KI TETZÉ

KI TETZÉ כִּי־תֵצֵא

Deuteronomio 21:10 – 25:19 Haftará: Isaias 54:1 -10

PARASHÁ KI TETZÉ

Meditaciones jasídicas 5

Año 5782 y anteriores 5

Procesos de “Correr y Regresar” 6

La inestabilidad de la primicia 7

Deconstruyendo el recipiente 8

Estabilidad a través de la Torá 9

De las gotas caóticas a la lluvia 11

Madre e hijo, causa y efecto 13

Una relación viva y dinámica 14

El Valor de la Vida 15

La Conexión con el Mashíaj 15

La Novedad Mesiánica 15

La Casa – La Torá Escrita 16

El Techo – La Torá Oral 16

El Cerco alrededor del Techo 16

Las Chispas Caídas 16

Cerca Matemática 16

Electrum 17

La Verja Eléctrica 17

¿Quién es el que cae? 18

Regresando a un estado virginal 20

VIDEOS 27

Videos Rabino Itzjak Guinsburgh 27

VIDEOS GAL EINAI 32

Año 5782 y anteriores 32

Una meditación y una bendición desde ierushalaim par aun año bueno y dulce 32

y una meditación sobre salir a la guerra sobre el enemigo que nos molesta, nos separa de Dios 33

El camino hacia la conciencia natural 36

Y EL SONIDO DEL SHOFAR EN ELUL 5780 37

Deuteronomio 38

¿Pero cuál es el problema? 39

¿Y cuál es la alternativa?…… 39

Cuando salgas a la guerra 39

Dedicado a Orna bat Aharón, de bendita memoria,  Ganei Iojanán, Israel 40

UNA CERCA EN EL TECHO DE TU CASA 41

La Verja .El Cerco alrededor del Techo 41

Las Chispas Caídas 41

Cerca Matemática 41

Lectura de la Torá 1 Cohen Ki Tetzé Ganei Iojanan Elul 5778 42

Lectura de la Torá 2 Leví – Ki Tetzé – Ganei Iojanan Elul 5778 43

Lectura de la Torá 3 Israel – Ki Tetzé – Ganei Iojanan Elul 5778 43

Refugio y Divorcio 44

Si la Cabalá que te enseñaron te llevó

a cumplir las mitzvot, estudiaste Cabalá.

Si todavía no, es porque estudiaste otra cosa,

cambia de maestro.

Si estudias “Cabalá” sabe que es la parte secreta de:

“La Torá que nos ordenó Moshé,

herencia de la Congregación de Iaacov.”

Meditaciones jasídicas

Año 5782 y anteriores

PARASHÁ DE LA SEMANA

KI TETZÉ

GUEMATRIAS BREVES

Las primeras palabras de la parashá Ki Tetzé son: “Cuando salgas a la guerra contra tus enemigos” (כִּי תֵצֵא לַמִּלְחָמָה עַל אֹיְבֶיךָ), cuyo valor es 1430, que es también el valor de “Todos” (הַכֹּל) veces “Havaia (הוי-ה), aludiendo al sentido de unificación con la unidad de Dios capturado en la literatura jasídica con la frase, “Todo es Havaiá, y Havaiá es todo” (הַכֹּל הוּא הוי-ה, הוי-ה הוּא הַכֹּל). Necesitamos abordar nuestra guerra con nuestros enemigos -con la inclinación al mal por dentro y por fuera- con la conciencia de que ellos también están sirviendo a la voluntad de Dios y están orando fervientemente para que tengamos éxito y los venzamos.

Parashat Ki Tetzé comienza con la mitzvá de la mujer hermosa capturada en la batalla (eshet iefat toar). Sus primeras palabras son: “Cuando salgáis a la guerra contra [sobre] vuestros enemigos”. La frase, “contra [sobre] tus enemigos” (עַל אֹיְבֶיךָ) es paralela a la frase en Salmos (27:6), “sobre mis enemigos” (עַל אֹיְבַי), que recitamos diariamente desde Rosh Jodesh Elul hasta Hoshaná Rabá, un salmo que habla explícitamente de la batalla que libramos y salimos victoriosos contra nuestra mala inclinación durante esta época del año. El valor de “sobre mis enemigos” (עַל אֹיְבַי) es 123, el valor de “guerra” (מִלְחָמָה). Podemos salir victoriosos en nuestra guerra contra la inclinación al mal cuando sentimos que estamos “por encima” de todos nuestros enemigos.

El valor de “guerra” (מִלְחָמָה) es 123, que también es el valor de “placer” (עֹנֶג) y “imperfección o mancha” (נֶגַע), siguiendo la expresión (Sefer Ietzirá 2:4), “no hay bien superior que el placer ni mal inferior que una lesión” (אֵין בְּטוֹבָה לְמַעְלָה מֵעֹנֶג וְאֵין בָּרָעָה לְמַטָּה מִנֶּגַע). Esto alude a la idea de que si el guerrero es capaz de sentirse superior y en control de su mala inclinación, incluso una eshet iefat toar puede ser una fuente de placer, pero si está abrumado por sentimientos de inferioridad, el esperado placer se convertirá en una mancha o herida para él.

El corazón del Salmo 27 que recitamos todos los días en esta época del año es: “Por Ti dice mi corazón: ‘Buscad Mi rostro’; Tu rostro, Havaiá, procuro”. (לְךָ אָמַר לִבִּי בַּקְּשׁוּ פָנָי אֶת פָּנֶיךָ י-הוה אֲבַקֵּשׁ). Este verso tiene 29 letras. Sus letras primera, media y final forman la palabra laish (לַיִשׁ), uno de los siete sinónimos de león en hebreo. También es un notrikón de “No-es” (לֹא יֵשׁ), el espacio mental que necesitamos ejercitar durante los Días de Temor. El león es símbolo de temor, como dice el profeta (Amós 3:8), “Ruge un león que no temerá” (אַרְיֵה שָׁאָג מִי לֹא יִירָא). Las iniciales de “león” (אַרְיֵה) representan los Días de Temor, “Elul, Rosh Hashaná, Iom Kipur, Hoshaná Rabá” (אֱלוּל רֹאשׁ הַשָּׁנָה יוֹם כִּפּוּר הוֹשַׁעְנָא רַבָּה).

PARASHÁ DE LA SEMANA

KI TETZÉ

COLOCANDO TODOS TUS HUEVOS (CAÓTICOS) EN UNA CESTA

Procesos de “Correr y Regresar”

La relación entre las dos porciones (parashot) de la Torá tituladas Ki Tetzé y Ki Tavó es como la relación entre lo masculino y lo femenino. Ki Tetzé significa “Cuando salgas…” e indica un estado de extroversión, un estado de orientación masculina. Ki Tavo significa “Cuando entras…” e indica un estado de introversión, un estado de orientación femenina. Los dos nombres, Ki Tetzé y Ki Tavo juntos, se refieren a un solo proceso, de salir (específicamente, a un estado de guerra), para volver a entrar. Procesos como este son en Cabalá y Jasidut llamados, “correr y regresar”.

Hay muchos procesos mundanos y espirituales en la vida que son de la naturaleza de “correr y regresar”. Uno de esos procesos es el que es inherente a nuestra vida semanal: cada seis días laborables de la semana van seguidos de un día de descanso, el Shabat. En Cabalá, correr sin retorno se considera caótico, es decir, su resultado no puede utilizarse ya que la energía que produce es ilimitada. Al incluir el Shabat como el séptimo día de la semana, el séptimo simbolizando el elemento femenino de la realidad en todas partes, el producto de nuestro trabajo en los seis días de la semana puede asimilarse adecuadamente y utilizarse de manera ordenada.

Un judío que ingresa a la Tierra de Israel después de una estadía en el extranjero (ya sea que la estadía sea de unos pocos días, semanas, meses, años o incluso siglos, como fue el caso de muchos de nuestros padres o abuelos en el siglo anterior) también es un proceso de “correr y regresar”. Esto fue así en el tiempo de Moisés y Josué y sigue siendo el mismo hoy. El alma judía (ya sea que el cuerpo sea masculino o femenino) se considera energía masculina, y la Tierra de Israel se considera la máxima manifestación de la sefirá de reinado, la revelación de lo femenino en la realidad.

En otro lugar, hemos visto que la esencia de la palabra hebrea para “ejército”, צבא, cuyas letras forman un acrónimo de las dos palabras: “salir” y “venir”, צֵא ובֹּא, es “correr y volver”. El ejército también se compone de dos elementos, el masculino, que sale a la guerra, y el femenino, que se queda atrás y “mantiene el cuartel”.

La inestabilidad de la primicia

La primera mitzvá que el Todopoderoso nos ordenó realizar al entrar a la Tierra de Israel es Bikurim: llevar los primeros productos de la tierra al Cohen en el Templo. El primer producto de la Tierra de Israel es hijo de la unificación de la energía masculina de conquistar la tierra (“Cuando salgáis a la guerra…”) y la energía femenina de entrar y poblar la tierra (“Cuando entréis a la tierra…”). Pero, a pesar de que ha ocurrido un proceso completo de “correr y volver”, se considera que las primicias aún son “inestables” y, por lo tanto, aún no pueden ser utilizadas por el agricultor. En cambio, se le ordena al agricultor traer las primicias de la tierra a Dios.

Hay muchos ejemplos de primicias (incluso de procesos completos de “correr y regresar”) que son “inestables”. El primer ejemplo es Reubén, el hijo primogénito de Iaacov, a quien Iaacov describió como:

Reubén, tú eres mi primogénito; mi poder y ​​el principio de mi fortaleza, preeminente en dignidad y preeminente en poder. Descontrolado como el agua, no tendrás preeminencia porque subiste al lecho de tu padre; entonces lo profanaste….

El segundo ejemplo es que inicialmente, antes de la profanación del Becerro de Oro, eran los hijos primogénitos de cada familia los que habrían formado el cuerpo sacerdotal del pueblo judío. Posteriormente, Dios designó a los levitas y a la familia de Aarón, el hermano de Moisés, para este papel. Como remanente de su posición original, la Torá luego ordenó que todo primogénito (de una familia no levita) sea redimido por un cohen por la suma de cinco monedas de plata; esto significa que, por derecho, el primogénito es de Dios, pero puede ser redimido del servicio de por vida. Como se explica en otra parte, el nombramiento original de los primogénitos para el cuerpo sacerdotal y la subsiguiente orden de redimirlos están orientados a “rectificar” su naturaleza aún inestable.

¿Por qué la primicia no puede ser utilizada en beneficio de su dueño? ¿Por qué el primogénito necesita una intervención Divina para refrenar su naturaleza inestable? Jasidut explica que con un hijo primogénito un padre no puede evitar sentir una gran satisfacción. Con el segundo, la experiencia de tener un hijo ya es familiar y el sentimiento de autosatisfacción se reduce. Cuanto más se ha experimentado algo, menos satisfacción da.

La cuestión de cómo estabilizar la energía caótica, como la del primogénito o la de las primicias, se relaciona con el punto planteado por el Rebe en su famoso discurso del 28 de Nisán. El Rebe dijo que para traer al Mashíaj debemos bajar las luces, la energía del Mundo del Caos, y colocarla en recipientes estables y bien desarrollados que puedan contenerlos (conocidos como “keilim detikun“, recipientes del Mundo de Rectificación). Dado que a un agricultor se le ordena llevar sus primicias ante el cohen, está claro que el mandamiento de bikurim actúa para rectificar, o estabilizar energéticamente, el fruto. Pero la Torá es más específica. Menciona que la fruta debe colocarse en una canasta especial conocida como טֶנֶא (pronunciado “tené“, con una “e” suave), antes de llevarla ante el cohen. Este es un claro ejemplo de tomar energía caótica y colocarla en un recipiente estable. Al colocar las primicias en el tené y llevarlas ante Dios, somos conscientes de alabar a Dios por Su grandeza en lugar de sentir nuestra propia satisfacción. El recipiente actúa como un escudo, protegiendo la energía de las primicias, protegiéndola del caos de nuestro propio orgullo en su crecimiento.

Deconstruyendo el recipiente

De hecho, la singularidad de esta palabra en la Torá y nuestro interés en la extraordinaria tarea que lleva a cabo nos impulsa a buscar más profundamente en su significado. Jasidut nos enseña que la palabra טֶנֶא es un acrónimo de los tres grupos que se unen en el mandamiento descrito más adelante en la Torá, la mitzvá de asamblea (hakhel). Una vez cada siete años, en la festividad de Sucot que sigue al año sabático, se ordena a todo el pueblo judío que se reúna en el Templo. La Torá describe que todos los hombres, mujeres y niños deben estar presentes en la asamblea. En hebreo, hombres, mujeres e infantes son אנשים, נשים y טף respectivamente, cuyas iniciales, en orden inverso, forman la palabra טנא. En hakhel, el rey leyó la Torá y se explicaron las leyes de la Torá al pueblo. Dado que la Torá menciona a hombres, mujeres y niños por separado, debe enfatizarse que cada uno participó en hakhel de una manera diferente y se llevó algo más consigo. ¿Qué “obtuvo” cada uno de estos tres grupos al asistir al hakhel?

Yendo en el orden de la palabra טנא, con los infantes primero, podríamos preguntar, ¿qué es lo que un infante (que puede caminar, pero tal vez ni siquiera puede hablar) puede obtener al asistir a una reunión que no entiende? Cada persona se ve afectada por dos elementos que están contenidos en cada experiencia de la vida: el contexto y el contenido. En Jasidut, el contexto se llama “or makif” (la luz circundante), y el contenido se llama “or pnimi” (luz interna). Debido a que su experiencia consciente es limitada, los niños se ven más afectados por el contexto que por el contenido. A medida que el niño crece, el contenido de una experiencia se vuelve cada vez más importante; al mismo tiempo disminuye el impacto del contexto, la atmósfera que rodea la situación. Lo mismo es cierto cuando se lleva a un bebé a una reunión de Torá. El contexto produce una impresión más profunda en el niño que en el adulto. Esta es una regla general en la crianza de los niños. Cuanto más pequeño es el niño, más importante es el ambiente general del hogar; a medida que el niño madura, el enfoque debe cambiar para proporcionarle más contenido.

Las mujeres vienen a hakhel no para participar en disputas halájicas, sino para captar el sentido de todo. El “meollo” subyace en todas las palabras que se dicen y es su esencia interna. Esto es lo que llamamos en yidish: derher. Esto sigue el dicho talmúdico de que “a la mujer se le dio más entendimiento que al hombre”. Incluso en una discusión intelectual, una mujer tiene un “oído interno” que puede escuchar más fácilmente el punto esencial de lo que se dice.

Los hombres vienen para ahondar en las profundidades de las enseñanzas de la Torá que se relatan en la reunión de la Torá.

El verdadero orden de dependencia se expresa en el orden relacionado en la palabra טנא: infantes, mujeres y hombres. Así, la capacidad de los hombres para relacionarse intelectualmente depende de que las mujeres mantengan los oídos abiertos para juzgar la veracidad del “punto interior”, que a su vez depende de la presencia de los niños que envuelven todo el evento con un aire de santidad y pureza.

Estos tres aspectos del estudio de la Torá reflejan claramente tres formas de estudiar Jasidut. El nivel más alto, que imita la experiencia del infante, es un estudio que no pretende tener un efecto directo ni siquiera en nuestro corazón. Este estudio está orientado a conectarse con el Todopoderoso de una manera trascendente y sobrenatural. Meditar en el punto interior de un discurso jasídico engendra emoción y corresponde al estudio del Jasidut realizado antes y durante la oración (llamado hitbonenut, de la misma raíz que biná, el nombre hebreo de la sefirá de entendimiento). Finalmente, el estudio principalmente intelectual del Jasidut y el estudio de la lógica detrás de los caminos del Jasidut tal como se expresa en las costumbres jasídicas corresponde al aspecto masculino del estudio de la Torá.

Estabilidad a través de la Torá

Estos tres grupos, hombres, mujeres e infantes, y lo que escuchan cuando se lee la Torá, pueden entenderse mejor usando otro conjunto importante de tres cosas que representan las letras de la palabra טנא.

La Cabalá nos enseña que las letras en el texto de la Torá tienen cuatro componentes:

  • marcas de cantilación (es decir, tono) (טעמים), taamim.
  • símbolos de vocalización (נקודות), nekudot.
  • Trazos (תגין), taguin.
  • las letras en sí (אותיות), otiot.

En la escritura del rollo de la Torá solo son visibles los dos últimos componentes. Los dos primeros, las marcas de cantilación y los símbolos de vocalización permanecen “ocultos” y deben ser memorizados por el lector de la Torá. Debido a que los dos niveles inferiores revelados aparecen como partes integrales (los trazos ornamentales son una parte inseparable de las letras escritas), a veces se las denomina simplemente “letras” (אותיות). Así, la palabra טנא alude a los componentes de la Torá: marcas de cantilación, símbolos de vocalización y las letras, cuyas iniciales en hebreo deletrean טנא. Dado que cada letra de la Torá es, en esencia, luz infinita proyectada en un espacio finito, tenemos en las letras hebreas un prototipo de cómo agrupar la energía ilimitada de las luces del Mundo del Caos en un recipiente compacto, a saber, una letra hebrea. que no se romperá por el brillo de la luz.

Veamos ahora cómo cada uno de estos componentes captura un aspecto diferente de la ilimitada energía de significado contenida dentro de cada letra de la Torá.

Realmente, las marcas de cantilación (טעמים, teamim) se utilizan para “cantar” el texto, es decir, proporcionan al lector una melodía básica para interpretar el texto. El tono o la melodía de un texto no proporciona una experiencia intelectual sino una experiencia suprarracional. Las marcas de cantilación hacen referencia al nivel de energía más alto y, por lo tanto, al significado más profundo incluido en el texto de la Torá. De todos los componentes del texto de la Torá, los secretos incluidos en las marcas de cantilación han sido, hasta ahora, los que menos se han explicado. Estos secretos serán una parte importante de la Torá del Mashíaj. Este nivel del texto de la Torá en la actualidad solo se capta remotamente de una manera superconsciente y en su mayoría por bebés que absorben intuitivamente el canto de la Torá.

Los símbolos de vocalización, cuyo nombre hebreo significa literalmente “puntos”, nekudot (נקודות), se refieren al mismo “punto” esencial que la mujer es capaz de oír. El nivel de energía al que hacen referencia los “puntos” es ligeramente inferior al que hacen referencia las marcas de cantilación. Los símbolos de vocalización proporcionan relativamente (hasta el nivel más bajo, la forma de las propias letras) una energía femenina que anima las letras y las hace pronunciables; de la misma manera, la energía masculina sin energía femenina sigue siendo inanimada. Un ejemplo de tal “punto” es la forma en que el Rebe terminaría cada sijá, cada discurso jasídico, con un “punto” que revelaría la aplicación práctica de la esencia de todo lo dicho. En Cabalá y Jasidut, la sefirá de comprensión representa la esencia de cualquier discusión intelectual y da nacimiento a las sefirot emocionales (bondad hasta fundamento) y crea un vínculo emocional con el tema. Sin “captar el punto”, es imposible conectarse realmente con la idea e incorporarla prácticamente en la vida propia. Así, al introducir energía femenina, los símbolos de vocalización dan origen al peso emocional que transportan las palabras.

Finalmente, las formas y los significados de las letras mismas portan el nivel de energía más bajo que hace referencia al contenido intelectual básico del texto de la Torá. El hebreo, que es diferente a cualquier otro idioma utilizado hoy en día, está estructurado lógicamente y casi algorítmicamente. Comprender el texto al nivel de sus letras requiere el conocimiento de las “raíces” de tres letras, dos letras y una sola letra de cada palabra. Entonces, los diversos “significados” de cada palabra pueden ser revelados. Este nivel de significado se deja a los hombres.

Se nos recuerda que el Alter Rebe siempre hablaba con una voz cantarina y melodiosa, sin importar si estaba aprendiendo la Torá o hablando de asuntos cotidianos. La voz cantarina y melodiosa revelaba el aspecto más elevado del lenguaje de la Torá, la melodía a la que se refieren las marcas de cantilación, los taamim טעמים. Todas sus palabras estaban llenas de la vivacidad del canto junto con la profundidad intelectual del aspecto masculino. Esta es una forma práctica de tejer personalmente la “cesta” que sea capaz de contener de manera rectificada las grandes luces del Mundo del Caos.

De las gotas caóticas a la lluvia

Las tres letras que forman la palabra טנא rara vez se encuentran juntas en la Biblia. Están asociados, aunque claramente, con el versículo: “Mirad cuán hermoso y cuán delicioso es que los hermanos vivan juntos en armonía”. El Zohar nos dice que una vez hubo una sequía. Rabi Iosi, Rabi Iusa, Rabi Jizkiya y otros fueron a ver a Rabi Shimon bar Iojai para contarle sobre la sequía. Sorprendentemente, Rabí Shimon no suplicó al Todopoderoso en oración. En cambio, para traer lluvia, enseñó este versículo: “Mirad cuán hermoso…”.

Las iniciales de las palabras “bueno”, tov (טוב) “agradable”, naim (נעים), y “hermanos”, ajim (אחים), en hebreo, deletrean טנא, la misma palabra que la palabra para la “cesta”, en la que las primicias son llevadas al cohen. Estas tres palabras que son centrales en el versículo también se suceden con una palabra en el medio. En un hermoso ejemplo de autorreferencia dentro del versículo mismo, el valor numérico de la primera palabra, “he aquí”, en hebreo hiné(הנה), ,60, es igual al de las iniciales de estas tres palabras principales de la frase (y el valor numérico, por supuesto, de la palabra טנא).

¿Por qué y cómo relacionó Rabí Shimon este versículo con la lluvia? La lluvia es el símbolo más general de la bendición que llega al mundo. De varios versículos de la Biblia, aprendemos que el proceso espiritual de la lluvia comprende dos etapas. La primera lluvia se acumula en los “cielos”. Entonces, los “cielos” deben abrirse y la lluvia cae sobre la tierra. Este verso, como lo explican los diversos comentarios sobre el Zohar, está relacionado con abrir los “cielos” permitiendo que caiga el agua que se ha estado acumulando en ellos. Este verso actúa sobre la conciencia para repararla llevándola a su estado más fructífero cuando tanto el aspecto masculino como el femenino de la sefirá de conocimiento son iguales. Esto se describe en sentido figurado en nuestro versículo como “cuando los hermanos viven juntos en armonía”.

Ahora debemos preguntarnos cómo es que este versículo se relaciona con la טנא, la canasta que es capaz de estabilizar y capturar la energía caótica y hacerla útil. La respuesta está en comprender que la razón por la que la lluvia no abandona el cielo es porque aún se encuentra en un estado energéticamente caótico. Si cayera en este estado, solo provocaría daños y no podría utilizarse correctamente. Por lo tanto, Dios en realidad está protegiendo a la tierra de la energía desatada contenida en la lluvia. Para templar la energía caótica, se debe hacer un recipiente adecuado (“canasta”, טנא) debajo. Para la lluvia, el recipiente comprende la morada “buena” y “agradable” de los “hermanos” (cuyas iniciales son, como anteriormente, טנא). Se conserva la interpretación literal de la frase “cuando los hermanos moran juntos en unidad”. Para atraer la lluvia, debemos entrar en el espacio consciente de sentir lo bueno y agradable que es que los hermanos habiten juntos.

La misma palabra “hermano”, en hebreo, significa “coser juntos”. Cada vez que hay lágrimas en el tejido de la sociedad judía, cierta alma, un profeta, puede coser y remendar las lágrimas. De hecho, tradicionalmente, es el profeta Ajiá Hashiloní el encargado de remendar y coser las lágrimas entre judíos. El Ba’al Shem Tov recibió su Torá de Ajiá Hashiloní, lo que indica que la principal inspiración (y objetivo) del movimiento jasídico es reparar el tejido de la sociedad judía.

Desafortunadamente, muchas veces parece que es imposible reparar las lágrimas en la sociedad judía. Se puede lograr inspirar a los judíos a “morar juntos” si interpretamos correctamente a qué se refieren estas tres palabras: “bueno”, “agradable” y “hermanos”.

“Bueno” es un adjetivo usado en la Biblia para describir la Torá. La Torá nos permite trascender las dificultades y penurias de la vida en este mundo y las cosas que nos separan al conectarnos a todos con nuestro pasado común. “Agradable” es el sentimiento asociado con el Mundo Venidero (la figura materna, en la Cábala), y por lo tanto representa el futuro común libre de animosidad que todos anhelamos. Así, estas dos palabras son relativamente masculinas y femeninas y corresponden a las sefirot de sabiduría y entendimiento, respectivamente. También comparten una relación numérica: טוב = 17 y נעים = 170, por lo que “agradable” es igual a 10 veces “bueno”.

Los sentimientos de cercanía compartidos por los “hermanos” representan la sefirá de conocimiento, cuya dimensión interior y experiencia es la capacidad de unir. La unidad inherente a un sentimiento fraternal está presente como una energía integral masculina y femenina en el niño, que aún no es totalmente masculino ni totalmente femenino. El desafío al que nos enfrentamos es devolver el mismo sentimiento a los adultos maduros. Juntos, los tres componentes del tené son, pues, las tres sefirot intelectuales: sabiduría, entendimiento y conocimiento, o Jabad.

Ahora tenemos una tercera comprensión de lo que representa la extraordinaria “canasta”, la טנא.

Basado en una clase dada el 16 de Elul de 5765 (19 de septiembre de 2005) en Jerusalén

PARASHÁ DE LA SEMANA

KI TETZÉ

PÁJAROS Y DESHACERSE DEL EGOCENTRISMO

“Si en el camino encuentras por casualidad un nido de pájaros… y la madre está sentada sobre los polluelos o sobre los huevos, no tomes a la madre junto con sus crías. Aleja a la madre y llévate sólo a las crías, para que te vaya bien y tengas una larga vida”. (Deuteronomio 22:7)

כִּי יִקָּרֵא קַן צִפּוֹר לְפָנֶיךָ בַּדֶּרֶךְ… וְהָאֵם רֹבֶצֶת עַל הָאֶפְרֹחִים אוֹ עַל הַבֵּיצִים לֹא תִקַּח הָאֵם עַל הַבָּנִים. שַׁלֵּחַ תְּשַׁלַּח אֶת הָאֵם וְאֶת הַבָּנִים תִּקַּח לָךְ לְמַעַן יִיטַב לָךְ וְהַאֲרַכְתָּ יָמִים.

El pensamiento jasídico enseña algo fundamental sobre nuestra psicología y cómo rectificar nuestros egos a partir de esta mitzvá que parece tan alejada de nuestra vida moderna. Estos versos en realidad contienen dos mitzvot. Primero, está el mandamiento prohibitivo, de no capturar a la madre ave y su descendencia juntos. Pero junto con la prohibición, hay una mitzvá prescriptiva, alejar a la madre pájaro antes de llevarse los huevos o los polluelos.

Madre e hijo, causa y efecto

En Cabalá, la madre simboliza una causa, tal como una madre es la causa [la razón detrás] del nacimiento de sus hijos. Por extensión, la descendencia de la madre simboliza los efectos que resultan de la causa. Nuestras acciones tienen razones o causas detrás de ellas.

A menudo, cuando no estamos seguros de qué camino tomar en la vida, buscamos algún tipo de “señal”, algún tipo de revelación indirecta de la Divina Providencia. Si nos encontramos con una, la “señal” actúa como una causa o una motivación, ayudándonos a elegir un camino en particular. A nuestro entender, esta “señal” nos fue enviada desde arriba para guiarnos en la dirección correcta.

Por ejemplo, una persona no está segura de dónde vivir. No puede decidir dónde podría ser una mejor influencia en su entorno y dónde se cumpliría mejor su misión en la vida. Hay pros y contras para cada elección. Pero luego, de repente, consigue un buen trabajo en uno de los lugares. Esto sirve como una causa externa, cambiando el equilibrio de las opciones. Si la persona así lo decide, ahora puede preferir una opción a las demás, con la “señal” de un buen trabajo dirigiendo su elección. Esta es una práctica de elegir.

Una relación viva y dinámica

Sin embargo, una vez que apareció la “señal” y lo ayudó a decidir, debe dejarlo ir. No sigas aferrándote a ella, porque el apego a esta “señal” puede eventualmente hacerte perder de vista que es Dios quien dirige el mundo y lo recrea de nuevo en cada momento. La esencia de tener una relación con el Creador es sentir que esta relación se renueva a cada momento. Una vez que se ha tomado la decisión, es hora de “alejar a la madre”, dejar ir la causa y realinearnos con el sentimiento de que es Dios quien nos da el poder para tener éxito. Por lo tanto, despedimos la “señal” y, “los críos, tomad por vosotros mismos”. De aquí en adelante, nos enfocamos en la tarea que tenemos entre manos, en cumplir la misión de nuestra vida, sabiendo que todo depende de nuestra relación diaria y viva con Dios.

Foto por Geoff Brooks en Unsplash

Libro Devarim – Números

La Parashá de la Semana

Ki Tetzé

LA VERJA ELECTRIZANTE

Visto superficialmente, la directiva de la Torá de rodear el techo de nuestra casa con una verja es algo obvio y práctico, pero como todas las palabras de la Torá, oculta dentro de si distintos niveles de significado. En esta meditación, el rabino Ginsburgh rastrea el significado profundo de la imagen de la casa, el techo y la verja. Cuando vivimos nuestras vidas de acuerdo con el contenido que hay en el interior de estos conceptos, podremos dominar la energía electrizante necesaria para redimir las 288 chispas primigenias que cayeron y acelerara así la redención.

 El Valor de la Vida

En esta porción semanal de la Torá, Ki Tetzé, Di-s nos instruye construir una defensa alrededor del techo de nuestros hogares para prevenir que alguien se caiga y pierda la vida (Deuteronomio 22:8).

Este mandamiento es el origen de la directiva general de hacer lo que sea necesario para prevenir el peligro y el derramamiento de sangre, particularmente en nuestro propio hogar. La imagen de la defensa alrededor del techado es la del valor que se le da a la vida.

La Conexión con el Mashíaj

La imagen del techo también se asocia con la del Mashíaj. En los Salmos 102:8 el rey David escribe:

He sido diligente

y me he vuelto como un ave solitaria en el tejado

El ave es la imagen del Mashíaj (como está explicado por el rabino Ginsburgh en Vaetjanán), que se describe como un pájaro posado en un nido en el Jardín del Edén esperando para redimir al mundo. En este verso de los Salmos, la imagen del redentor es la del pájaro en el tejado.

En el relato del Midrash (Ialkut Shimoní, Isaías 60:499), aparece nuevamente en el tejado, pero esta vez como un ser humano. El Rebe de Lubavitch cita a menudo este Midrash, en el cual el Mashíaj está parado en el techo del Templo de Jerusalem y se dirige al Pueblo Judío diciendo: “Humildes, el tiempo de vuestra redención ha llegado”. (La humildad es la característica básica que se necesita para merecer la redención)

Obviamente, un ave no necesita una cerca en el techo, por lo que este mandamiento se refiere claramente a las personas. El versículo apoya la necesidad de una defensa diciendo “no pondrás ‘sangre’ (dam) en tu hogar”. Las dos letras de la palabra hebrea dam, dalet-mem, son las dos últimas de la palabra adam“hombre”, alef-dalet-mem. Si una persona cae del techo y pierde la vida, es la dam la que se destruye, sólo la dalet y la mem de adam necesitan esa protección. La alef queda intacta, es el pájaro interior del alma del adam y es eterna.

La Novedad Mesiánica

Nuestro versículo especifica que se debe colocar una valla cuando se construye una casa nueva, implicando que toda casa antigua ya ha sido construida con ella. La casa nueva también alude al nuevo tercer Templo.

El concepto de novedad siempre se relaciona con Mashíaj, quien nos enseña la nueva dimensión interior de la Torá. El mandamiento de construir una defensa alrededor del techo de nuestra casa nueva es exclusivo respecto a su expresión de una conciencia de novedad mesiánica.

La Casa – La Torá Escrita

El concepto de la casa también se vincula con la Casa de Israel y con el linaje del Rey David y del Mashíaj, llamado “la Casa de David”.

En nuestra meditación, la imagen de la casa es la de la Torá Escrita (los cinco libros de Moisés, los Profetas y las Escrituras) que proviene de la facultad de jojmá, la “sabiduría” y es una facultad relativamente masculina.

El Techo – La Torá Oral

Nuestro versículo comienza con las palabras “Ki tivné“, “cuando construyas…”. La palabra hebrea tivné también puede leerse como tevuná, “un pensamiento profundo”. Tevuná es el origen de la Torá Oral. (La tradición oral comienza con los Patriarcas. Está compuesta por las leyes y tradiciones comunicadas de generación en generación.) Es una mentalidad relativamente femenina.

Cuando construimos una casa nueva, construimos (tivné) desde la facultad de tevuná. Es el lugar en la mente que estipula que debemos hacer una defensa alrededor del techo de un hogar nuevo.

En Cabalá y Jasidut aprendemos que este mandamiento de proteger activamente la vida es uno de los pensamientos centrales y originales que hay detrás de la tradición oral de la Torá. Alude al origen y al propósito de la Torá Oral, que es el de crear una cerca alrededor de la Torá Escrita y protegerla de los peligros espirituales que llevan a la trasgresión de sus mandamientos.

El Cerco alrededor del Techo

Cuando ascendemos en nuestra conciencia hasta el punto más elevado, el “techo” de una idea o experiencia y alcanzamos su clímax o epítome, es precisamente allí donde yace el peligro. Por eso, la primera enseñanza de la primera mishná de la Torá Oral es la de hacer una “cerca” (siag) alrededor de la Torá. Si uno no tiene una defensa en el punto más alto de su nueva casa –su nueva conciencia y su nueva dimensión mesiánica de la Torá- tendrá una propensión a caer.

Las Chispas Caídas

La palabra en nuestro versículo (que es parte de la Torá escrita) para “verja” es maaké, mientras que en la primera mishná de la Torá Oral es siag. Sus respectivos valores numéricos son 215 y 73, que hacen un total de 288, uno de los números más importantes en cabalá. Es la cantidad de chispas que cayeron en la creación después de que Di-s creó mundos inestables, de alta energía, que colapsaron. Estas 288 chispas dispersas en la realidad fueron atrapadas en ella y ocultadas. El propósito del descenso de nuestras almas al mundo es redimirlas y cuando esto sea llevado a cabo la redención será inminente.

Cerca Matemática

El número 288 es un cuadrado doble, 2 veces 12 al cuadrado, por lo que el promedio de las palabras maaké y siag es 12 al cuadrado, 144. Sus letras iniciales son mem-samej, 40 más 60, que suman 100, o sea 10 al cuadrado. Vemos entonces que las dos palabras hacen una linda pareja.

Si calculamos los triángulos de 215 y 73, llegaremos a otro fascinante fenómeno. El triángulo de un número es la suma de todos los números desde el 1 hasta dicho número inclusive. Por ejemplo, el triángulo de 3 es 1 más 2 más 3, igual a 6.

El triángulo de 215 es 23.220; el de 73 es 2701, obteniéndose la suma de 25.921. Este es un cuadrado perfecto, 161 al cuadrado. Este es otro número importante en cabalá, el valor numérico del Nombre Divino de Di-s que representa la tevuná, la facultad de construir una casa nueva, como ya se explicó. Tevuná es la fuerza espiritual que crea las condiciones en las cuales la nueva dimensión de la Torá es revelada (la nueva casa). Esa nueva dimensión tiene un techo que es su cúspide, su cenit. Cuando la nueva conciencia de la Torá alcanza la cima, necesita tener una defensa que la proteja.

Electrum

Aunque nuestra meditación está basada en una imagen de la porción de la Torá y está embellecida por las asociaciones matemáticas, su objetivo más importante es ayudarnos a servir mejor a Di-s. Exploremos la imagen del cerco en nuestro servicio Divino.

En cabalá, la verja simboliza un campo de luz que nos protege de caer, tanto espiritual como físicamente. Esta luz es llamada jashmal (en hebreo moderno jashmal significa “electricidad”). Esta palabra aparece en la Biblia sólo en el libro de Ezequiel (cap. 1), en la visión de la carroza Divina, la parte de la Biblia más mística y misteriosa. El significado de jeshmal en Ezequiel es la luz del electrum, un cierto color de luz asociado con la electricidad. (El Talmud cuenta acerca de un niño muy espiritual que cierta vez jugaba con jashmal, se electrificó y murió.) Esta luz puede ser peligrosa, pero en nuestro contexto representa el secreto de la verja que protege a la persona en el techo.

La Verja Eléctrica

El Baal Shem Tov enseña que el secreto de jeshmal es el de una valla eléctrica alrededor del techo. Explica que en nuestro servicio a Di-s, jeshmal representa el proceso de tres etapas de sumisión, separación y dulcificación.

Sumisión es en un estado de humildad existencial, seguido por la separación, la capacidad del alma de separar claramente entre las energías positivas y negativas.

La etapa final de este proceso es endulzar, en la cual recuperamos algunas de las energías negativas transformándolas en positivas, transformando lo negativo en bondad dulcificada.

Este servicio espiritual es el secreto del cerco. Este asegura que podamos retener la conciencia de comenzar cada momento a nuevo con sumisión y luego progresar a la separación y la dulcificación.

Esta conciencia es particularmente crucial durante nuestras “altas” espirituales, cuando experimentamos los poderes mesiánicos con los cuales Di-s nos ha dotado.

El regalo de estos poderes mesiánicos nos hace responsables de nuestro medio ambiente.

Cuando comenzamos con sumisión todo lo que hacemos, estamos protegidos en el techo de nuestros esfuerzos espirituales. En este estado de humildad, podemos dirigirnos a nuestro entorno tal como el Mashíaj, diciendo “Humildes, el tiempo de vuestra redención ha llegado”. La redención de las 288 chispas, el maaké y el siag.

¿Quién es el que cae?

La Torá nos ordena poner una defensa alrededor del techo, agregando la inusual frase “Para evitar que se caiga el ‘caedor'”. Explican nuestros sabios que “caedor” es el que es propenso a caer, y su quintaesencia son las 288 chispas caídas, que están en un estado de caída existencial desde el comienzo de la creación. El mandamiento de la verja y su poder es el de elevar y redimir aquellas chispas caídas.

Esta es la directiva más importante que tenemos que cumplir. Cuando nos identificamos fuertemente con la tradición oral de la Torá, la compañera de la Torá Escrita, creamos un hogar completo, con un basamento y un techo. Cuando agregamos la cerca electrificada de la sumisión, la separación y la dulcificación, preparamos el camino para que la conciencia mesiánica redima a las 288 chispas caídas y subsecuentemente al mundo entero.

RECTIFIQUEMOS EL PODER DEL HABLA

de la parashá Ki Tetzé, Elul 5772

En la parte del Zohar llamada Raaia Mehemna, La raíz del alma de Moshé revela secretos de la Torá a Rabí Shimón bar Iojai y sus estudiantes. El Raia Mehemna discute principalmente los misterios ocultos de los preceptos de la Torá.

Es interesante notar que de las setenta y cuatro mitzvot enumeradas en la parashá Ki Tetzé, el principal precepto que se discute en Raia Mehemna en esta parashá es el pecado del hombre que reclama falsamente que su novia no era virgen. La frase concluyente que aparece en la Torá es “porque ha difamado a una virgen de Israel” (Debarim 20:13-16)

El Zohar ofrece cuatro ejemplos para ilustrar este pecado, en cada uno de los cuales la “virgen de Israel” corresponde a una metáfora diferente. La idea que une a estas metáforas es que en su raíz espiritual, la “virgen de Israel” siempre conserva su pureza innata, que nunca puede ser mancillada.

El primer ejemplo se refiere a los espías que difamaron a la tierra de Israel. Los espías fueron castigados con la muerte, e incluso castigados más severamente que el hombre que difama a su esposa. En este ejemplo, la “virgen de Israel” es la tierra de Israel, que ellos sostenían estaba totalmente bajo el control de fuerzas no judías que incluso Dios no podía redimir. La tierra siempre es tratada como una entidad femenina y acusarla de que esa santidad de la Tierra Sagrada fue mancillada por las naciones no judías que vivían allí, es equivalente al falso reclamo del novio contra su esposa. El Zohar nos enseña entonces, que expresar la idea de que la tierra de Israel no puede ser liberada de sus habitantes foráneos, o del dominio que otras naciones tratan de ejercer sobre ella, difama a la “virgen de Israel”. Obviamente, esto es de tanta relevancia en nuestros días como nunca lo fue, e incluso más todavía.

El segundo ejemplo se relaciona con la Reina Ester, que fue tomada en contra de su voluntad para se la esposa del Rey Ajashverosh. El Zohar revela que, aunque los versos afirman literalmente que Ester se casó con Ajashverosh, la acusación de que Ester fue impurificada por Ajashverosh es también una difamación de la “virgen de Israel”. Efectivamente, el Zohar revela que Mordejai y Ester tenían el poder espiritual de separar sus “sombras” (es decir, su alma animal) de sí mismos y enviarla a una misión determinada sin involucrarse ellos mismos en esa misión. Al actuar de esta manera, Ester, que llegó al nivel superior de santidad donde representa a la Presencia Divina, permaneció pura y en verdad nunca dejó a su verdadera pareja espiritual, Mordejai. Aquí, el Zohar enfatiza que incluso si parece que un judío ha pecado, en esencia eso no es así y es sólo su alma animal que ha caído.

El tercer ejemplo es difamar a la sagrada Torá diciendo que hay menos santidad en las segundas tablas que en las primeras que fueron quebradas por Moshé. Alguien que piensa esto es difamar la capacidad de la Torá de recuperar su “virginidad”. Esta idea puede ser aplicada a muchos ejemplos pertinentes: un estudiante de ieshivá que atraviesa una crisis en su estudio de la Torá, un niño cuyo entendimiento inicial y honesto de la Torá se ha perdido, o incluso alguien cuya mente ha sido contaminada por la crítica académica bíblica. Todo esto puede revelar en definitiva que a pesar de que aparentemente las primeras tablas fueron profanadas, Dios lo prohíba, en su fuente la Torá retiene su intacto estado puro. Llegar a este nivel trae una nueva revelación de la Torá en toda su pureza.

En Raaia Mehemna, después que Moshé trae estos tres ejemplos de difamación de la “virgen de Israel”, el profeta Eliahu pide permiso para hablar y ofrece otro ejemplo involucrando al propio Moshé. Eliahu le muestra a Moshé que por un momento, luego del pecado del Becerro de Oro, había pensado que el pueblo de Israel había pecado, pero la verdad es que no. De hecho, sólo la multitud mezclada, “erev rav”, que Moshé mismo había insistido en sacar de Egipto junto con el pueblo judío, había pecado. La reacción de Moshé a esta acusación fue besar a Eliahu y pedirle que siempre lo acompañe cuando vaya a enseñar.

Podemos aprender de Moshé, quien rezó con auto sacrificio para salvar al pueblo judío de su “pecado” pero fue acusado por Eliahu de difamar a la “virgen de Israel”, que incluso si parece que el pueblo judío pecó, Dios lo prohíba, no es verdad en absoluto. De hecho, la multitud mezclada, quienes fueron los instigadores del pecado, eran en realidad partes de la propia alma de Moshé y por eso aceptó la culpa de esa situación.

El mazal (מצל ) del mes de Elul es virgo, la virgen y aprendemos del Zohar aquí que nuestra misión durante este mes en particular es abstenernos completamente de emitir falsas acusaciones contra la “virgen de Israel”: la tierra de Israel, la Divina Presencia, la Torá de Israel y el pueblo de Israel. De esta manera nosotros también nos elevaremos para retornar a un estado inmaculado y todos nuestros pecados serán perdonados para revelar que en verdad, nunca hemos pecado.

Regresando a un estado virginal

Elul es el mes de la compasión Divina, el mes en el cual escuchamos el sonido del shofar y somos inspirados a regresar sinceramente a Dios. El Baal Shem Tov, fundador del movimiento jasídico que nació el 18 de Elul, nos enseñó que nuestro retorno a Dios (תשובה , teshuvá) debe lograrse a través de un profundo sentido interior de alegría.

El mazal (מזל ) de Elul es Virgo (בתולה , betulá) la virgen, y nuestra parashá, Ki Tetzé, “cuando salgas a la guerra”, que siempre se lee durante este mes, contiene la mayor concentración de la palabra “virgen” de la Biblia.

Elul llega a nosotros para bien justo después del punto más bajo del año, Tishá Beav, que conmemora la destrucción del Templo. Pero incluso estando todavía en el mes de Av, comenzamos a elevarnos inmediatamente hasta llegar al punto máximo seis días más tarde el 15 de Av, uno de los días más felices del año. La Mishná describe lo que sucedía en esos días, cuando las doncellas salían a danzar a los viñedos en busca de su pareja. A pesar de eso, después del trauma de la destrucción del Templo nos quedamos con la sensación de que las cosas nunca volverán a ser lo mismo. Esto sucede usualmente cuando después de una experiencia traumática se vuelve muy difícil para la persona volver a estar íntegro, y necesitamos aprender cómo rehabilitarnos para recuperar nuestro estado de pureza virginal.

Este proceso de rectificación tiene lugar en el mes de Elul, cuando recuperamos nuestra pureza como la virgen que simboliza a este mes. La virgen de Elul es “la virgen de Israel”, es decir la pureza interior inmaculada del pueblo judío que nunca puede ser mancillada. La frase “la virgen de Israel” (בתולת ישראל , betulat Israel) aparece una vez en la parashat Ki Tetzé en el contexto de un hombre que difama a su novia reclamando que no era virgen, Dios lo prohíba. En el resto de la Torá aparece cuatro veces más.

Una de esas apariciones de esta frase la hallamos en el libro de Amos en el verso que comienza: “ella ha caído, no volverá a levantarse la virgen de Israel”, נפלה לא תוסיף קום בתולת ישראל ). Los sabios lo interpretan así: “ella ha caído y no [volverá a caer], levántate, virgen de Israel”. Pero Rabí Shimón Bar Iojai, el maestro de la dimensión interior de la Torá, no acepta esta interpretación y lo lee literalmente, afirmando que efectivamente, una vez que la virgen de Israel ha caído, no es capaz de volver a levantarse. Parecería como que ya no tendría ninguna chance de curarse de su trauma, y de la misma manera, tratar de rehabilitarnos parece ser una causa perdida. Sin embargo, aunque no podemos curarnos a nosotros mismos, nuestra esperanza no está perdida, porque Dios, nuestro Curador puede elevarnos y curarnos de nuestros padecimientos, ya sean físicos o espirituales. Dios Mismo devolverá la virginidad perdida del pueblo judío a través de perdonarnos de nuestros pecados. Esta transformación es ilustrada por el hecho de que “una causa perdida”,מקרה אבוד , mikré avud, tiene el mismo valor numérico que Mashíaj, משיח , 358. Por cierto, el Mashíaj triunfar incluso sobre las causas perdidas.

De acuerdo a la dimensión interior de la Torá, “la virgen de Israel” corresponde a la sefirá de reinado. La rehabilitación del pueblo judío se logrará en definitiva cuando el reino de Israel regrese a legítimo lugar, con el Mashíaj como su soberano. Rogamos al Creador porque esto sea pronto y para que se cumplan las palabras de los sabios “Ella ha caído y no [caerá nuevamente]“.

NO HUBO NI HABRÁ

Meditación diaria del Rabino Itzjak Ginsburgh

49. Parashat Ki Tetzé – Cuando Salgas a la Guerra

Domingo 8 de Elul 5778 – 19 de Agosto 2018

Vive con el Tiempo, lee la porción de Torá de hoy para comprender el mensaje diario, y aprender la lengua sagrada:

“”Cuando un hombre tenga un hijo díscolo y rebelde”. [Devarim 21:18]

“כִּי יִהְיֶה לְאִישׁ בֵּן סוֹרֵר וּמוֹרֶה”

Ki ihié leish ben sorer umoré

“Esta es una parashá muy dura: los padres llevan al hijo rebelde a la corte y finalmente es asesinado”. Pero los sabios de bendita memoria dicen: “Un hijo díscolo y rebelde no hubo ni habrá. ¿Y por qué fue escrito en la Torá? Para explicarlo y recibir recompensa.” En otras palabras, la Torá dice que en hijo rebelde en principio debía ser castigado muy severamente, pero en la realidad el castigo no puede cumplirse porque lo requisitos halájicos son imposible de cumplir.

Por lo tanto, en la dimensión simple de la Torá, estamos hablando de una realidad en la que los padres no sienten amor por su hijo. Pero como está dicho, “Israel precedió a la Torá”, o sea la raíz de las almas de Israel existe antes de la Torá. Aquí se revela esta raíz, por eso el amor por el judío “triunfa” sobre la ley de la Torá, por lo tanto en la práctica (como se determina en la Ley Oral) la ley permanece sólo en la forma de “para explicarlo y recibir la recompensa.”

ENVÍA A LA MADRE Y TOMA AL HIJO

Domingo 8 de Elul 5778 – 19 de Agosto 2018

“Enviar enviarás a la madre y tomarás a los hijos”.

[Devarim-Deuteronomio 22:7]

שַׁלֵּחַ תְּשַׁלַּח אֶת הָאֵם וְאֶת הַבָּנִים תִּקַּח לָךְ”

Sholeaj tishlaj et haem veet habanim tikaj laj”

En los libros de jasidismo se ha explicado aquí algo fundamental para el servicio a Dios: La madre es la causa que provocó el acto, y los hijos son el resultado, el acto en sí. Muchas veces cuando una persona está en duda sobre qué camino tomar, si se debe hacer algo en particular, utiliza las señales de la Divina Providencia, una “causa” determinada que está provocando que lo haga, porque entendió que le fue enviada para que vaya en la dirección que le está mostrando.

Por ejemplo, una persona no sabe a qué lugar ir a vivir, donde poder enseñar y difundir judaísmo, tiene buenas razones para estar en diferentes lugares, y en determinado momento le ofrecen un trabajo en un lugar determinado. Este es un motivo externo y “te dejas llevar por el motivo”, fluye con él… Esta es una buena manera de elegir, pero después de que el motivo cumplió su tarea, “enviar enviarás a la madre”. Deja la causa y concéntrate en lo principal, “y tomarás a los hijos”. ¡Ahora tienes un camino y un objetivo claro, buena suerte!

En todo el Tanaj, Torá-Profetas-Crónicas, la palabra הָאֵם, haem, “la madre” [en esta forma] está escrita solo en el caso de este precepto de shiloaj haken, alejar a la madre y tomar a sus pichones del nido, una señal de que alejamos a la madre a su suerte y no podremos encontrarla nuevamente

UNA CERCA EN EL TECHO

Meditación diaria del Rabino Itzjak Ginsburgh

49. Parashat Ki Tetzé – Cuando Salgas a la Guerra

Martes 10 de Elul 5778 – 21 de Agosto 2018

“Cuando construyas una casa nueva, harás una baranda en el techo, y no pondrás sangre en tu casa, porque puede caer alguien de él”.

כִּי תִבְנֶה בַּיִת חָדָשׁ וְעָשִׂיתָ מַעֲקֶה לְגַגֶּךָ וְלֹא תָשִׂים דָּמִים בְּבֵיתֶךָ כִּי יִפֹּל הַנֹּפֵל מִמֶּנּוּ”.

Ki tivné bait jadash veasita maaqué legagueja, veló tasim damim bebeiteja ki ipol hanofel mimenu.”

Interpretaremos este precepto como la historia que tiene lugar en el alma humana: cada uno tiene una casa, el lugar habitual donde transcurre su vida, donde se encuentra con otras personas y vive con ellas, sigue determinadas costumbres dentro de un ámbito en común. Esto representa el lugar revelado del alma, la planta baja afirmada en la tierra y más estable. Pero está el techo del alma, la aspiración de subir alto, al lugar oculto donde el hombre está solitario consigo mismo.

En las palabras del rey David: [Tehilim 102:8]

“Huí precipitadamente y fui como un ave solitaria sobre el tejado”.

“שָׁקַדְתִּי וָאֶהְיֶה כְּצִפּוֹר בּוֹדֵד עַל גָּג”.

“Shakadti vaeheié ketzipor boded al gag”.

Cuando la persona sube al techo corre el riesgo de caerse. La ambición puede ser peligrosa. Incluso cuando la persona se aisla al servicio de Dios, puede llegar a caerse de allí. ¿Por qué? Porque cuando el alma se expresa sin vestimentas y sin convenciones, puede arremeter desde su interior algo salvaje y romper los límites. La persona se siente “arriba”, su imagen personal se infla, y de repente tropieza y cae.

