UNIVERSIDAD DE LA TORÁ: PSICOLOGIA
En Tu Bi’Shevat – el Año Nuevo de los árboles – indicando su renovado crecimiento, el Rav Ginsburgh dio una clase dedicada al crecimiento psicológico basada en parte en los escritos de Viktor Frankl. Lo que sigue son algunos extractos de la clase de tres horas de duración.
DEL OIR AL SIGNIFICADO
Comenzaremos nuestro análisis esta noche con el significado de “significado”, y particularmente el papel del sentido en la vida. Para entender el sentido, podemos comenzar con la primera palabra del versículo por excelencia de la fe judía, el Shemá. La primera palabra – shema (שְׁמַע), significa literalmente “escuchar” u “oír”, pero proviene de la misma raíz que “significado-sentido” (מַשְׁמָעוּת, mashmaut). Hay comentarios que dicen que Moisés quiso decir “ver”, pero la generación no estaba preparada para ello. Sólo en el futuro, cuando venga el Mashíaj podremos “ver las cosas de la misma manera”. Pero otras fuentes dicen que decir “oír” es superior a decir “ver”.
En la tradición jasídica, “oír” generalmente se explica como derher, una palabra idish que se refiere a la audición interna en el corazón. A veces, esto es referido como el “punto de la verdad” en el corazón de una persona. Pero “significado” es algo nuevo. Proviene de una palabra utilizada por los sabios, מַשְׁמַע. Por lo tanto, el significado no es oír físicamente en el oído y no es derher – oír en el corazón. El significado está, si está en alguna parte, en la mente. Tiene algunas ventajas incluso sobre el derher en el corazón. Así que tenemos aquí tres niveles de “audición”:
Oír en la mente | Significado |
Oir en el corazón | Derher |
Audición física | Sonido |
Profundicemos más en este primer modelo.
Para escuchar exactamente lo que se está diciendo necesitamos ser un recipiente vacío. Esto es lo que Rashi escribe acerca de Betzalel, quien fue capaz de escuchar lo que Di-s le dijo a Moisés aunque él no estaba allí.[1] Para escuchar bien necesito tener un sentido de sumisión en mi psique. En última instancia esto me permite entender una cosa dentro de otra, davar mitoj davar (דָּבָר מִתּוֹך דָּבָר), la habilidad principal de la sefirá de entendimiento.
Además de la capacidad de oír, que es un producto de la sumisión en la psique, hay una propiedad del oído descrita como “el oído discierne entre palabras [o argumentos]”[2], ozen milin tivjan (אֹזֶן מִלִּין תִּבְחָן). Está lo que el oído escucha y está lo que uno discierne de lo que oye con el oído. El entendimiento, biná (בִּינָה) está relacionado con la palabra para “entre”, bein (בֵּין). En este versículo discernir se refiere a la capacidad de distinguir entre lo que es verdadero y lo que es falso. Esto ya es un ejemplo de havdalá, separación en la psique. El oído interno que está en el corazón constituye la capacidad de entender diferenciando entre lo verdadero y lo falso. El corazón separa entre lo verdadero y lo falso.
Pero hay otro tipo de audición aún más profunda: entender el significado de lo que se dice. Primero oigo y entiendo la intención de lo que se está diciendo, pero aun no entiendo el significado completo de lo que escuché. Entender el significado de lo que se dijo significa conocer el objetivo, el propósito de lo que se dijo. También se trata de entender el contexto de lo que se estaba diciendo. Oír el significado involucra mi visión completa del mundo. Entender el significado es ver cómo lo que se dijo se alinea con el propósito de mi vida, el propósito para el que fui creado.
Así que estas tres etapas: oír, entender y luego obtener el significado. La última etapa es realmente algo reciente, de las últimas dos generaciones más o menos. La etapa final del significado es un tipo de endulzamiento. El proceso completo entonces es que primero la persona tiene que vaciarse en sumisión, luego reflexiona sobre ello y lo entiende internamente, ésa es la separación, y finalmente, capta el significado que es el endulzamiento. Recordemos que Sumisión, Separación y Dulcificación es el proceso de tres etapas de rectificación de rectificación y superación de la psicología del Baal Shem Tov.
