“Saltando y Pasando por Alto: Dios, los electrones y nosotros
Qué gran alegría – ¡Llegó la primavera, Pesaj ya está aquí!
Como explica Rashi en el Pentateuco, el nombre Pesaj proviene de la expresión de saltar y pasar por alto: Dios pasó por alto las casas de los israelitas en Egipto cuando golpeó a los egipcios con la plaga de los primogénitos.
Uno de los fascinantes fenómenos de los saltos en la naturaleza aparece en la tabla periódica, tal y como la descubrió la mecánica cuántica cuando se enseña la tabla periódica en las escuelas se explica que cada átomo tiene ‘capas’ de átomos o niveles de energía: en los primeros elementos las ‘capas’ más cercanas al núcleo del átomo están llenas de electrones y a medida que avanza en la tabla el núcleo del átomo es más grande y los electrones son más numerosos, por lo que llenan más capas exteriores, y es más grande cada capa que contiene más y más electrones.
Aunque según la mecánica cuántica el asunto es más complejo: los electrones no giran de manera simple en forma circular en cada capa de energía. Cada electrón tiene una ‘pista’ especial donde se puede encontrar: ciertas áreas donde se puede encontrar y otras áreas donde no (y la transición de un área a otra es un salto milagroso inexplicable). Estas órbitas se llaman orbitales y tienen diferentes formas (creadas por las ecuaciones matemáticas que describen las posiciones de los electrones).
El descubrimiento de los orbitales reveló un fenómeno inusual e interesante: resulta que el principio simple según el cual los electrones llenan las capas de energía de adentro hacia afuera, primero las capas más cercanas al núcleo y luego las capas externas, no es absoluto. Hay un orbital (‘órbita’) en la tercera capa (la tercera fila de la tabla) que los electrones la ‘saltan’, y proceden a llenar la cuarta capa antes de que se llene la anterior. Solo después de llenar un orbital en la cuarta capa, se llena el orbital vacío en la tercera capa al igual que las capas siguientes. El fenómeno es especialmente notable en la sexta capa, donde se llena un orbital de la cuarta capa (¡dos capas ‘abajo’!). elementos conocidos como ‘lantánidos’. Es decir que los electrones ‘saltan’ la órbita más cercana a ellos y ‘saltan’ directamente a la capa superior.
La explicación física de esto es que los electrones ‘apuntan’ a la energía mínima y por lo tanto prefieren capas más cercanas que requieren menos energía. Aunque, cuando un determinado orbital en una capa requiere más energía que otro orbital en una capa superior, existe una preferencia por el orbital superior (este es el principio absoluto, que explica todo el llenado de las capas).
¿Qué se puede aprender de esto en el servicio a Dios?
Saltando y pasando por alto en el servicio de Dios
Incluso en el servicio de Dios hay situaciones en las que es necesario ‘saltar’: ir más allá del orden normal y lógico y hacer cosas un poco más elevadas y alejadas de nuestra situación real. De hecho, un buen ejemplo de ello es el propio éxodo de Egipto: en el jasidismo se explica que el pueblo de Israel huyó de Egipto (como dice el verso, “y el pueblo huyó”) porque se encontraba en un estado impuro y degradado y la única forma de salvarse era escapar de Egipto y del mal saltando y pasando por alto más allá del paso apropiado y lógico [de hecho, en el desierto más de una vez los israelitas se quejaron y ‘soñaron’ con Egipto]. Por supuesto, después del salto y la fuga se requiere un largo trabajo de corrección y trascendencia para corregir y ajustar al pueblo de Israel al nivel al que saltó (y este es el trabajo de contar el Omer), pero en el primer momento se requiere un salto y escape.
Incluso en la obra de Dios en el presente sucede que una persona se ‘atasca’ y no logra avanzar hacia la meta que es lógica y apropiada para él y luego se le exige que se salte a un orden superior de trabajo, a través del cual llegarán las fuerzas para completar lo requerido en el nivel más simple y básico.
Por lo tanto, en la festividad de Pesaj reflexionamos sobre Dios y saltamos: vamos más allá de los límites y estrecheces del orden fijo y vinculante hacia lo que es cada vez más alto y así recibimos poderes renovados y frescos como también podemos aprender de los electrones. en la tabla periódica.
¡Y un Pesaj casher y sameaj, feliz y kosher!
Shabat Shalom
El Equipo de Gal Einai en español