Otra razón de la caída: cuando una persona “despega” y vuela por sobre la vida cotidiana, por encima de las pequeñas ocupaciones cotidianas, en efecto está respirando el aire prístino de las alturas, pero por otro lado siente vértigo porque siente que no es su verdadero lugar, y entonces se siente tentado a saltar y caer…

Esto le sucedió al Rey David, que era como un pájaro solitario en un tejado, y efectivamente en otro lugar dice que David caminaba sobre el techo y desde allí vio a Batsheva cayendo en el pecado.

Entonces, ¿cuál es la rectificación-tikún? “¡Y harás una baranda para tu techo!” La barandilla-maaké-מעקה, insinúa la angustia, moaká-מועקה. Tomar conciencia de que puedo caer es la mejor defensa para no caerme. Cuando asciendas, tengas aspiraciones elevadas y te aísles a meditar, sé consciente de que eres un alma dentro de un cuerpo, toma conciencia de tu bajeza y nulidad, no eres un ángel sino un ser de carne y hueso. Si sigues este consejo no te “hincharás” y no te engañarás a ti mismo/a cuando asciendas, en cambio sabe que Dios te elevó al techo y solo Dios te mantendrá allí. Esa angustia existencial de saberte falible y limitado es tu baranda.

Después de que David rectificó su pecado que comenzó simplemente caminando por el techo “mató a su inclinación al mal” (como él mismo dice “y mi corazón está vacío dentro de mí”, la inclinación al mal cayó al vació). David mismo no mereció construir el Templo porque era un “hombre de guerra”, la guerra contra los enemigos exteriores de Israel y la guerra contra su ietzer-inclinación dentro de él. Pero después de que mató a instinto despuntó el alba de una etapa pacífica, el período de la construcción del Templo (que en realidad fue construido por su hijo Shlomó, un hombre de paz).

David vuelve a nosotros en la persona del Rey Mashíaj, que ganará la guerra y construirá el Templo, y sobre él dijo el Midrash que “está parado sobre el techo del Templo diciendo: Humildes llegó el tiempo de vuestra redención”. El Mashíaj está sobre el alto techo sin caerse, porque tiene la barandilla-angustia de su sentido de modestia y la humildad. Por lo tanto, es posible ascender al pico más alto y permanecer allí sin miedo, y decir:

ענוים הגיע זמן גאולתכם

“Anavim, higuía zman gueulatjem.”

“Humildes, han llegado el tiempo de su redención”.

UN CAMPAMENTO SAGRADO Y VICTORIOSO

Meditación diaria del Rabino Itzjak Ginsburgh

49. Parashat Ki Tetzé – Cuando Salgas a la Guerra

Miércoles 11 de Elul 5778 – 22 de Agosto 2018

Aprende lashón hakodesh mientras estudias Torá:

En el capítulo 23 de la parashá de la semana, Moshé Rabeinu le advierte al Pueblo de Israel en la Torá:

“10. Cuando salga un campamento a enfrentar a tus enemigos, cuídate de toda cosa mala… 15. Porque Hashem Tu Dios recorre dentro de tu campamento para salvarte y entregarte tus enemigos ante ti, por lo tanto tu campamento tiene que ser sagrado, que no vea cosas inmorales y se aparte de ti.”

כִּי תֵצֵא מַחֲנֶה עַל אֹיְבֶיךָ וְנִשְׁמַרְתָּ מִכֹּל דָּבָר רָע… כִּי ה’ אֱלֹהֶיךָ מִתְהַלֵּךְ בְּקֶרֶב מַחֲנֶךָ לְהַצִּילְךָ וְלָתֵת אֹיְבֶיךָ לְפָנֶיךָ וְהָיָה מַחֲנֶיךָ קָדוֹשׁ וְלֹא יִרְאֶה בְךָ עֶרְוַת דָּבָר וְשָׁב מֵאַחֲרֶיךָ”

“Ki tetzé majané al oiveja venishmarta micol davar ra…ki Hashem Elokeja mithalej bekerev majaneja lahatziljá, velatet oiveja lefaneja, vehaiá majaneja kadosh veló irá bejá ervat davar veshav meajoreja.”

Precisamente en el campamento del ejército hay que mantener la santidad-kedushá y la modestia-tzniut. La santidad comienza con la orden más simple, mantenerlo limpio: [Allí 23:13] “Vas a designar un lugar fuera del campamento [como excusado]… y con tu equipo llevarás una estaca… para hacer un pozo y luego cubrir con tierra el excremento.”

El Talmud afirma: “Si no se hubiera entregado la Torá, hubiéramos aprendido recato del gato.” Rashi explica: “el recato del gato, porque no hace sus necesidades frente al hombre, y cubre su excremento”.

En el Midrash llamado “Perek Shirá, “El Canto de la Creación, dice que el canto del gato al atrapar al ratón es: [Tehilim 18:38]

“Perseguí a mis adversarios y los dominé, no regresé hasta haberlos aniquilado”

“אֶרְדּוֹף אוֹיְבַי וְאַשִּׂיגֵם וְלֹא אָשׁוּב עַד כַּלּוֹתָם”

“Erdof oibai veasiguem, velo ashuv ad calotam.”

Cuando los soldados del pueblo de Israel aprenden la cualidad de pulcritud del gato, y el campamento está limpio de toda suciedad e impureza, entonces, con la ayuda de Hashem, logran tener una victoria aplastante sobre el enemigo.

DESPOSA A TU ESPOSA CADA DÍA

Meditación diaria del Rabino Itzjak Ginsburgh

49. Parashat Ki Tetzé – Cuando Salgas a la Guerra

Jueves 12 de Elul 5778 – 23 de Agosto 2018

La Torá junta el tema del casamiento y la convivencia con el tema del divorcio:

“Cuando un hombre tome a una mujer (kidushín-consagración, la desposa)

y convive con ella (nisuín, convivencia)

y después deja de agradarle por haber encontrado en ella una actitud inmoral, le escribirá un Acta de Divorcio, se la entregará en su mano y la despedirá de su casa. (guet-divorcio)

Cuando haya abandonado su casa podrá casarse nuevamente con otro hombre. (Segundo casamiento y matrimonio) Devarim 24:1-2

כִּי יִקַּח אִישׁ אִשָּׁה וּבְעָלָה וְהָיָה אִם לֹא תִמְצָא חֵן בְּעֵינָיו כִּי מָצָא בָהּ עֶרְוַת דָּבָר וְכָתַב לָהּ סֵפֶר כְּרִיתֻת וְנָתַן בְּיָדָהּ וְשִׁלְּחָהּ מִבֵּיתוֹ וְיָצְאָה מִבֵּיתוֹ וְהָלְכָה וְהָיְתָה לְאִישׁ אַחֵר

“Ki ikaj ish ishá ubealá, vehaiá im lo timzá jen ki matzá ba ervat davar, vejatav la sefer critut, venatán veiadá veshiljá mibeitó. Veiatzá mibeitó vehaljá vehaitá leish ajer.”

Más aún, de hecho, todas las leyes matrimoniales, kidushínnisuin, se aprenden a partir de los versículos que tratan sobre el divorcio (como la analogía conocida en la Guemará-Talmud de “y salió y estuvo”).

Incluso en los seis Sidrei Mishná, (órdenes de la ley oral) el Masejet Guitín, el Tratado de Divorcios, precede al Masejet Kidushín, el Tratado de Casamientos. ¿Cuál es el motivo?

La Torá quiere enseñarnos que la principal innovación de kidushín, la consagración de la esposa, es el poder de comenzar de nuevo incluso después de una gran crisis como el divorcio.

La Torá quiere enseñarnos que la principal innovación de kidushín, la consagración de la esposa, es el poder de comenzar de nuevo incluso después de una gran crisis como el divorcio.

“Nada está perdido” y “No hay desesperación en el mundo en absoluto”. Les deseamos a todos una vida feliz en el primer matrimonio, pero aun así debe haber esta conciencia que “nada está perdido”, como la fuerza de la renovación y el constante rejuvenecimiento en el matrimonio.

En virtud de esto, incluso si hay algún resentimiento entre los cónyuges, es posible reparar y restaurar la armonía de la casa, shalom bait, a través de la renovación inherente al kidushin, hacer algo sagrado, “privado”. Kadesh es jadesh, Consagrar es renovar. La renovación del matrimonio conyugal se destaca en el ciclo mensual de impureza y pureza femenina. Esta es una especie de danza doble en la que hay un movimiento constante de distancia y cercanía, “entonces se alegrará la virgen en la danza”, dice el profeta Irmiahu, porque toda distancia conduce a una mayor cercanía.

Así, el círculo de la danza se convierte en una espiral que se eleva y eleva, como una escalera caracol dice el Baal Shem Tov, y la mujer siempre sigue siendo como una nueva virgen (recuerden que estamos en el mes de Elul, mazal betulá, Signo del zodíaco Virgo).

La santidad y la pureza son conceptos que van de la mano (como los tratados de kidushín y taharot, “casamiento” y “purificaciones” en los seis Órdenes de la Mishná): la pureza de la mujer renueva la santidad de la vida matrimonial. Según el secreto, la Cabalá, la santidad pertenece a la sefirá de jojmá, sabiduría y la pureza a la sefirá de biná, entendimiento. La sabiduría tiene un carácter masculino (“Aba-padre”), estabilidad constante, y el entendimiento es de carácter femenino-maternal (“Ima-madre”), como la mujer que tiene un “entendimiento extra” para cuidar la pureza y renovarse siempre.

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PARASHAT KITETZÉ – “Cuando Salgas a la Guerra”

EL GUSANO DE LA DUDA

“BORRA EL RECUERDO DE AMALEK, NO LO OLVIDES”

Elul 5771 – Kfar Jabad – ISRAEL – Agosto 2011

https://youtu.be/R1q6YQKUYNs

Al final de la Parashá Tetzé , “Cuando Salgas”, está el precepto de “Borrar el recuerdo de Amalek”, un precepto positivo de la Torá, la parashat Zajor que se debe leer una vez por año frente a toda la comunidad en la sinagoga, cuando todos vienen a escuchar, también las mujeres, y en cierta medida es la lectura más importante de toda la Torá. “Recuerda lo que te hizo Amalek, borra el recuerdo de Amalek debajo del cielo, no lo olvides”.

¿Cuántas mitzvot de las 613 hay en esta corta parashá de Amalek, “Cuando salgas a la guerra contra tu enemigo”, que cierra la porción tetzé ? La parashá comienza con guerra y termina con la guerra principal, contra Amalek. De acuerdo con el Rambam y los que determinaron el número de las mitzvot a continuación del Rambam, hay 3 preceptos, 2 positivos y uno negativo. Es una gran novedad, que en una porción tan pequeña como esta haya 3 preceptos de la Torá. Toda la Torá es una instrucción triple, una combinación de preceptos, y un ejemplo de la combinación de preceptos es este de Amalek.

¿Cuáles son las 3 mitzvot que se encuentran aquí?

1: Zajor : “Recuerda lo que te hizo Amalek”. Precepto positivo de recordar el acto de maldad que Amalek nos hizo, “que te persiguió en el camino, etc.”

2: Timjé : “Borra el recuerdo de Amalek”. También un precepto positivo que nos ordena borrarlo hasta acabarlo. Y luego

3) Lo Tishcaj : “no te olvides”. Un precepto negativo que nos prohíbe olvidar.

Entonces el orden es hacer, hacer, no hacer. “Recuerda lo que te hizo Amalek”, un precepto positivo de la Torá, luego “borra el recuerdo de Amalek”, otro precepto positivo, y luego “no te olvides”, un precepto negativo.

¿Cuál es la diferencia entre recuerda y no te olvides, al principio? Aparentemente es lo mismo. Los sabios de bendita memoria diferencian entre ambas expresiones, y dicen que zajor es con la boca, hay que recordar diciendo con la boca lo que nos hizo, para recordarlo muy bien, para que lo recuerde en el corazón, en mi interior. Entonces hay un precepto positivo de la Torá que hay que recordar con la boca, expresar con la boca. ¿Qué es lo tishcaj ? No te olvides en el corazón.

Entonces hay quienes preguntan, si es un precepto permanente, ¿por qué no lo contamos como uno de los 6 preceptos permanentes? Porque está prohibido olvidarse ni por un momento lo que hizo Amalek. Si es una mitzvá oral, como la de recordar, no es del todo un precepto permanente. Pero los preceptos del corazón como no olvidarse, teóricamente son permanentes, quizás correspondería incluirla dentro de los 6 preceptos permanentes que hay en la Torá.

De todas maneras, tenemos aquí 3 mitzvot. Ahora, ¿cuál es el orden de ellas? Si los sabios ya dividieron entre recordar que está en la boca, y no olvidarse que está en el corazón. ¿Qué es el corazón? Es el pensamiento, la vestimenta del pensamiento, entonces tiene que estar siempre dentro de la meditación de mi pensamiento. Eguion livi , meditar en mi corazón, Amalek, y no olvidarme que tengo el precepto de borrarlo. Y de tanto en tanto, por lo menos una vez por día, también está la mitzvá de recordarlo oralmente, como al final de la plegaria donde junto con los 6 “recuerdos”, decimos esta porción y de esta manera cumplimos la mitzvá de recordarlo con la boca.

¿Qué es timjé , “borra”? Borrar es una acción, “la acción es lo principal”, hay que cumplirlo en la acción. ¿Entonces qué es, cuál es la lógica aquí de los tres preceptos? Es algo especial, es efectivamente una unidad especial en la Torá, hay aquí tres preceptos dentro del mismo asunto: “un precepto con el pensamiento, un precepto con el habla y un tercer precepto con la acción. Pensamiento, habla y acción.

Es sabido que pensamiento, habla y acción corresponden a los tres mundos inferiores. El mundo de la Creación es del pensamiento, el mundo de la Formación es del habla y el mundo de la Acción es de los hechos. Hay un verso que constituye la base del libro de Tania, como el Alter Rebe señala en la introducción del Tania: “Porque esta cosa está muy cerca en tu boca, y en tu corazón para hacerla”. También es pensamiento, habla y acción. Allí comienza “en la boca”, o sea de palabra, y aquí también comienza con la palabra, ” zajor “, recuerda. Pero luego hay un orden distinto, opuesto. Allí “en tu boca y tu corazón”, de la boca llega al corazón”, y del corazón, o sea del pensamiento llega a la acción.

Entonces el orden aquí es habla, acción y subimos al pensamiento, un orden muy interesante. O sea que de Ietzirá, el mundo de Formación, la vav del Nombre de Dios, se desciende a la hei inferior, que es la unión vav-hei , el mundo de Asiá, Acción, y luego volvemos y subimos a la heisuperior del Nombre de Dios, que es el pensamiento, el mundo de Briá, Creación. “Recuerda lo que te hizo Amalek , borra el recuerdo de Amalek …, no te olvides.”

Para entender bien esto vamos a meditar en una alusión muy conocida del Baal Shem Tov, que Amalek, עמלק , 240, es de guematria ספק , safek , “duda”: lo principal de la cáscara impura de Amalek es que provoca dudas en la fe, Dios no lo permita. ¿Dónde se encuentra el lugar de la duda, en el pensamiento, en el habla o en la acción? Teóricamente, literalmente la duda está en el pensamiento. En el interior del hombre, en lo más íntimo existen dudas.

Por lo general cuando la persona tiene dudas, en especial quien observa la Torá y los preceptos superficialmente, tiene vergüenza de decir que tiene dudas. Nuevamente, las dudas están dentro de su pensamiento. Y también, y eso es bueno, trata de alejarlas. Pero si Amalek de guematria safek , “duda”, eso a lo que se refiere el Baal Shem Tov, primero hay que identificarlo en la vestimenta del pensamiento. De acuerdo con el orden bajamos desde el pensamiento a la palabra y a la acción, este es el orden.

¿Qué es este Amalek que comienza creando dudas en el pensamiento, qué sucede con él cuando llega a la vestimenta de la palabra, que corresponde al precepto “recuerda lo que te hizo Amalek”? Cuando baja a la vestimenta del habla, la duda comienza a ser tartamudeo. Está escrito “lo que creí voy a decir”. La persona tiene hablar en un idioma claro, expresar su fe de forma clara. Si la fe es clara dentro en el pensamiento, también su habla es clara, sin ningún tartamudeo. Pero en cuanto tiene dudas en el pensamiento, automáticamente, cuando tiene que expresarlo, ya sea sutil o groseramente comienza a tartamudear. No sale liso y llano, no sale claro.

¿Qué es la duda que desciende otro mundo y llega al mundo de Asiá, “Acción”? Allí la duda es si acaso puedo hacer algo en el este mundo. La duda es sentirse atado, mis manos están atadas. Así me siento, no me siento libre para actuar, siento limitaciones, estoy completamente limitado, no consigo hacer lo que tengo que hacer. La palabra sipek , conseguir en el sentido opuesto, que no da abasto. Cuando el safek , la duda baja al mundo de Asiá, siento que mis manos y mis pies están atados, no consigo levantarme e iniciar obras en lo sagrado, hacer cosas.

Ahora, si la persona está del lado opuesto a lo sagrado, el sitra ájara , Dios no lo quiera, entonces es ciertamente Amalek, y puede estar con mucha potencia, con mucha confianza en sí mismo, y más todavía, todo esto viene del lado de la impureza. Pero aquí estamos hablando de alguien que está identificado y quiere pertenecer a lo sagrado. Esto comienza con cierta duda, que en Jasidut se llama “gusano”, cierto gusano en el pensamiento. Y luego desciende y se convierte en tartamudeo en su capacidad para influenciar.

¿Qué es hablar? Hablar es la capacidad para influenciar, causar un efecto, catalizar, ser un shaliaj (emisario) del Rebe, salir hacia afuera. Lo principal de la fuerza del emisario está en su hablar, y si no puede hablar claro, bien y con amor, con una gran luz, “abre tu boca e iluminarán tus palabras”, es una señal de que Amalek penetró en su vestimenta del habla. Nuevamente, y si llega a un estado en que no puede actuar de manera sagrada, está limitado, sus manos están atadas, es Amalek que ya llegó a su vestimenta de la acción.

¿Cuál es el orden aquí? El orden del verso es, como dijimos antes, primero el habla, “recuerda”, luego “borra”, que es acción y al final volvemos para desarraigar, como ya estudiamos durante las últimas semanas. El final de “no olvides” es volver al pensamiento, pero no sólo a la dimensión consciente del pensamiento, sino también al aspecto inconsciente del pensamiento, para desarraigar allí a Amalek. Que no quede ninguna raíz de él que pueda brotar luego.

¿Dónde percibo que Amalek está en mí? Como dijimos antes, el judío religioso aleja a Amalek, a sus dudas. ¿Pero cómo se da cuenta de repente, alguien sagaz que tiene dentro a Amalek? Cuando tartamudea, al hablar, allí percibe que aparentemente que tiene cierto Amalek. Y luego siente que eso baja a la acción, y allí tiene que tratarlo, porque esos son aspectos revelados en la psiquis.

Y luego, después que termina de arrancarlo, como estudiamos la semana anterior, arrancar la idolatría y la conquista de la Tierra de Israel de manera efectiva en la acción, entonces puede volver a “no te olvides”, “aniquilar, aniquilarás”, desarraigar completamente a Amalek de la Tierra de Israel. Que no quede de él ningún recuerdo, tampoco en los pensamientos más íntimos.

Entonces, estos son los tres preceptos de esta unidad completa de Amalek: Zajor, Timjé, Lo Tishkaj , “Recuerda, borra, no te olvides”.

PARASHAT KITETZÉ – “Cuando Salgas a la Guerra”

UNA MUJER DE BELLA APARIENCIA

Elul 5775 – Kfar Jabad – ISRAEL – Agosto 2015

https://www.youtube.com/watch?v=oqTtBRnmLJw

La parashá “Ki tetzé” comienza:

[Deuteronomio 21:10-11] “Cuando salgas a la guerra sobre tu enemigo, y te lo entregue Havaiá tu Dios en tu mano, y los tomes de cautivos”. “Y veas entre los cautivos una mujer de hermosa apariencia, y la tomes por esposa.” La mujer de hermosa apariencia es la raíz del alma, así está escrito en Jasidut.

El Baal Shem Tov dice que la palabra eshet, אשת, “una mujer de” son las iniciales de “Adon-ai sefatai tiftaj”, “Dios abre mis labios”. Antes de rezar la plegaria silenciosa, shemoná esré, la plegaria de pie frente a Dios, decimos el verso “Dios abre mis labios y mi boca dirá Tu Alabanza”.

Adonai sefatai tiftaj, tiene las iniciales “eshet”, “alef shin tav”, “mujer”, y “mi boca dirá Tu alabanza”, fi iaguid tehilateja, de iniciales iafat, iud pei tav, “hermosa”.

Es decir que la mujer de hermosa apariencia, la expresión, la revelación de la mujer de hermosa apariencia, es cuando la persona se para frente a Dios, comienza a rezar, derrama su corazón, su ser frente a Hashem bendito sea.

Entonces se le revela la “mujer de hermosa apariencia y la tomas por esposa”.

VIDEOS GAL EINAI

Año 5782 y anteriores

LECTURA DE LA TORÁ KI TETZÉ 5782

Una meditación y una bendición desde ierushalaim par aun año bueno y dulce

Lectura de la Torá Cuando Salgas y Una Bendición desde Ierushalaim para un año bueno y dulce

https://youtu.be/SwoffW3_KJ8

El tema de la bella mujer cautiva alude en Jasidut guerra contra las fuerzas que tienen cautiva a las chispas de Divinidad que deben ser encontradas, extraídas y liberadas de entre las cáscaras impuras de la realidad.

La principal innovación que surge de estas discusiones sobre la lucha contra el enemigo, el instinto animal y el alma Divina, es que la diferencia, que enfatiza el contraste entre Israel y sus enemigos, como en tiempos de guerra, da el poder de reconocer las chispas de los guerim, los conversos cautivos en las cáscaras impuras, atraerlos y refinarlos, es decir separarlos de la impureza para que puedan entrar al pueblo de Israel.

La verdadera tendencia de la diferencia no es una separación descuidada de las naciones del mundo, sino una transmisión pura y completa de la palabra de Dios al mundo, que les permita unirse a ella y también les dé la fuerza y el coraje necesarios para llevar a la naciones más cercanas a la visión Divina.

UN NUEVO SONIDO DEL SHOFAR EN ELUL

y una meditación sobre salir a la guerra sobre el enemigo que nos molesta, nos separa de Dios

Beit Hakneset Jabad Rejovot, Israel

Rabino Jaim Frim

Sonido del Shofar en Elul para salir a la guerra sobre el enemigo que nos separa de Dios

https://youtu.be/NGRoYfPLsZM

Por lo general cuando la persona tiene dudas, en especial quien observa la Torá y los preceptos superficialmente, tiene vergüenza de decir que tiene dudas. Nuevamente, las dudas están dentro de su pensamiento. Y también, y eso es bueno, trata de alejarlas. Pero si Amalek de guematria safek , “duda”, eso a lo que se refiere el Baal Shem Tov, primero hay que identificarlo en la vestimenta del pensamiento. De acuerdo con el orden bajamos desde el pensamiento a la palabra y a la acción, este es el orden.

¿Qué es este Amalek que comienza creando dudas en el pensamiento, qué sucede con él cuando llega a la vestimenta de la palabra, que corresponde al precepto “recuerda lo que te hizo Amalek”? Cuando baja a la vestimenta del habla, la duda comienza a ser tartamudeo. Está escrito “lo que creí voy a decir”. La persona tiene hablar en un idioma claro, expresar su fe de forma clara. Si la fe es clara dentro en el pensamiento, también su habla es clara, sin ningún tartamudeo. Pero en cuanto tiene dudas en el pensamiento, automáticamente, cuando tiene que expresarlo, ya sea sutil o groseramente comienza a tartamudear. No sale liso y llano, no sale claro.

CHISPAS CAUTIVAS DE DIVINIDAD

Cuando Salgas 5781

Algunas historias rápidas antes de Shabat

Ya nos despedimos del 64

Chispas Cautivas De Divinidad - Cuando Salgas 5781

https://youtu.be/FfoJ29U5AfQ

CON EL PODER DEL CABALLO

Feliz Cumpleaños

Invitación para esta noche con Leikaj

Con el poder del Caballo en 12 de Elul - Feliz Cumpleaños Invitación para esta noche con Leikaj

https://youtu.be/gNoJP93WYJA

EL NIÑO NACE TZADIK Y COMIENZA SUS 52 TRAVESÍAS

Ki Tetzé 5782 – 12 de Elul

Reunión de Cumpleaños – Te invito a recibir Leikaj

Algunas personas pueden pensar que, para embarcarse en un proyecto activo de perfección, necesitan mucha preparación; Pueden pensar que primero necesitan fortalecerse con una confianza activa en Dios y practicar la iniciativa, luego tejer una visión y definir metas y solo entonces, después de mucho pensar y hablar, emprender el camino de la acción.

En verdad, sin embargo, primero hay que actuar. La acción luego desencadena todo el resto

El niño nace tzadik y comienza sus 42 travesías 12 Elul 5782 Reunión de Cumpleaños en Vivo y Lajaim

https://youtu.be/Zywfxybjkxs

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/707

¿PARA QUÉ VINE AL MUNDO?

El camino hacia la conciencia natural

– Parashá Ki Tetzé 5780 –

¿Para Qué Vine Al Mundo? El camino hacia la conciencia natural - Parashá Ki Tetzé 5780

https://youtu.be/JBPxxWT-d_E

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/206

El alma tiene tres estados de conciencia: autoconciencia, conciencia Divina y conciencia natural. La historia del descenso del alma al mundo – “el descenso es necesario” – es en realidad su descenso del estado de conciencia Divina en el que se encontraba antes de la creación, a la negativa autoconciencia, para finalmente obtener la verdadera unión con Dios en la conciencia natural.

Unas pequeñas palabras de jasidut y el sonido del shofar

Ashdod, Israel

Elul 5780

CUANDO VEAS EL TORO DE TU AMIGO, NO TE DESENTIENDAS

Y EL SONIDO DEL SHOFAR EN ELUL 5780

Cuando veas el Toro de tu amigo, no te desentiendas. Y el sonido del shofar en Elul 5780

https://youtu.be/S96OuGEEYPA

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/205

De Guerras, Conspiraciones, Incertidumbre y Cómo Enfrentarlo

PARASHÁ KI TETZÉ – CUANDO SALGAS

EL ARIZAL Y LA ELEVACIÓN DEL ALMA, Y MÁS…

5780

De Guerras, Conspiraciones, Incertidumbre y Cómo Enfrentarlo - Parashá Ki Tetzé - Cuando Salgas

https://youtu.be/WDsbeEYjVgo

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/202

https://t.me/galeinai_audios_es/203

Deuteronomio

10 “Cuando libres la guerra contra tus enemigos, Dios te dará la victoria sobre ellos, de modo que tomarás cautivos.”

Meditaremos en esto:

**Hace unas semanas, se le preguntó al rabino Itzjak Ginsburg,** sobre las teorías de conspiración y las teorías que rodean el pánico y la crisis de Corona.

En general, su respuesta fue que tales pensamientos no son adecuados para el pensamiento judío honesto e inocente, en cualquier caso, están muy lejos de la fe inocente y tampoco son ciertos…

¿Qué hace que la gente se sienta atraída por tales teorías y rumores, precisamente en esos momentos?

Hemos hablado bastante en las últimas semanas, de la incertidumbre en la que nos encontramos debido a la loca situación global: sanitaria, económica, social, política y más…

Una de las formas (incorrectas…) de lidiar con esta incertidumbre es refiriéndose a fuentes de conocimiento especiales y “ocultas”, como aquellas que pueden llegar a salvar la brecha entre la realidad y nuestra capacidad para conocerla.

¿Pero cuál es el problema?

(Por supuesto, aparte de la pregunta de si estas respuestas son correctas, y la pregunta importante de si esta es la forma de creer del judaísmo…) Resulta que el intento de alcanzar la paz y la seguridad a través de la conexión con fuentes de conocimiento ocultas y que desaparecen en realidad nos aleja de ese silencio deseado.

Nos sumergimos en un mundo de rumores, sentimientos, oscuros abismos y miedos indefinidos.

¿Y cuál es la alternativa?……

VIVIR CON JASIDUT 5775

Cuando salgas a la guerra

Ki tetzé - Cuando Salgas a la Guerra

http://www.youtube.com/watch?v=As2wMK2bbPU

AUDIO: https://t.me/galeinai_audios_es/201

MEDITACIÓN JASÍDICA

PARASHÁ KI-TETZE

EL MATRIMONIO Y EL DIVORCIO

5778

24-08-2018

https://youtu.be/TkvvW_LeZHg

Dedicado a Orna bat Aharón, de bendita memoria,
Ganei Iojanán, Israel

VIVIR CON JASIDUT 5777 KI TETZÉ – KI TAVÓ

UNA CERCA EN EL TECHO DE TU CASA

http://www.youtube.com/watch?v=5obLRt21TOc

La Verja. El Cerco alrededor del Techo

Cuando ascendemos en nuestra conciencia hasta el punto más elevado, el “techo” de una idea o experiencia y alcanzamos su clímax o epítome, es precisamente allí donde yace el peligro. Por eso, la primera enseñanza de la primera mishná de la Torá Oral es la de hacer una “cerca” (siag) alrededor de la Torá. Si uno no tiene una defensa en el punto más alto de su nueva casa –su nueva conciencia y su nueva dimensión mesiánica de la Torá- tendrá una propensión a caer.

Las Chispas Caídas

La palabra en nuestro versículo (que es parte de la Torá escrita) para “verja” es maaké, mientras que en la primera mishná de la Torá Oral es siag. Sus respectivos valores numéricos son 215 y 73, que hacen un total de 288, uno de los números más importantes en cabalá. Es la cantidad de chispas que cayeron en la creación después de que Di-s creó mundos inestables, de alta energía, que colapsaron. Estas 288 chispas dispersas en la realidad fueron atrapadas en ella y ocultadas. El propósito del descenso de nuestras almas al mundo es redimirlas y cuando esto sea llevado a cabo la redención será inminente.

Cerca Matemática

El número 288 es un cuadrado doble, 2 veces 12 al cuadrado, por lo que el promedio de las palabras maaké y siag es 12 al cuadrado, 144. Sus letras iniciales son memsamej, 40 más 60, que suman 100, o sea 10 al cuadrado. Vemos entonces que las dos palabras hacen una linda pareja.

Si calculamos los triángulos de 215 y 73, llegaremos a otro fascinante fenómeno. El triángulo de un número es la suma de todos los números desde el 1 hasta dicho número inclusive. Por ejemplo, el triángulo de 3 es 1 más 2 más 3, igual a 6.

El triángulo de 215 es 23.220; el de 73 es 2701, obteniéndose la suma de 25.921. Este es un cuadrado perfecto, 161 al cuadrado. Este es otro número importante en cabalá, el valor numérico del Nombre Divino de Di-s que representa la tevuná, la facultad de construir una casa nueva, como ya se explicó. Tevuná es la fuerza espiritual que crea las condiciones en las cuales la nueva dimensión de la Torá es revelada (la nueva casa). Esa nueva dimensión tiene un techo que es su cúspide, su cenit. Cuando la nueva conciencia de la Torá alcanza la cima, necesita tener una defensa que la proteja.

LECTURA DE LA TORÁ 5778

Lectura de la Torá 1 Cohen Ki Tetzé Ganei Iojanan Elul 5778

https://youtu.be/75_vO-B1VhQ

Lectura de la Torá 2 Leví – Ki Tetzé – Ganei Iojanan Elul 5778

https://youtu.be/n0c0gq7BLJk

Lectura de la Torá 3 Israel – Ki Tetzé – Ganei Iojanan Elul 5778

https://youtu.be/y7CUbqieHJ4

VIVIR CON JASIDUT 5779

Refugio y Divorcio

Refugio y Divorcio - Parashá Ki Tetzé

http://www.youtube.com/watch?v=d3P3iF7J1_c

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