Presentemos el modelo completo, el primero de esta noche:
Oír en la mente | significado | endulzamiento | relacionar lo dicho con el propósito de la vida |
Oír en el corazón | derher | separación | Discernir entre lo verdadero y lo falso |
Audición física | sonido | sumisión | entender una cosa a partir de otra |
EL SIGNIFICADO COMO MOTIVACIÓN
En la filosofía moderna, muchos filósofos, casi todos judíos, comparan el concepto de “significado” (mashmaut, מַשְׁמָעוּת) con verdad, van de la mano. Pero “verdad” no es exactamente lo mismo que “significado”. En general, hay 5 definiciones diferentes de lo que es la verdad en la filosofía actual. Hay una tercera palabra, que también es diferente: “contenido-esencia”, tojen (תוכן). Hay muchas teorías del contenido, empezando por la teoría presentada por Viktor Frankl, cuyo trabajo le gustaba mucho al Rebe de Lubavitch.[3]
El libro más popular de Frankl, que vendió 16 millones de copias en todo el mundo, es El hombre en busca de sentido. Argumenta que la fuerza motriz es nuestra búsqueda del sentido de nuestra vida. Antes de él hubo otros dos psicólogos vieneses: Freud y Adler que argumentaban de manera diferente. Freud creía que el principal motivador de los seres humanos es el placer. Los más grandes alumnos de Freud lo abandonaron al final. Aparte de Jung, que no era judío, todos sus discípulos sí lo eran. Alfred Adler también pasó de ser uno de los fundadores del movimiento psicoanalítico bajo Freud, a ser uno de los primeros en separarse de él. Para Adler, la motivación en la vida es el poder, el poder social, el poder político, etc. Pero para Frankl la verdadera motivación es el significado o sentido de la vida.
Psicólogo | Principal motivación en la vida |
Viktor Frankl | significado |
Alfred Adler | poder |
Sigmund Freud | placer |
Los tres eran judíos, y una vez más, el Rebe de Lubavitch se identificó más fuertemente con Frankl y la centralidad del significado de la vida
VERDAD, CONTENIDO Y SIGNIFICADO
Así que ahora tenemos tres palabras que se aplican a cualquier afirmación. Está el contenido de la declaración, su significado y su verdad. Para entender mejor la diferencia entre estas tres dimensiones de un enunciado o proposición, veamos cómo se relacionan con nuestra mente
El contenido se relaciona con la mente consciente. Cuando estamos considerando el contenido de una declaración, necesitamos analizarla de una manera que podamos entenderla completamente. Para ello utilizamos nuestra mente consciente. Pero para descubrir el significado de una afirmación o proposición, necesitamos tener en cuenta nuestro inconsciente. El inconsciente lo que se conoce como el subconsciente, y en Jasidut se lo conoce como la supra consciencia, generalmente llamado Keter, o la corona).
Comprender el significado que tiene para mí una determinada proposición requiere que sea consciente de mi mente inconsciente, incluyendo tanto sus aspectos subconscientes como sus aspectos supraconscientes. No es suficiente analizarlo usando mi mente revelada y consciente. La verdad de un enunciado, que llamaremos el “punto de verdad” que encuentro en un enunciado es más elevado que su contenido y su significado. La verdad de una afirmación es su fuente dentro de la esencia de mi inconsciente.
Dicho de otra manera: la verdad es el nivel más alto. Reside enteramente en mi inconsciente. El significado se adquiere cuando empiezo a interiorizar la verdad de una afirmación y a hacerla aplicable a mi vida. Así, la verdad da sentido a mi vida; es la proyección del inconsciente sobre la mente consciente. Después de eso, todo lo que es consciente debe ser estudiado por su contenido. Al Rebe le gustaba mucho esta palabra “contenido” (תוכן). Quería que la gente estuviera llena de contenido, lo que sugiere que quería que la gente pasara por este proceso desde la verdad, al significado y al contenido.
verdad | inconsciente |
significado | Proyección del inconsciente sobre la mente consciente |
contenido | Mente consciente |
VIKTOR FRANKL
Ahora hablemos de Viktor Frankl. Fue un sobreviviente del Holocausto. Estuvo en campos de concentración durante 3 años, donde fueron asesinados todos en su familia, incluida su primera esposa embarazada. Tenía una hermana que pudo huir a Australia. Cuando salió de los campos de exterminio continuó su carrera en la Universidad de Viena. Fue el jefe del departamento pero todos los estudiantes eran seguidores de Freud y no asistían a sus conferencias.
