UN DÍA DIFÍCIL PARA TODOS 💔

La devolución de los cuerpos de los secuestrados, 

sacudió nuestros corazones y los llenó de dolor. 

A veces, en momentos como estos, sentimos que no podemos continuar con nuestras actividades diarias. 

La mano va automáticamente al celular una y otra vez, buscando otro titular, otra actualización, otra columna de opinión… 

Los pensamientos corren sin control hacia lugares que no nos hacen bien, 

y nos cuesta atraparlos y guiarnos a estados más saludables. 

📌 No es solo el impulso de estar actualizados, sino también otras áreas de la vida: 

🔹 Comer sin control, 

🔹 Reaccionar con enojo, 

🔹 Hablar de manera impulsiva… 

💭 A veces sentimos que no tenemos verdadero dominio sobre nosotros mismos, que actuamos en modo automático, sin pensar. 

En nuestra parashá encontramos un mensaje profundo sobre esto: 

📖 “Y seréis hombres santos para Mí, y no comeréis carne de animal desgarrado en el campo” (Shemot 22:30).

Nuestros Sabios aprenden de aquí la prohibición de “Éver Min HaJai”, “miembro de un animal vivo” es decir, no comer un animal antes de que haya pasado por un proceso adecuado de shejitá (faena ritual) y preparación.

🔹En el Jasidut esto se explica como la corrección de la impulsividad: 

Aprender a detenerse, a contenerse, a no correr detrás de gratificaciones inmediatas.

¿Cómo liberarnos de la impulsividad? 

📌Nuestro instinto nos dice: “¡Solo contrólate!” 

📌La Torá nos ordena: “Supera tus impulsos y aprende a contenerte”. 

🛑Pero seamos honestos: no es tan fácil.

A veces, la brecha entre nuestro deseo de controlarnos y nuestra falta de dominio sobre nosotros mismos nos frustra y nos decepciona.

En Torat Hanefesh entendemos que el control no es el punto de partida, sino el resultado final. 

📌Para cambiar realmente debemos ir a la raíz. 

La impulsividad surge de una falta de fe en nosotros mismos.

🔹Cuando nos sentimos vacíos, cuando creemos que no hay bondad en nosotros,

buscamos llenar ese vacío con experiencias externas, sean positivas o negativas.

🔹Pero cuando recordamos que dentro nuestro hay un punto de estabilidad, una Neshamá Elokit (alma divina), una “chispa de Hashem”,

y realmente creemos en ella, la buscamos y nos conectamos con ella, 

entonces ya no sentimos ese vacío, y dejamos de perseguir satisfacciones externas.

La próxima vez que sientas un impulso repentino…

🛑Detente un momento.

🌬Respira profundo. 

✨Recuerda que la fuerza que necesitas ya está dentro de ti.

No necesitas llenarte desde afuera. 

Tienes dentro de ti una Neshamá Elokit, una chispa de santidad.

No necesitas perseguir gratificaciones externas para sentir plenitud.

💙 Shabat Shalom y que escuchemos solo buenas noticias. ✨

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *