

“Y habló Dios a Moshé, y le dijo: Yo soy Havaiá”.

“Vaidaber”, “Y habló” es una posición y lenguaje de liderazgo (como “Y le hablaremos a pueblos bajo nuestro mando”). “Elokim” es el atributo justicia y poder, firmeza y coraje. Dios le da a Moshé la fuerza y el coraje para hacer justicia con el faraón rey de Egipto. El nombre de la parashá es Vaierá = Itzjak, וארא = יצחק, un indicio del poder del atributo de din, rigor y poder de Itzjak.

“Y le dijo: Yo soy Havaiá”, este nombre corresponde al atributo de la misericordia para sacar a Israel de Egipto. Encontramos que el versículo incluye “una plaga para Egipto y una curación para Israel”. La medicina está escrita explícitamente después de la separación del Mar Rojo, el final del éxodo milagroso de Egipto, “אני הוי’ רֹפאך” , “Ani Havaia Rofeja”, “Yo soy Dios, Tu sanador”, la perfección completa de la revelación de “Yo soy Havaiá” en nuestro verso.

[Shaashuim Iom Iom, Diversiones cada día]

Año 5781 y anteriores

LA REVELACIÓN DE HAVAIÁ

PARASHÁ VAERÁ 5780

Lectura de la Torá y Meditación

en vivo desde Rejovot, Israel

https://youtu.be/r-F4qhRwt6c

Éxodo Capítulo 6:2

Dios le habló a Moshé y le dijo: “Yo soy el Señor.

ב וַיְדַבֵּ֥ר אֱלֹהִ֖ים אֶל־משֶׁ֑ה וַיֹּ֥אמֶר אֵלָ֖יו אֲנִ֥י יְהֹוָֽה

3 Me revelé ante Avraham, Itzjak y Iaakov como Dios Todopoderoso (El Shadai),

y no les permití que Me conocieran por Mi nombre el Señor.

ג וָֽאֵרָ֗א אֶל־אַבְרָהָ֛ם אֶל־יִצְחָ֥ק וְאֶל־יַֽעֲקֹ֖ב בְּאֵ֣ל שַׁדָּ֑י וּשְׁמִ֣י יְהֹוָ֔ה לֹ֥א נוֹדַ֖עְתִּי לָהֶֽם

VAERA 5779

¿Por qué hiciste mal a este pueblo?

¿Por qué me has enviado?

https://youtu.be/XLxAqiXvF00

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/371

Vivir con Jasidut 5777

Cursos: Vivir con Jasidut 14 Parashá Vaerá-Bo 770501

https://youtu.be/Hn_ZZcsIdaM

VIVIR CON JASIDUT

5778

Hablemos de Profecía

http://www.youtube.com/watch?v=9TsbAFC5VZc

ZOHAR

https://youtu.be/Fkkb5USfzxs

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/372

Parashá Vaerá – Y Se Reveló

5772

LAS MATEMÁTICAS DIVINAS Y LA GEOMETRÍA

Parashá Vaerá - Y Se Reveló -  Las Matemáticas Divinas y la Geometría

https://youtu.be/HR-SqFOfW0w

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/373

Parashá Vaerá – Y Se Reveló

5773

DESECHAR EL INTELECTO

Parashá Vaerá - Y Se Reveló - Desechar el Intelecto

https://youtu.be/SSSHZkLabOI

Parashá Vaerá – Y Se Reveló

5776

Dos Mil Años de Caos

Parashá Vaerá - Y Se Reveló - Dos Mil Años de Caos

https://youtu.be/eLd2e9BHGqs

TORAT HANEFESH 5777

https://www.youtube.com/watch?v=1hKzytcPgPY

  1. La primera mención de Miriam por su nombre es después de la división del Mar Rojo (Shemot 15:20).
  2. Sotá 11b
  3. Shulján Aruj, Oraj Jaim 1
  4. Tur, Oraj Jaim, 1 (interpretando Avot 5:20)
  5. Bereshit 14:13
  6. Bereshit Rabá 42:8.
  7. Bereshit Rabá 38:13
  8. Bereshit 39:12-18
  9. Shemot 1:21
  10. Maimónides, Hiljot Mamrim 6:3.
  11. Shemot Rabá 7:3; Maimónides
  12. Pirkei Avot 3:2
  13. Baba Kama 113b
  14. Maimónides, Hiljot Melajim 2:1
  15. Tania, Igueret Hakodesh, cap. 20
  16. Tania, cap. 2
  17. Nidá 31 bis.
  18. Levítico 19:3.
  19. Idem, Rashi allí
  20. Maimónides, Hiljot Mamrim 6:12
  21. Bamidbar Rabá 15:14.
  22. Shemot 6:11.
  23. Idem. 7:3.
  24. Shemot 11:8.
  25. Pirkei D’rabi Eliezer 42.
  26. Zevajim 102a.
  27. Shemot 11:8
  28. Baba Batra 3b.
  29. Maimónides, Hiljot Melajim 3:8. Ver Anulación del decreto del rey, en nuestro libro en hebreo, Maljut Israel, Parte 2.
  30. Idem. 1:9.
  31. Sanhedrín 49a.
  32. Baba Kama 56a.
  33. Maimónides, Hiljot Melajim 3:10.
  34. Reyes I 12:27-28.
  35. Maimónides, Hiljot Melajim 5:6.
  36. Sefer Haminhagim Tirna (Purim ); Leket Iosher (p. 116); Levush Oraj Jaim 685.
  37. Véase Birkei Iosef, Oraj Jaim 685:1.
  38. Isaías 57:17.
  39. Jeremías 3:22.
  40. Véase la raíz shin- vav -bet (שו”ב) en el Sefer Hashorashim del Radak, enumera tres principios, el tercero de los cuales es la rebelión.
  41. Avot 5:20.
  42. En hebreo, “hombro” (שֶׁכֶם, shjem), el asiento de la responsabilidad, tiene el mismo valor numérico que “rebeldes” (שׁוֹבָבִים). “Hombro” (שֶׁכֶם) es también el nombre de la ciudad de Shjem (שְׁכֶם) donde todos los judíos se hicieron en responsables unos de otros. Es también la ciudad donde está enterrado Iosef, alguien que se atrevió a rechazar los placeres mundanos por la santidad y también se hizo cargo de sus hermanos y condujo a todo un país a través de tiempos difíciles.
  43. תשע”ד – Año de “La Osadía Sagrada” (עַזוּת דִּקְדוּשָׁה, azut dekedushá)
  44. Éxodo 7:28
  45. Isaías 46:9, זִכְרוּ רִאשֹׁנוֹת מֵעוֹלָם כִּי אָנֹכִי אֵ־ל וְאֵין עוֹד אֱ־לֹהִים וְאֶפֶס כָּמוֹנִי
  46. Hosea 11:9, לֹא אֶעֱשֶׂה חֲרוֹן אַפִּי לֹא אָשׁוּב לְשַׁחֵת אֶפְרָיִם כִּי אֵ־ל אָנֹכִי וְלֹא אִישׁ בְּקִרְבְּךָ קָדוֹשׁ וְלֹא אָבוֹא בְּעִיר
  47. Ver http://www.dimensiones.org/canales/vidmodrn/matematicas/estructu1.htm
  48. I Reyes 14:21

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