Estaba tan desesperado que decidió dejar Viena y mudarse a Australia para estar con su hermana. Justo cuando estaba cumplimentando los papeles de inmigración a Australia, después de unas semanas que no había ido a trabajar, una mujer apareció en su puerta y le dijo: “Tengo un mensaje para usted del Rebe de Lubavitch”, de quien Frankl no sabía nada. No estaba de buen humor y no la recibió amablemente. Sin embargo, ella le dijo que el mensaje del Rebe era que no debía desesperarse, que siguiera trabajando y que finalmente su método prevalecería.
Cuando escuchó esto rompió en llanto. Ni siquiera sabía quién era el Rebe de Lubavitch. Le dijo a esta mujer, que más tarde se convirtió en amiga de la familia, que estaba a punto de dejar todo pero ahora que escuchó esto del Rebe decidió replantearlo y finalmente acabó convirtiéndose en el fundador de la Psicología Positiva, la forma de psicología más rectificada de nuestra generación.
Hay tres cartas en las que el Rebe lo menciona. Una de ellas es a un famoso neurólogo de Estados Unidos. Escribe que está sorprendido y dolido de que el método de Frankl no haya sido lo suficientemente publicitado. Hoy en día es muy popular, pero en aquel entonces aún no lo era. Luego hay una segunda carta en la que el Rebe elogia al único psicólogo que tuvo la osadía de ir contra Freud y todos los que le siguieron y entonces le menciona.
Hay una tercera carta en la que el Rebe responde a alguien que pensaba que el único tipo de psicología era la de Freud. Pero el Rebe escribe que esto no es cierto, sus mejores alumnos se pusieron en su contra. Menciona a Jung y Adler. Y luego menciona la psicología de Frankl. Por lo tanto, estos son tres testimonios de cuánto admiraba el Rebe el trabajo de Frankl.
LA NOCIÓN DE DI-S DE FRANKL
Con respecto a cada psicólogo uno podría preguntarse si cree en Di-s o no. A Frankl no le gustaba la religión organizada. Una vez más, el Rebe realmente abogó por su psicología y deseaba mucho que se extendiera por todo el mundo. Después de muchos años el Sheliaj de Jabad en Viena, el Rabino Biderman, pudo hablar con Frankl a pesar de la dificultad. Quería hablar con él porque resultó que todos los años Frankl enviaba una donación a Jabad en Viena.
¿En qué creía Frankl? Decía que un Di-s que exige a todos que crean en Él es un Di-s pequeño. En su primer matrimonio estuvo casado con una mujer judía que fue asesinada en el Holocausto. Cuando volvió a casarse, fue con una mujer no-judía, una mujer cristiana que puso una gran cruz en su casa. No fue hasta que falleció a la edad de 92 años, que descubrió que todos los días se ponía tefilín y rezaba de memoria lo que recordaba. Lo mismo hacía cuando viajaba, todo en secreto.
Frankl creía en Di-s, pero no en el Di-s de la religión oficial. Para él, Di-s es el significado último o Di-s está más allá del significado; esto insinúa el “Uno es la verdad”, ejad haemet (אֶחָד הָאֱמֶת) que está más allá de todo, o como él lo llama “meta-significado” (lo mismo que el significado último).
Para darle algún sentido a esta noción de Di-s como meta-significado, digamos que cuando se describe a Di-s como meta-significado, eso corresponde al nivel del alma conocido como jaiá, el nivel viviente del alma. Jaiá “toca y no toca” la mente. Está constantemente flotando sobre la mente, matei velo matei (מַטֵּי וְלָא מַטֵּי).
Pero cuando se refiere a un Di-s que está más allá de todo significado, se está refiriendo a la parte más elevada del alma, la Iejidá. Es una parte del supraconsciente que ni siquiera toca la mente. Por supuesto, no podemos quedarnos con la duda debido a su afirmación de que un Di-s que exige que se crea en él es un Di-s pequeño. La respuesta a su afirmación y él con certeza estaría de acuerdo con esto, es que Di-s es la esencia de todo bien. Lo que a él no le gusta al usar nuestra terminología es que Di-s se convierta en alguna especie de objeto. Por eso dice que si Di-s es una especie de objeto en el que todos deben creer, no quiere tener nada que ver con ello. Quiere un Di-s personal, un Di-s que sea enteramente bueno.
Hay una disputa bien conocida sobre si tenemos el mandamiento de creer en Di-s o no. Maimónides escribe que la fe en Di-s necesita ser convertida en conocimiento de Di-s. Este es el meta-significado. Pero otros argumentan que no se puede hacer de la fe un mandamiento. No se le puede ordenar a alguien que tenga fe. Lo mismo se pregunta acerca de “Amarás a Havaia tu Di-s”, ¿cómo puedes ordenar a alguien que ame? O lo haces o no lo haces. La fe, como el amor, es algo espontáneo desde el alma. El Baal Shem Tov respondió a esta pregunta diciendo que el mandamiento no consiste en tener fe, sino en reflexionar acerca de la fe, acerca de Di-s.
Así que si ahora me acercara a Frankl y le dijera que sí tenemos el mandamiento de tener fe, no es por otra razón que Di-s quiere que tengas solo el bien. No es que quiera forzarte.
CRECIMIENTO POSTRAUMÁTICO
Pasamos a otro tema muy importante: el crecimiento postraumático. Este es quizás el tema que hizo a Frankl popular en todo el mundo. Perdió en el Holocausto a toda su familia incluida a su joven esposa y salió de ello con un crecimiento espiritual. Hoy en día hay muchos estudios sobre personas que han experimentado un trauma y dan fe de haber experimentado un crecimiento postraumático. Entre un 30 y un 70 por ciento que afirma que eso experimentó, cuanto mayor es el trauma mayor es el crecimiento.
Conectaremos esto con el verso dicho sobre el Mashíaj: “Tzemaj es su nombre y desde debajo de sí brotará” (צֶמַח שְׁמוֹ וּמִתַּחְתָּיו יִצְמָח). Explicamos ahora que su crecimiento proviene de su trauma. Recientemente dijimos[4] que el mundo entiende al Mashíaj como una especie de figura trágica, que en la Biblia comienza con la figura del Tamuz. Dado que esta es la forma en que la gente entiende el lo que es el Mashíaj y queremos que el mundo entero espere al Mashíaj, entonces necesitamos explicar que, de hecho, el Mashíaj es alguien que pasa por ese trauma y luego experimenta a partir de él un crecimiento. El Zohar dice que quien descienda de su nivel, se asemeja a la muerte.
Así que ahora tenemos 3 aspectos diferentes de la psicología de Frankl: 1) hay un Di-s que está más allá del significado, 2) el hombre está motivado por su búsqueda de significado y 3) cómo la persona lidia con el trauma -esta es la esencia más importante de la psicología. Cuando una persona experimenta un crecimiento después de un trauma es capaz de servir a Di-s de una manera nueva. Al principio hay tinieblas y luego hay luz. El Mashíaj muestra esto. Esta es la fórmula mesiánica del Rebe de Orot de Tohu bekeilim de Tikún, incorporar a las luces del caos dentro de recipientes rectificados. Las luces caóticas son las que experimentaron la ruptura.
EL DESARROLLO HISTÓRICO DE LA ANSIEDAD
Pasemos ahora a otro tema importante: la ansiedad. En hebreo, podemos traducir “ansiedad” como חֲרָדָה, jaradá, que traduciremos como “pavor”, o דְּאָגָה, dagá, que traduciremos de nuevo al español como “preocupación”. Hay ansiedades existenciales. Una crisis de ansiedad es un ataque agudo de aparición repentina, pero la “preocupación” (דְּאָגָה) es continua; es un estado permanente. Ahora bien, la preocupación puede ser algo positivo, como cuando decimos que los secretos de la Torá sólo se revelan a aquel cuyo corazón está preocupado en su interior. Puede haber muchos temas diferentes para preocuparse. Uno podría preocuparse porque el Mashíaj no ha llegado, por qué hay maldad en el mundo…
En el pensamiento general, está dicho que hay 3 preocupaciones existenciales, que también son históricas: la preocupación más natural y primordial de la humanidad es la muerte. La ansiedad que surge del temor innato a la muerte, es llamada ansiedad del no ser: tengo miedo de dejar de existir.
Tras el desarrollo de la religión estructurada apareció un nuevo tipo de preocupación o ansiedad llamada culpa, un complejo de culpabilidad. Los estados y las iglesias se aprovechan de esta ansiedad. En Jasidut decimos que esto también podría ser una fuerza muy positiva. Los más grandes tzadikim se veían a sí mismos como la peor persona. También se les animó a trabajar más duro su sentimiento de no-ser.
La tercera ansiedad es la vacuidad. Esta es la ansiedad que tiene nuestra generación. Nuestra generación no le teme a la muerte ni a la culpa, sino a que no tengamos un sentido en la vida. Por supuesto así es como lo entiende Frankl.
Intelectual (מֻשְׂכָּל) muscal | Ansiedad por la falta de sentido |
Emocional (מֻרְגָּשׁ) murgash | Ansiedad por la culpa |
Conductual / innato (מֻטְבָּע) mutbá | Ansiedad por no ser (la muerte) |
Ahora bien, la ansiedad existencial de no tener un sentido proviene del ser, no del no-ser. De hecho, en cierto modo es incluso lo opuesto a la ansiedad del no-ser, porque es una ansiedad de que mi ser no tiene sentido.
Históricamente, ha habido un gran crecimiento a este respecto, pero aun así no debilita el nivel de ansiedad. Por el contrario, la última, el sinsentido podría ser mucho peor que la ansiedad del no-ser.
¿Cómo aparecen estas tres ansiedades existenciales en la vida judía contemporánea?
La situación en el mundo judío y particularmente en la Tierra de Israel es tal que estas ansiedades nos impiden, colectivamente, ser capaces de vencer plenamente a nuestros enemigos. Establecimos un estado a pesar de la oposición de nuestros vecinos. Esto conduce a un miedo, preocupación y ansiedad existencial – particularmente entre los sionistas radicales – de que en un momento el Estado será destruido, morirá. Esto es verdaderamente un reflejo del miedo a la muerte, en este caso la desaparición de lo más precioso a sus ojos: la existencia del pueblo judío como pueblo, en su opinión.
En cuanto a la culpa, hay algo aún más profundo. La principal fuente de culpa personal es el cristianismo, que utiliza la carga de la culpa para controlar a sus seguidores. Para los judíos la principal culpa no es tanto la culpa personal, sino la culpa de que “a causa de nuestros pecados fuimos exiliados de nuestra tierra”, no mis pecados personales sino nuestros pecados colectivos.
Así que tenemos una culpa colectiva; tenemos ansiedad de que somos “una nación culpable”. Esencialmente, esto es una copia, un reflejo, de lo que las naciones dicen de nosotros. ¿Cuándo alcanzó esto su punto máximo de nitidez? Realmente durante el Holocausto. Como es sabido, la psicología de muchas personas durante el Holocausto era que la víctima justificaba al agresor. Estas dos ansiedades juntas ya nos impiden actuar como deberíamos, porque neutralizan y anulan nuestra capacidad de triunfar por completo.
El tercer factor, la principal ansiedad existencial de nuestra generación es el vacío, nos hace sentir que el esfuerzo por triunfar no merece la pena, ya que nada vale realmente la pena. Sentimos que la realidad está vacía de significado. Se trata de una preocupación que neutraliza la fuerza para llegar hasta el final, porque el esfuerzo no merece la pena. Esto es solo un ejemplo de cómo entender nuestra falta de capacidad para ganar nuestras guerras debido a estas 3 ansiedades existenciales.
[1] Rashi en Éxodo 38:22
[2] Job 12:11
[3] Viktor Frankl también puede ser identificado como el precursor del desarrollo moderno de la Psicología Positiva
[4] Clase dada en la víspera del 4 de Shevat, este año 5785
Excelente artículo. Muy clara la, exposición.